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사랑 : Dieciocho

Después de que Eun-ji se marchara del departamento, ambos chicos pasaban más tiempo junto. Por las noches, se turnaban para comprar la cena y después comían en la sala viendo cualquier película en la televisión. Desde que Jungkook le había confesado a Tae su matrimonio, el mayor marcaba distancia y se avergonzaba cuando recordaba que lo había besado.

Y cuando menos se esperaban, solamente les quedaba una semana para estar en el departamento antes que Tae se marchara al suyo.

— Tae, te diría que te quedes pero la verdad si regresa a tu departamento, no puedo seguir comprando cena para dos todos los días —Bromeó mientras tomaba una papita de la bolsa para llevarla a su boca.

— La verdad yo tampoco aguanto estar acá, te has medio muerto por papitas al menos cuatro veces desde que llegué —Le siguió y solamente le aventó un bombón a la cara.

La mañana siguiente, sábado, ambos habían salido del apartamento hacia una tienda de interiores donde escogerían los nuevos muebles para el departamento. Recorrieron la tienda tres veces, y Tae se acostaba en cada cama que veía.

— Es para saber si conviene comprarla o no, Jungkook. No entiendes nada de la vida, estás chiquito.

— Uy perdón señor adulto —Ambos rieron, y continuaron recorriendo la tienda. Casi habían terminado —. Te falta un escritorio grandote, todo ingeniero debe tener el propio.

— ¿Son recién casados muchachos? Tenemos una promoción en camas, y también en mesas para dos —Un empleado se acercó a ambos, y apenados negaron.

— No, aun no, pero ya casi —Taehyung bromeó enseñando el anillo de Jungkook en la mano izquierda, el señor apenado se retiró y ambos siguieron en la búsqueda de muebles.

El comportamiento de Taehyung había cambiado desde que se enteró que esperaba un hijo; marcó su distancia pero no perdía la esperanza de que en un futuro pudieran tener algo.

— Kook, es tarde. Tenemos que ir a ver como quedaron los detalles del departamento y después me dijiste que... Tenías que ir a un lugar pero no recuerdo

— Después tengo que ir por mi esposa, tenemos una cita en el hospital. E iremos a comprar cositas para el bebé. Puedes irte al departamento tu solo, después iré yo.

A Taehyung le dolía, si bien entendía que era hombre casado le seguía molestando un poco. ¿Por qué no podía ser él? ¿Por qué tenía que ser su esposa? ¿Por qué no se conocieron antes? Tenía muchas preguntas, pero se conformaba con tener una relación cercana a él.

(...)

Jungkook cargaba muchas cajas, la mayoría eran juguetes y libritos, poco a poco acondicionarían la habitación. Cuando Taehyung se fuera, claramente, ya que esa sería la habitación del bebé. Al verlo llegar tan cargado, Taehyung le ayudó con algunas cajas que terminaron en la habitación de Eun-ji.

— ¿Cómo te fue, señor futuro papá? —Le preguntó mientras servía dos vasos de agua —. ¿El bebé está bien?

Asintió. — La doctora dice que es un bebé muy sano, pero todavía no podemos saber si será niño o niña —Los ojos de Jungkook brillaban —, aunque de todas maneras eso no va a cambiar mi cariño hacia él.

— ¿Quieres ir al cine? Estrenaron una película muy buena, quiero ir pero me da flojera ir solo —Con la cabeza dijo que sí, se levantó y fue hasta el cuarto de Eun, en una caja estaba un marco con la segunda ecografía, tomó otro que estaba en el tocador y salió con ellos en las manos.

— Mira, es mi bebé

Colgó los cuadros en una pared visible con una cinta resistente. Quería presumir a su futuro bebé a los cuatro vientos. Taehyung se paró de donde estaba y fue hasta donde Jungkook, quería sentir un poco de su felicidad. Lo tomó del hombro y después ambos salieron del departamento.

Pasaron la tarde entre risas e inocentes coqueteos por parte de Taehyung, se sentían agusto con la compañía de ambos.

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 A partir de acá la historia ya se empieza a centrar en ambos, perdon por meter tanto relleno [cry] 

Acepto criticas o recomendaciones para el siguiente capitulo.

APOLOYAIS, APOLOYAIS COMON APOLOYAIS CON MI YOONGIS, APOLOYAIS EL NO ES UN INFIEL 😭😭

Comenten y voten, y cuando lleguemos a las 30 mil lecturas a sus cheetos tiesos les agrego una coca de la de vidrio. DECÍA askjh

SarangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora