Cuando pense que era la unica especial, con un don que mas que suerte de tenerlo era una cruz. Llego a un pueblito, en una isla en un recóndito país, donde conozco mas con habilidades, adolescente, niños, adultos.
Pero no todos son buenos, algunos...
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Vamos por la mitad de película, hace bastante que no veía la primera y mi corazón se llena de emoción al recordar cuando la vi por primera vez en el cine, los chicos desde la banda sonora del primer instante que le doy play, hasta los efectos especiales y la magia los tiene emocionados como niños de la edad de Rowen y tan concentrados que ni cuenta se dan de las exclamaciones que hacen al sorprenderse con alguna parte.
Inconscientemente les empiezo a contar las diferencias entre el libro y la película que estamos viendo con efusividad, me emociona mucho que ellos quieran ver lo que me apasiona desde que soy chica.
Malcom, Ryder y hasta John me escuchan con atención, comentando cuando algo les interesa, se que estoy haciendo gestos con las manos y la cara, es mi forma normal de expresión cuando hablo de algo que me interesa; ademas que lo delata que me miran con una sonrisa divertida los tres.
Estoy tan metida en mi relato que no noto que Rowen no aguanta más, suelta un bufido profundo de niño y me encara con su carita de angelito enojado.
—Me caes super bien, Blanca, eres super linda y sabes mucho de películas que me gustan. Es más, quiero que seas mi cuñada pronto —ante ese último comentario los chicos gruñen a nuestro alrededor—, pero por favor, ¡cierra la boca un rato que nunca vi a Harry Potter! Y me gustaría verla por mi mismo.
Siento como mi mirada se agranda al escucharlo, me sorprende. Sé que tiene razón, fui muy egoísta, la cantidad de spoiler que les hice es imperdonable, yo en su lugar estaría más que furiosa. Nunca me habia pasado, que alguien me recrimine mi comportamiento, mucho menos un niño, y me avergüenzo de mi misma.
—Rower, pídele disculpas,esa no es la forma de hablarle a una chica, ni a nadie. Ella vino de buena voluntad a traerte la película que tantas ganas tenías de ver, así que no puedes ser tan malagradecido siendo tan maleducado.
—Pero Ry, es que no paraba de hablar y no podía prestar aten…
—Rowen, pídele disculpas…
—Debo darle un poco la razón al chico, Ryder, Blan no paraba de hablarnos, y por más que me encanta escucharla hablar, no dejaba que disfrutemos de una película que nunca vimos. Pero Row, esa no es forma de hablarle, ahí tu hermano mayor tiene razón —interviene John con simpatía, y tengo que darle la derecha a esta.
—Es verdad, peque. No paré de parlotear egoístamente, perdón. Después, si te gusta leer te puedo prestar los libros —froto las palmas en mi pantalón y me levanto de mi lugar, un poco raro en mi, estar un poco incómoda—. ¿Por qué ustedes no terminan de ver la película? Yo me encargo de preparar las pizzas, y no los molesto. Les va a encantar, y mucho mas sin mis spoiler.
Me giro rápidamente sin esperar una respuesta. No soy una persona que se avergüence o se ponga incómoda por situaciones en las que puedo invadir mucho con mi intensidad a las personas, la mayoría de las veces no me importaba lo que pensaran sobre mí o mi personalidad.
