Entrada en escena

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Después del incidente de la misión del laboratorio, Reaker comenzó a cuestionarse si en realidad estaba listo para volver a salir, pero al mismo tiempo mi desempeño en combate justificaba mi inexperiencia por lo que al final me quede en el equipo. Aun así, eso no me salvo de la paliza que recibí cuando hicimos el reporte de la misión pues a final de cuentas el parcial fracaso de la misión fue mi culpa. Aun cuando ya llevaba suficiente tiempo viviendo como cambiante seguía sorprendiéndome lo rápido que nos podíamos curar, no sanaba a la misma velocidad que Vemon o Deadpool, pero fue suficiente para recuperarme de la putiza en un tiempo relativamente corto.

Al día siguiente nos asignaron una nueva misión: infiltración y reconocimiento. Las misiones de reconocimiento tenían un único propósito: encontrar poblados, preferiblemente alejados del resto de la civilización, para aprender acerca de ellos y realizar ataques eficientes en un futuro. Estas misiones se estaban haciendo con cada vez más frecuencia ya que se nos estaba acabando el amor y aunque tuviéramos "comida" esta jamás sustituiría a la base de nuestra dieta. Todo parecía indicar que las cosas iban a salir de acuerdo con el plan y nada podría salir mal y eso me era reconfortante. Sin embargo, esa confianza y certeza se disipo cuando me entere del destino de nuestra misión: Ponyville.

El problema no era el hecho de por fin poder visitar ese pequeño pueblo lleno de paz y alegría. El verdadero problema era quienes habitaban en dicho poblado. Con las mane 6 rondando por ahí, si es que ya se habían conocido; era innegable que las cosas se volverían tremendamente más complicadas y aunque esto último resultaba incierto tenía un mal presentimiento de como acabarían las cosas, pero no dije nada con tal de que no me consideraran un cobarde.

Independientemente de lo anterior acercarnos a Ponyville era algo que no dejaba de preocuparme ya que ese pueblo no estaba tan alejado como otros del resto de la civilización, por lo que ir hasta allá solo significaba que ya no encontrábamos suficiente amor en los poblados aislados y necesitábamos hallar una fuente de alimento lo suficientemente grande o todos moriríamos de hambre. En otras palabras, era cuestión de tiempo para comenzar a invadir las grandes ciudades.

Luego de varios días de viaje logramos llegar a nuestro destino o más bien a la futura ubicación de nuestro campamento. El bosque Everfree resultaba ser más amenazante de lo que aparentaba con sus árboles torcidos, su terreno hostil y las mil y un rarezas que habitaban en él. Más de una vez nos topábamos con alguna criatura peligrosa, pero ninguna represento un problema, pues antes de que nos detectara nos ocultábamos hasta que se iba.

Cuando terminamos de levantar el campamento nos dirigimos a la frontera del bosque con tal de tener una mejor vista del pueblo. Cada uno tomo una forma diferente en caso de que nos vieran y nos acercamos un poco al pueblo. Unas cuantas casas se alzaban no muy lejos de donde estábamos, mientras que ponis de colores vivían felices haciendo sus respectivas tareas del día a día. Cuando confirmamos nuestro destino regresamos al campamento y comenzamos a realizar un plan.

Una vez analizadas nuestras opciones decidimos que nuestro siguiente movimiento seria enviar a uno de nosotros únicamente y luego iríamos los demás. Ridus fue el afortunado que enviamos al pueblo y aunque en un principio parecía nervioso todos sabíamos que en realidad estaba entrando en personaje. Cuando finalmente estuvo listo, Ridus partió hacia el pueblo determinado a realizar la tarea que se le había encomendado.

Estábamos por cumplir tres semanas viviendo ahí y únicamente habíamos podido reunir el mínimo de información, estábamos a punto de enviar a Gibz para acelerar un poco las cosas, pero surgió un inconveniente. Pocos días antes de poder acabar el mes Ridus vino a nuestro campamento un tanto alarmado trayendo con él malas noticias.

Durante los últimos días Ridus no fue particularmente discreto y las mane 6, quienes ya habían derrotado a Nightmare Moon y Discord; ya comenzaban a sospechar de él, la única razón por la que no lo habían descubierto era porque, para nuestra buena suerte Ridus jamás se había cruzado con el algodón de azúcar andante hiperactivo. Las cosas no se veían nada bien y Ridus sugería una retirada, pero el capitán insistía en quedarnos, fue entonces que se me ocurrió una idea.

Changeling rebirthWhere stories live. Discover now