𝖈𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 𝖛𝖊𝖎𝖓𝖙𝖎𝖘𝖎𝖊𝖙𝖊

Start from the beginning
                                    

─ Pequeño travieso ─ murmura con una sonrisa pequeña.

Taehyung quisiera que su cuerpo ya comenzará a producir leche para poder alimentarlo, pero aún no lo hacía. No sabía cuántos días tendría que esperar, pero esperaba que fuera lo más pronto posible.

─ ¿Deberé ponerte un nombre? ─ dijo en voz alta y el bebé soltó un balbuceo ─ No lo sé, ¿Qué tal si no te gusta?

Quería aferrarse a la idea de que si lo nombraba, sería un niño fuerte ante la adversidad en la que se presentaban ellos junto con los demás omegas y cachorros.

Algo corto, para llamarle y que el cachorro supiera que es él, es a quien el omega llama.

─ Pequeño Jihu ─ dijo el mayor acariciando su cabecita ─ Porque tienes una personalidad muy fuerte ─ sonrió y se inclinó para darle un besito en la frente ─ Tú eres Jihu y yo soy Taehyung.

El omega lamió sus labios, sintiéndose muy temeroso, pero a la vez esto le daba algo de fuerza. El pequeño Jihu fue demasiado fuerte como para sobrevivir y, ganarse un nombre; ya que, Taehyung sentía que no había necesidad de nombrarlo si es que llegaba a morir, pero después de todos estos días este fuerte guerrero se ha mantenido, junto con él

El mayor lo arrulló, como si esperara que le diera una respuesta. Pero, en cambio, el cachorro se agitaba porque su apetito era voraz.

Así que para estos casos, el omega remojaba los trozos de pan que traían los soldados en la leche de vaca lo suficiente dentro del plato de madera que conservó, con sus manos lavadas en el río, aplanaba con la punta de los dedos hasta volverlo lo más liquido posible. Sabía que, la leche por sí sola no lograría calmar el hambre del pequeño si llegaba a comer una o dos veces al día, era muy poco. Así que, trataba de darle lo más que se pudiera antes de que la leche se cortara por el calor o los hicieran caminar más y más.

El omega lloró muchísimo por varias noches porque sabía la gran responsabilidad que era cuidar de un bebé. pues, ahora era lo doble sin poder ver.

Se sentía un completo inútil cuando el bebé lloraba de hambre, cuando seguramente se imaginaba su rostro rojo e hinchado por el llanto. Cuando el pañal improvisado hecho de tela para el cachorro se llenaba de sus desechos o salían escurriéndose por sus piernitas. Taehyung no tenía los materiales indispensables para solventar todas esas necesidades, pero aun así había hecho su mejor trabajo, tratando de cubrirlas aunque no sea por completo.

Si no podía con este niño, ¿Qué haría cuando naciera el suyo? ¿A qué clase de vida lo estaría condenándolo al tener un padre ciego?

El estrés le terminaría quitando esos rizos largos de la cabeza, tal vez. Las lágrimas borrarían los rastros de suciedad, y, seguramente algún día amanecería muerto.

El cuerpo se le erizaba y su cabeza punzaba cada que pensaba en eso. Su lobo se retorcía de dolor al notar como su lado humano pensaba en la muerte más frecuentemente que nunca; incluso cuando anteriormente tenía esas ideas suicidas donde la muerte, parecería un descanso después de tantas tragedias por las que pasó.

Ahora, una sentencia de muerte parecía ser una canción tocada para marcar su fin, como un castigo y no un descanso. Algo a lo que, está condenado si no se salva pronto.

De pie, descalzo con sus dedos sintiendo el césped debajo de estos, suelta un suspiro pesado, pues, no puede rendirse, no tan rápido, no aún.

Cuando el cachorro ya se había dormido y recién comido lo que el mayor le dio, lo recostó en ese nido improvisado a un lado de un árbol y lo dejó descansar.

Las cigarras hacían sonido en la noche, el omega no podría ver el cielo pero sí que estaba atento a los olores y los sonidos. él era uno de los primeros en saber si los soldados se acercaban.

𝐋𝐄𝐀𝐕𝐄 𝐓𝐇𝐄 𝐀𝐋𝐏𝐇𝐀 ᵏᵒᵒᵏᵛWhere stories live. Discover now