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Rafe Cameron.

—Esto es una mierda.—Murmuró la morena mientras se miraba en el espejo del baño. Yo estaba detrás de ella mirando su reflejo.—¿Porque tarda tanto en curarse? —Tocó las heridas de su rostro con frustración como si no le dolieran.

—Skyler.—La regañé para que dejará su rostro tranquilo.—Lleva tiempo.

—No, quiero que se vayan ya.—Gruñó aún tocando las heridas. Suspiré cansado y me acerqué a ella girándola hacia mi para que dejara de ver su reflejo.

—¿Que sucede? —Tomé sus muñecas alejando sus manos de su rostro. Me miró seriamente sin decir ni una palabra.—Dime Sky, hace días que vienes mirándote al espejo durante horas como si eso fuera a acelerar la curación.

Su semblante serio cambió de repente, recién parecía que iba a matar a alguien con la mirada mientras que ahora lucía como un cachorro perdido.

Sin decir una palabra salió despedida por la puerta del baño, seguí su paso confundido por el pasillo de la casa de John B. Afortunadamente no había nadie por lo tanto podría hablar con la morena tranquilamente.

Sus pasos eran más rápido de lo que esperaba, de pronto estaba tendida sobre su cama mirando el techo.

—Sky.—La llamé inquieto, algo más estaba pasando por su cabeza y eso me asustaba.—¿Que sucede? —Bajé el tono de voz mientras me sentaba a su lado en la pequeña cama.

—Quiero que de una puta vez dejes de verme llorar.—Su voz se quebró.—Parezco una maldita llorona.

—Es normal con todo lo que te ha pasado.—Acaricié su cabello. —Sería raro que no llorarás. Ahora dime que sucedió en el baño, no dejabas de tocarte el rostro.

Un suspiro pesado dejo su boca, se acomodó en mi pecho rodeándome con sus brazos como si fuera a irme a algún lado. Mi corazón se sintió cálido con ella de esta forma.

—Estas marcas son un recordatorio permanente de todo lo que he pasado, no quiero más recordatorios de mi padre.—Murmuró contra mi pecho.

—Ya se irán, pero tienes que dejar de tocarlas.—Abrace su pequeño torso.

—Luzco como la mierda.—Se quejó otra vez, debe haber sido la primera vez en mucho tiempo que Skyler no lucía tan brillante como siempre. Deslumbraba con su carácter alegre pero ahora parecía algo apagada.

De cierta forma la entendía, su padre casi la mata a golpes y pensar en eso me hervía la sangre. Estaría golpeándolo ahora mismo si no estuviera en proceso para ir a prisión. Eso quitó un poco de presión es la morena ya que no debía estar cuidando su espalda cada momento.

Quería que Sky volviera a brillar con la misma fuerza. Para mi suerte, en exactamente dos días era su cumpleaños número dieciocho. Quería darle un lindo regalo y también pedirle que fuera mi novia, jamás había estado tan seguro de algo como lo estaba con ella. Ya había pasado mucho tiempo y yo quería decir que oficialmente estaba de novio con la morena mas linda de la isla. Pensar en eso me revolvía el estómago de nervios y emoción, quería esto hace tiempo. Y iba a hacerlo.

John B y Sarah no estarían para su cumpleaños ya que hoy por la mañana partieron a Bahamas. Iban a hacerlo hace varios días pero se quedaron al enterarse lo de Skyler.

Por suerte Kiara, JJ y Pope si estarían presentes. Me sentía seguro al saber que la morena estaba rodeada de buena compañía, lo supe desde el momento que estuvieron allí para ella luego de la gran golpiza.

JJ estuvo sobre ella casi todo el tiempo, aveces sentía celos pero si Skyler se enteraba de esa inseguridad iba a maldecirme por ser tan idiota.

De todas formas aquel rubio había hecho las cosas bien, ahora mismo estaba tomando el turno de Skyler en el trabajo para que no la despidieran, lo había hecho toda la semana a pesar de que ella se negará.

Burn out. [Rafe Cameron] OBXWhere stories live. Discover now