Capítulo 15

Mulai dari awal
                                    

-No me seas cochina, Harper. Nadie quiere saber nada sobre vuestros jueguecitos en la cama.

-Serás imbécil.

-Parece que hoy todos os empeñáis en llamarme imbécil -se queja.

-Será porque hoy te comportas como uno -remarca Archer, que fue el primero en decírselo.

-¿Queréis dejar terminar de hablar a Cornell? -los interrumpo a todos con mi impaciencia-. Estamos perdiendo un tiempo valiosísimo.

-A sus órdenes, mi capitana -replica Fisher.

-Imbécil -uso el mismo insulto a propósito, solo que conmigo no se cabrea, sino que tira de mí y me roba un beso.

-Nos hicimos muy amigos con los años y mantuvimos el contacto durante bastante tiempo -continúa Cornell después de sonreírme en agradecimiento-. Y resulta que trabaja en una empresa de seguridad muy conocida en Italia. Si hablase con él, es posible que nos echase una mano. O al menos podría indicarnos dónde comprar armas no registradas, una vez allí.

-¿Qué te hace pensar que sabrá dónde conseguirlas? -le pregunta Simmons.

-Lo sabrá -sentencia. Y como no suele hablar demasiado, cuando lo hace siempre le creemos sin pedirle explicaciones ni pruebas. Es la ventaja de ser Cornell, supongo. En mi caso, no puedo estar callada tanto tiempo ni aunque eso me reportase beneficios. Necesito decir lo que pienso justo en el momento en que lo pienso.

-Bien. Llámalo a ver qué te dice -le pide Simmons-. No es necesario que te diga que debes ser discreto por teléfono...

-Copiado -le responde al tiempo que saca su teléfono del bolsillo. Se aleja de nosotros para hablar con tranquilidad, pero es imposible no escucharlo usar el italiano de manera fluida. Y luego dice que solo se sabe hacer entender. 

-Bueno -Simmons nos mira uno por uno-, ahora falta confirmar que Alessandro iba en ese vuelo.

-Está confirmado -como si decirlo le diese voz a DK, lo escuchamos ahora a él-. Y ya tengo vuelo para todos nosotros también. Salimos en una hora, así que será mejor darnos prisa porque si lo perdemos, no habrá otro hasta mañana.

-Eres el mejor -le doy un beso en la mejilla y sonríe.

-¿Has oído, Fisher? -lo provoca-. Tu novia dice que soy el mejor.

-Con la tecnología puede -le responde él-, pero no es tu nombre el que grita en la cama.

-Biff -lo golpeo con fuerza en el brazo- ¿Se puede saber a qué coño ha venido eso?

-Solo hablábamos, cariño -pone su mejor cara de inocencia y no puedo evitar sonreír. Con él es imposible cabrearse, sobre todo si yo soy igual a él.

-Solo por joder, un día gritaré su nombre -lo amenazo.

-¡Eh, eh! A mí no me metáis en vuestros rollos de pareja -ríe DK-. Grita el nombre de otro si quieres, Joy, pero yo tengo que trabajar después con él y seguro que se vuelve insoportable por tu culpa. No quiero que me meta una granada en los pantalones cuando no mire.

-Cobarde -le saco la lengua.

Siempre quise trabajar con ellos y debo admitir que, por el momento, es mejor de lo que me esperaba. En las barbacoas de mi padre participo en las bromas, pero estar entre ellos mientras organizamos una misión de busca y captura es increíble. Sé que no tendré más oportunidades de compartir misión con ellos, así que lo aprovecharé al máximo. Y más todavía cuando no me dicen que me quede al margen. No es algo que haría por mucho que protestasen, pero me gusta que no lo insinúen siquiera.

Joy (Saga SEAL 8)Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang