Te Amaré Por Siempre || Parte 5 || Draco Malfoy

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Un año después...

Era Navidad, hacía frío y Draco esperaba ansioso la visita de su familia. Hace 8 meses atrás, su amada (T/N) había dado a luz a un precioso niño de ojos grises, rubio como el sol y blanco como la nieve: Scorpius. El bebé había nacido prematuro como Dani, pero igual de fuerte y saludable que ella, y Draco lo había conocido a los pocos días de nacido.

El guapo rubio había visto crecer el vientre de su amada. Había sido premiado con visitas conyugales un par de veces más, así que tuvo la oportunidad de acariciar y besar ese hermoso vientre desnudo en la intimidad.

Draco había hecho regalos para sus hijos en el taller de carpintería: una casa de muñecas para Dani y unos trenecitos para Scorpius. Él mismo los había envuelto en papel de regalo y se los había entregado a su prometida para que los pusiera bajo el árbol de Navidad.

De repente, una hermosa sonrisa se dibujó en el rostro de Draco al escuchar el ruido sordo de los zapatos de charol de Dani, quien se dirigía hacia su celda dando saltitos como siempre.

—¡Papi! ¡Papi! —Exclamó Dani con alegría y corrió hacia Draco.

—¡Hola princesa! —Dijo Draco emocionado y se apegó a los barrotes de su celda lo más que pudo para darle un beso en la mejilla.

—Feliz Navidad, papi.

—Feliz Navidad, mi amor. ¡Estás bellísima! —Afirmó Draco y Dani se sonrojó.

Dani llevaba unos vaqueros, zapatos de charol, una blusa negra y un abrigo plomo de lana a juego con un gorro de lana con orejitas de gato, ambos tejidos a mano. Pero al notar que ella estaba inusualmente sola, Draco preguntó:

—¿Dónde está mami?

—Ella viene más despacio porque está trayendo a Scorp.

—¿Miren quién vino a visitar a papá? —Dijo (T/N), entrando en el campo visual de Draco con el bebé Scorpius en sus brazos.

Scorpius vestía un suave y calientito mameluco frizado con estampado de hipogrifos, y una versión más pequeña del abrigo plomo a juego con el gorro con orejitas de gato que llevaba Dani. Se veía adorable.

(T/N) se veía preciosa con su abrigo largo de paño color beige a juego con un pantalón de tela y zapatos de tacón. Sólo tenía rímel en las pestañas y brillo labial, lo que resaltaba su belleza natural.

—¡Papá! ¡Papá! —Exclamó el pequeñito, agitando sus bracitos con alegría.

—¡Hola campeón! —Dijo Draco emocionado y (T/N) le acercó el bebé para que pudiera darle un beso en la mejilla—. Feliz Navidad, Scorp —añadió y le dio otro beso muy sonoro en la mejilla, y Scorpius soltó una risita picarona que hizo sonreír a todos.

—Hola mi amor —lo saludó (T/N) con una bella sonrisa.

—Hola preciosa —respondió Draco con una sonrisa igual de bella y se dieron un tierno piquito en los labios—. ¡Estás bellísima!

—Muchas gracias, guapo —dijo (T/N) y le hizo ojitos, toda coqueta—. Feliz Navidad, cariño.

—Feliz Navidad, mi amor —replicó Draco y unió sus labios con los de su amada en un dulce beso.

—¡Papá! ¡Papá! —Exclamó Scorpius pataleando y (T/N) comprendió que quería que lo baje.

(T/N) puso a Scorpius de pie en el suelo cuidadosamente y el bebé se aferró a los barrotes de la celda de su padre con sus pequeñas manitos. Draco se hincó, intentando ponerse a su altura aunque seguía siendo más alto, y sonrió al ver que su pequeño hijo comenzó a saltar de alegría.

The Malfoy-Felton Diary || Mini Imaginas || Draco/Tom y TúWhere stories live. Discover now