Lucharé.

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— Vamos.

El albino había salido sonriendo de aquel baño, sin embargo, también acariciando la mejilla donde aquel joven le había propiciado una bofetada; Siempre tan salvaje. La sonrisa de satisfacción le dejaban ver a la chica que los planes habían salido bien, o al menos había tenido un avance positivo con la persona que bien sabía amaba. Aunque la explicación fue un tanto decepcionante o mejor dicho, preocupante para ella.

— Creo que no será tan sencillo.

Expresó con el ceño arrugado viendo incrédula a su amigo, en realidad, en otras circunstancias él habría ido en busca de Valt y gritado a los cuatro vientos que lo amaba, aunque ahora hacer algo como eso sería contraproducente para su futura conquista.

— Lo se... pero vale la pena — sonrió enamorado.

Miraba por la ventana, los grandes edificios de la ciudad por alguna razón se veían hermoso esa noche, más que en ninguna otra. Su pequeña hija dormía tranquila a un lado de él en la silla para bebés, la chica estaba del otro lado también obscervando la ciudad nocturna. Era simplemente encantador el paisaje. Aunque para ambos el hermoso anochecer y los pensamientos que tenían en ese momento fueron perturbados por una misma persona, alguien que sabían no dejaría las cosas tan sencillas como llegasen a pensar.

— Boa

Al mismo tiempo y girando a verse pronunciaron aquel nombre, como si fuese alguna maldición. Aquel chico era un tremendo obstáculos que se interpondría entre la felicidad y él. Sin duda algo se lo que deberían preocuparse.

— ¿Que piensas hacer? — pregunto la chica al ver qué aquel posaba sus ojos sobre la pequeña, su hija se veía tranquila mientras él se veía triste y de alguna manera... impotente.

— Divorciarme.

Era claro que debía de hacerlo, ellos desde un principio no estaban bien y si ahora, con la llegada de Valt había decido pedir el divorcio, pero no era del todo el motivo. Valt solo era el detonante, habían pasado meses que ni siquiera se hablaban y eso, sabía perfectamente que estaba afectando el desarrollo de la pequeña Hinami ya que, para una niña de su edad, apenas y hablaba. Ahora se encontraba en un "tregua" por decirlo de alguna manera, Boa había accedido a estar en paz o al menos eso había dicho, pero con la pelea de ese día no estaba muy convencido que fuera de aquella manera. El divorcio ya había pasado muchas veces por su cabeza pero Hinami estaba de por medio, sabía que la pequeña necesitaba de ambos, sin embargo, ahora era más que claro que Boa en lugar de ayudar, afectaba a la niña.

— Es por Valt ¿Cierto?

— Es... por todo.

Se escuchaba cansado. No era simplemente cansancio físico por el trabajo y el día pesado que había tenido. Las constantes peleas, los gritos, las acusaciones y todo lo que Boa hacia le había cansado mentalmente al punto de no querer llegar a su hogar. Su rostro también lo reflejaba, esas ojeras era por todas las noches en las que prefería estar despierto tomando que ir a su casa y ver a Boa después de un largo día de trabajo, y es que en realidad la única razón por la que se paraba por aquel edificio era por la pequeña a la cual amaba.

— Es difícil Shu... no lo amas y es por esa razón, si no fuera así sería distinto.

— Él nunca fue fácil Lilia — dijo con pesadez soltando un suspiro mientras regresaba los ojos a los edificios. La chica aún lo veía — Por eso... jamás me enamoré de él en realidad. Boa siempre ha sido del tipo que solo piensa en él y nada más, solo alguien superficial.

— Puedo notarlo — dijo riendo un poco, él al igual lo hizo. Ambos se quedaron en silencio, aquella conversación se estaba tornado cada vez más gris, ninguno estaba bien con la conducta del mencionado, pero ambos seguían aguantando eso y se sentían tontos por hacerlo — Creo que será peor — la chica hablo después de un rato, el asintió con la cabeza a la afirmación.

Quiero Recuperarte (2ᵈᵃ ᵗᵉᵐᵖᵒʳᵃᵈᵃ ᵈᵉ ᵐᵃᵗʳⁱᵐᵒⁿⁱᵒ ᵃʳʳᵉᵍˡᵃᵈᵒ)Where stories live. Discover now