La Nieta de Dumbledore. (3)

Un collar.

La navidad no era lo que Liliana había esperado este año, amaba hacer los regalos para sus profesores. 

La nieve caía por los terrenos del castillo, Pevees cantaba villancicos grotescos y todo era más alegre. No se frustraba usar su daga a menos de que fuera una emergencia si le protegía de aquellos libros que aún no encontraba la forma de quitar aquel encantamiento, no entendía cómo lo lograría sin poder decirle a alguien que le ayude.

Después de desayunar con Nott en el Gran Comedor, y un Slytherin de mayor grado que se quedó en Hogwarts, Ekaitza llegó volando donde ella con una nota en su pico. Al verla vio la letra dispareja de Hagrid, sonrió mientras abría su carta.

Me ha llegado la carta del consejo escolar.
Necesito que la veas.

Hagrid.

Liliana se levantó de golpe y miró a Theodore. — Theo, tengo que irme, nos vemos después.

— ¿Oye? ¿Todo está bien?

Pero Liliana no respondió corrió como pudo para llegar a la cabaña, abrió la puerta y vio a Hagrid quien sollozaba de dolor, Fang, Potter, Granger y Weasley, al llegar, se tomó unos segundos en hablar mientras recuperaba el aire.

— ¿Qu..qué dice la carta?... — dijo casi desvaneciéndose. 

— ¡Rojita! — grito, Theodore, yendo detrás de ella. — ¡Espera!

— ¿T...Theo? — murmuro.

Theodore llego a su lado, arrugo la nariz, mirando tanto a los magos de Gryffindor como a la cabaña. — Vine porque me preocupé.

— Creo que tienes que ver esto. — dijo Potter. — Pero pasen, o... se van a resfriar.

Ambos magos entraron y Potter le entregó la carta y la empezó a leer.

Estimado Señor Hagrid:

En relación con nuestra indagación sobre el ataque de un hipogrifo a un alumno que tuvo lugar en una de sus clases, hemos aceptado la garantía del profesor Dumbledore de que usted, ni la Señorita Snape, no tienen responsabilidad en tan lamentable incidente.

Sin embargo, debemos hacer constar nuestra preocupación en lo que concierne al mencionado hipogrifo. Hemos decidido dar curso a la queja oficial presentada por el Señor Lucius Malfoy, y este asunto será, por lo tanto, llevado ante la Comisión para las Criaturas Peligrosas. La vista tendrá lugar el día 20 de abril. Le rogamos que se presente con el hipogrifo en las oficinas londinenses de la Comisión, en el día indicado. Mientras tanto, el hipogrifo deberá permanecer atado y aislado.

Atentamente.

El Consejo Escolar.

— No... — susurro. Liliana sentía más frío que el propio invierno en su cuerpo.  Theodore la sujeto de los hombros, para que no se cayera. — Esos bastardos.... — dijo entre dientes.

— Fue Lucius... — murmuro, Theodore con recelo. — No me cabe duda.

— Aun hay oportunidad, en la Comisión para las Criaturas Peligrosas verán que Buckbeak es inocente. — declaró Weasley con seguridad. — ¡Lucius no tiene oportunidad!

— No seas idiota, con una movida de su dinero y ya los tendrá a sus pies. — Theodore se cruzó de brazos y Weasley le miro mal.

— ¿No todos flaquean frente al dinero, ¿sabes?