Maratón 2/3
FERNANDA
-Estaba en el sótano, ya había llegado a la casa, era demasiado temprano, hoy no he dormido aquí, he dormido en un hotel, pero de todas formas me levanté temprano y vine a la casa a mirar algunas cosas, en las habitaciones no había nada y todas estaban vacías, pero el sótano estaba lleno de cajas, había ropa, CDs, fotografías de mi madre cuando iba a la universidad, cosas de ella antes de casarse con mi padre y trastos, muchos trastos.
-Agarré una caja llena de cosas que me llamaban la atención y subí al salón donde había más luz.
-Allí en el suelo le di la vuelta a una caja y dejé que todo cayera, abrí algunos álbumes, y observé fotografías, también vi un cuaderno de firmas, suelen hacerlo cuando cambias de lugar o de ciudad, tus amigos suelen hacerte uno, así que leí uno por uno, la mayoría era de chicas pero entre todos siempre hay uno que llamaba la atención...
-"Por lo que tenemos, por lo que somos, porque nadie sea mejor ni peor, diferentes razas y clases y yo te conocí a ti, te amo, siempre será la luna nuestra testigo y ojalá cumplamos nuestras promesas... Te amo mi niña".
-Ese comentario me dejó noqueada, ni siquiera puso su nombre al final... ¿Quién sería?... Observé otro más abajo...
"Sabes que este es un pueblo pequeño y de tan pequeño es grande en magia, secretos y tumbas que hablan, sabes que aquí siempre sale a flote como las olas en el mar... Por siempre Lucía"
-¿Secretos y tumbas, de que hablan?, Esta gente es rara y misteriosa, mi corazón se acelera cuando escucho el timbre de la puerta, me pongo en pie y camino hacia la puerta, la abro y encuentro una castaña con mechas californianas rubia, ojos verdes y unos labios algo finos...
Fer: ¿Hola?
"Hola". -Ni siquiera sonríe, parece algo mayor que yo aunque su ropa la hace ver como colegiala. -Soy Michelle, me han dicho que buscas una sirvienta...
Fer: Mmm sí, pero eres muy joven.
Michelle: ¿Quieres una anciana?
Fer: No, no... ¿Sabes limpiar? -Ella suspira.
Michelle: No, vengo a pedir trabajo por gusto sin saber hacerlo. -Dice irónica. -Todo el mundo sabe limpiar... -Que carácter.
Fer: OK, pues pasa... -Me hago a un lado y ella camina hacia el salón.
Michel: ¿Cuánto me vas a pagar?
Fer: Lo que tú quieras...
Michelle: ¿1.000?
Fer: Si ese es tu precio... -Ella se acerca más a mí, el dinero no era un problema para mí.
Michelle: Mi precio es otro... Pero eso ya lo vamos viendo. -Me guiña.
-Sacudo mi cabeza.
Fer: Bien... Pues si quieres puedes empezar...
Michelle: Claro, ¿hay material?
Fer: No...
Michelle: ¿Y qué esperas para comprarlo?
Fer: No, no sé que necesitas...
Michelle: Pues dame el dinero y voy yo. -Saco mi billetera y le entrego varios billetes. -Gracias... ¿Cómo es tu nombre?.
Fer: Fernanda Del Valle...
Michelle: De acuerdo Fernanda, voy a comprar.
Fer: Perdón... Pero prefiero que me digas señora, que mantengamos distancia, ahora eres mi trabajadora.