Capítulo 2: El inicio

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—Bien, las cosas ahora serán mas sencillas, por lo menos, tengo un buen auto. Creo que será mejor buscar a alguien para retar, así llamaré la atención, el único problema es la policía, debe haber un nuevo jefe, tendré que saber sus tácticas, pero por ahora mejor salgo a reconocer quienes están dominando la zona —exclamaba Paul detrás del volante de su auto preparado para salir en busca de algún rival —.

Luego de una charla motivacional con sigo mismo sale en busca de un rival cualquiera, lo que no sabía era que, en la intercesión de la central Rosewood y la autopista al norte de West un Lamborghini Veneno negro iba a cambiar el corto futuro que Paul tenía previsto para ese día. Mientras iba pasando por ahí, de repente sale disparado de la típica estación de policía que había en esa zona, impactando contra el auto de Paul a la mayor velocidad posible que logró alcanzar, haciendo trizas el auto de Paul, dejándolo a el inconsciente, Mia logra enterarse de lo sucedido, e inmediatamente sale a buscarlo, llegando en un corto periodo de tiempo ya que se encontraba cerca del lugar, lo saca de su auto y lo mete al de ella, el cuál había cambiado ya, no era aquel Mazda, sino que era un Audi R8 V10+ rojo. Ella lo llevo a su garaje antes de que llegara la policía. A las pocas horas Paul despierta algo desconcertado.

—Al fin, ya despertó el bello durmiente, pensé que estabas muerto ya, bueno, de no ser por mi, casi que lo estarías, olvidé decirte que la poli se ha vuelto más ruda, ya me enteré de todo lo que pasó, verás, todas las cámaras de la ciudad están a disposición de todos los corredores ahora, y vi quien te hizo eso, bueno, mejor dicho, que auto, llevamos meses estudiando a ese corredor, y nada —exclamaba Mia con algo de preocupación —. Siempre actúa raro, nadie sabe cuál es su objetivo, pero es muy buen corredor.

—Me dejas sin palabras, ¡espera! ¿¡dónde está mi buga!? —dijo Paul algo exaltado —.

— Hecho un cubo de chatarra, segura estoy de eso, la poli ya no decomisa los autos, tan sólo se los lleva y depidete de el, suena muy radical, pero para ellos ha sido efectivo, ya que cada vez es menos el flujo de corredores y mucho menos los amateurs.

—¡No!, ese auto era todo para mi, ¿ahora cómo haré para recuperar todo?

—Eh, tranquilo, que no todo está perdido, tengo dos autos, no son lo mejor, pero puedes defenderte con ellos, ven sigueme —Mia se levataba de la silla donde estaba y caminaba hacia una parte de su garaje —.

—Gracias Mia, no se que haría sin ti —Paul se levantaba de la pequeña camilla donde estaba para seguir a Mia —.

—Morirte de hambre segura estoy. Hace mucho te ayudé y lo haré de nuevo.

Luego de pasar a otra parte del garaje se ven dos autos.

—Mira, tengo un Mitsubishi Lancer Evolution X y un Ford Focus RS, tu elije uno y es tuyo —dijo mía entre estos dos autos —.

—Es triste venir de tan alto para volver a esto... otra vez. Igualmente estoy agradecido, gracias, me quedaré con el Mitsubishi.

—Ten las llaves —Mia le lanzaba las llaves a Paul desde su puesto para que este las atrapara —.

—Cuidado, porque ha vuelto Paul Walker —atrapa las llaves en el aire y va hacia el auto —.

—¿A quién le dices eso?

—No sé, solo es algo de estilo, que es un corredor callejero sin estilo, no es nada —exclama Paul con una sonrisa en su rostro —.

—Si, lo que tu digas, anda, ve y recupera lo que es tuyo. Nos vemos pronto.

Paul con una pequeña seña de guiño sube al auto y se marcha, buscando otra vez alguna carrera. En su búsqueda observa un pequeño conglomerado de personas enfrente de la estación de buses, se iba a efectuar una carrera, a lo cuál, Paul no pierde nada de tiempo y se mete a esta antes de que comience, todos estaban muy confundidos, pero, con dinero baila el perro, sumándose a la apuesta, estando legalmente en la carrera, lo que no era legal era la carrera. Rápidamente los civiles no implicados en ella llamaban a la policía. A los pocos momentos se escuchaban a lo lejos las sirenas de policía acercándose.

Al ponerse el semáforo en verde comenzaba la acción. Tanta tensión en tan poco tiempo, cada segundo era cómo una eternidad, hasta que el semáforo se puso en verde, todos los corredores salieron a toda velocidad, y poco después pasaba la policía detrás de ellos, Paul luchaba por el primer puesto, el cuál estaba ocupado por una experta corredora. La carrera era cada vez más tensa, con la policía pisandoles los talones, habían logrado derribar a uno, pero Paul sabía todos los ricones, trampas y atajos de toda la cuidad, aunque las cosas hubieran cambiado. Falataba poco para la línea de meta, aquella corredorra creía haber ganado, mira hacía atrás y ve a los demás corredores y la policía, pero Paul no estaba, cuando vuelve a enfocar su vista adelante, Paul se encontraba delante de ella, el había tomado un atajo, el cuál hizo que Paul lograra su primera vistoria, después de cruzar la línea de meta, todos se dispersaron, al igual que la policía, por suerte como no sabían quien era el, dejaron sus unidades para los más buscados de aquel grupo. En la noche todos debían reunirse en el lugar asignado para recoger su dinero. Todo iba bien para Paul, hasta ahora.

—Wow, mi primera victoria, y mi auto era menos veloz, creo que te hace falta algo de tuning, y mejoras —le decía de una forma tierna y tonta al auto en lo que se dirigía al taller más cercano de mejoras, "LB Performance" allí gastó todo el dinero que ganó en mejoras y tunig, no fue mucho, pero valió la pena. Salía del teller con una cara algre, a pesar de lo que había pasado —.

—Es cierto, ¿que es un corredor sin estilo, sin tuning?

NEED FOR SPEED: The Most WantedDove le storie prendono vita. Scoprilo ora