Ruin- Rachel van dyken

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Sinopsis

No soy tu chica típica. He estado escapándome de los recuerdos que me atormentan por tanto tiempo que la depresión se ha convertido en mi único consuelo. Estaba contenta en la oscuridad... hasta que Wes Michals ofreciera ser mi luz.

Sabía que el tiempo no era mi aliado -que cada segundo que pasaba era un paso más cerca hacia el final de algo que comenzaba a significar el final de mi misma. Él trató de advertirme. Me prometió todo lo que él fue capaz de ofrecer -cada momento llegó- pero nunca sería suficiente.

A veces cuando piensas que esto es el final, este es sólo el principio. Wes pensó que podía salvarme, pero al darme todo, él me arruinó. Porque después de un beso, de un toque, yo no podría -no volvería a ser la misma.

Y a partir de aquel momento, los latidos de su corazón se convirtieron en los míos.

FRASES

—Las personas verdaderamente débiles en esta vida son las que no pueden admitir que necesitan ayuda.

***

Fue el primer abrazo verdadero que había recibido desde que mi hermano había muerto. No le dije eso, pero en ese momento, abrazándola, consolándola... La muerte no parecía tan mala ya. El futuro no parecía sombrío. Porque cuándo ella se retiró... cuándo sus ojos se encontraron con los míos, vi esperanza.

***

—Me gusta ella. Quiero pasar tiempo con ella y tiempo es algo que realmente no tengo. Es un lujo ¿sabes? La gente no se da cuenta de lo suertuda que es. ¿Siquiera te das cuenta de lo mucho que me molesta cuando la gente se queja de cosas tontas como que su almuerzo es una mierda o que su café sabe mal? Bebería café de mierda y comería alimentos en mal estado por el resto de mi vida si pudiera tener una vida.

***

—Te puedo decir que tienes un buen corazón... —suspiré abriendo la puerta al exterior—... Porque en el momento en el que te conocí, quise pelear por él.

***

—¿Por qué me estás mirando cómo si hubieses descubierto la gravedad?

—Porque lo hice —sonrió con superioridad.

—Tiene que ser algo bueno.

—Tú

***

—Hermosa novia.

Miré hacia la enfermera, sin importarme que probablemente iba a pensar que estaba loco y dije:

—La haría mi esposa si pudiera. La enfermera sonrió y palmeó mi brazo.

—No te rindas todavía. Algunas veces cuando pensamos que Dios ha escrito El Fin, lo que realmente quiere decir es El Comienzo.

***

―Ven aquí. ―Levanté mis manos hacia ella. En un instante estaba en mis brazos, con la cabeza hundida en mi pecho—. Te amo, pequeña oveja.

―También te amo, lobo. ―Sollozó―. Tú eres mi favorito.

―Favorito en ¿qué? Apartó sus ojos llenos de esperanza.

-Mi favorito en todo. Tú eres mi favorito. En todas las cosas que yo tendría en el mundo como favoritas, tú ganas. Tú ganas en todo eso.

***

—Todas las noches... cuando cierro los ojos... mi mayor temor no es morir, no se trata de tener el cáncer de nuevo o algo loco pasando como perder todos los dientes o el pelo. —Tragué—. Mi mayor miedo, lo que atormenta cada uno de mis momentos de vigilia y sueño, es abrir los ojos y no ver tu cara

***

Silencié su boca y encontré que el miedo se iba... porque al final, ella estaba en lo cierto, y tenía que escuchar mi propio maldito consejo. Lo captaba ahora, y eso era suficiente. Siempre sería suficiente cuando Kiersten estuviera preocupada porque era mi pasado, presente y futuro.

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