Permanece a mi lado por favor...(Shoto Todoroki)

El centro comercial

Es enero, el segundo día de escuela, hablé con Masaki, y en esa larga conversación acordamos los siguientes puntos: Hoy iré a la escuela (el insistió en que no y que debía quedarme a descansar, pero yo pienso que mi madre hubiera querido que siguiera trabajando duro); él se irá en unos días, quería quedarse una semana más para cuidar de mi y mi padre, pero el hospital no le da permiso de irse mucho tiempo.

Me preparé para ir a la UA, mi padre se ofreció a llevarme así que subí a su auto.

-Masako, hoy tendré una cita con un arquitecto y un empresario, vieron el proyecto actual y me insistieron en tener una reunión.

-¡Genial! ¡Estoy muy feliz por ti!

Sonrió al escuchar mi respuesta, y cuando llegamos a la UA él se despidió diciendo...

-¡Esfuérzate mucho Masako!

-¡Gracias Papá!

Salí del auto y entre a la escuela. Cuando llegué al salón Shoto miró sorprendido.

-Pensé que no vendrías hoy.

-No quería perderme de nada, ademas, que iba a hacer sola y triste en casa.

Acomodé mis cosas y me senté en mi lugar, después me volteé para mirarlo.

-Tienes razón, que bueno que viniste.

La clase comenzó, mantenerme ocupada si me ayudó a distraerme y pensar en otras cosas.

Cuando las clases terminaron, pensaba regresar a mi casa como cualquier otro día.

-¿Oye me acompañas a comprar un teléfono al centro comercial?- dijo Shoto invitándome, tomamos nuestras cosas y caminamos fuera de la UA.

-¿Por qué no dices nada?

-No se, no encuentro nada que decir.

-Otra ves tendrás que romper el hielo.

-Jajajaja.

Seguimos caminando, y se me ocurrió algo que decir.

-Oye...¿has tenido novia?

-Mmm no.

-¿Por qué?

-No lo sé, supongo que nunca me ha gustado nadie.

-Mmm eso parece imposible, pero como eres tú supongo que es cierto.

Él me miró de repente y confundido me pregunto.

-¿Tú has tenido novio?

-No, nunca he tenido uno.

-¿Por qué?

-Supongo que los hombres generalmente buscan chicas femeninas, que sean pequeñas tiernas y débiles, el problema es que yo soy demasiado fuerte, y nadie quiere una novia más fuerte.

-¿Segura? porque no creo que sea eso.

-¿Por qué?

-Porque eres mucho más que solo tú fuerza, eres bonita, amable, inteligente, servicial y eres muy expresiva, además, me han dicho que ha varios chicos les gustas.

-¿¡Enserio?!

Lo mire con los ojos bien abiertos, estaba sorprendida, así que con una sonrisa le dije.

-¿Quienes? ¿Qué chicos?

-Nadie.

-Acabas de decir que sabes de unos chicos a los que les gusto, ¡¿quienes son?!

-No te dire, les dije que te gusta otra persona.

-¡¿Tú como sabes eso?!

-¿Es así?

-Mmm...bueno...sí, pero no tenías que decirles eso, ademas, ¿por qué no quieres decirme quienes son?

-Ya llegamos.

Él señaló el centro comercial ignorando mi pregunta. Yo lo dejé pasar y entramos juntos a la tienda de teléfonos.

-¿Puede mostrarme el nuevo modelo?

Le dijo Shoto al muchacho que nos atendía, el asintió y le llevó un teléfono que acaba de salir hace poco, se veía genial y tenía un color morado hermoso.

Pero Shoto solo observo de arriba hacia abajo y de atrás hacia adelante todo el teléfono, después me miro a mi y preguntó.

-¿Te gusta?

Lo mire confundida, levante los hombros y dije.

-Pues sí, es un teléfono genial.

Después miro al chico y le dijo que se lo llevaría, fuimos a la caja a pagarlo y después salimos de la tienda.

-Bueno, ¿qué hace- me interrumpió.

-Toma.

Shoto me miró y estiro su mano con la bolsa que tenía el teléfono, giré mi cabeza confundida.

-¿Qué?

-Es para ti.

-No puedo aceptarlo, ¿por qué me regalas algo así de la nada?

-Tu teléfono no funciona, me pareció que debiste estar sufriendo mucho porque siempre te la pasabas marcándome, mandándome audios y videos, y si algo te pasa no tendrías con que comunicarte.

Mi boca se abrió de la sorpresa y sonreí por la intención, pero aún así sentía que no debida aceptarlo.

-Enserio no era necesario, y no puedo aceptarlo.

-Sí no lo aceptas entonces tendré que tirarlo.

-¿Ay como crees? Podrías regresarlo, pero esta bien lo aceptaré. ¡Gracias!

Tomé la bolsa y me acerque a su mejilla para darle un pequeño beso como agradecimiento.

-¿Te parece si vamos a tomar un frappe? Esta vez yo invito.

-De acuerdo

Fuimos a la cafetería justo como la otra vez, pero ahora sí pague yo.

-Veamos el teléfono.

Lo saqué de la bolsa y lo abrí, lo mire y me fascinaba el color morado que tiene, lo encendí e inicié sesión.

-Dicen que tiene una cámara muy buena, ¿puedo verla?

-¡Claro!

Le di el teléfono y él puso la aplicación de la cámara. Después solo escuché el sonido de la cámara haciendo ese sonido de cuando se toma una foto. Él me devolvió el teléfono y mire la foto.

-Jajajaja sí tiene una buena cámara.

Terminando nuestras bebidas, salimos del lugar y fuimos cada quien a su casa.

Al entrar a mi casa vi que mi papá y mi hermano estaban sentados en la mesa de la cocina, ellos hablaban de algo y parece que discutían.

-¿Pero que va a hacer? ¿No te da miedo dejarla sola?

-Ya no es una niña Masaki, ¡entiéndelo!

Sin decir nada solo entré, deje las llaves a un lado y me paré cerca, al notar mi presencia ambos me miraron.