Rumores /-Hanako X Male Reader-

34. El guardián del presente

Terminé usando la excusa de que quería saber por qué Aoi lucía tan pensativa últimamente, como si algo le preocupara.
Afortunadamente, Akane parecía notar lo mismo así que dijo que nos ayudaría, aunque sis motivos dejaron de ser tan nobles en cuanto dijo que lo hacía por si acaso a ella le gustaba alguien.

Pasamos prácticamente todo el resto del día y el día siguiente completo siguiendo a Aoi para estar atentos a cualquier cosa.
Si bien lo único llamativo fue que tres tipos se le declararon el mismo día (y a los tres los mandó a volar Akane, literalmente), al menos estuvimos lo suficientemente ocupados como para que yo pudiera evitar fácilmente tener que hablar con Hanako o con Kou de mis golpes.

Terminamos siguiéndola hasta el teatro de la escuela, dónde nos escondimos tras los asientos del fondo mientras ella subía al escenario.

- ¿Por qué vendría a este lugar?

- Seguramente algún bastardo la llamó a este lugar para confesarse. En un lugar tan malditamente solitario, seguramente piensa obligarla a aceptar

- Eso es un poco...

- Bastante exagerado, diría yo

Kou y yo miramos a Akane con duda, él explicó que ese tipo de cosas le habían sucedido a Aoi desde que ambos eran pequeños.

- En ese entonces la protegí, y lo seguiré haciendo. Me he decidido a proteger a Aoi siempre, incluso si ella nunca voltea a mirarme a los ojos

Akane se apoyó en el respaldo del asiento, mirando a Aoi desde lejos con ojos brillantes.
En otro momento, ese brillo en su mirada me habría hecho querer seguirlo mirando por siempre, aún cuando su atención no era ni remotamente dirigida hacia mí.
Sin embargo, eso ya había pasado en su debido tiempo, así que pude apartar la mirada con facilidad mientras suspiraba.

Desafortunadamente, eso no evito que sintiera un pequeño pesar en el pecho.
Supongo que hay cosas que realmente nunca cambian.

- ______, ¿Estás bien?

Hanako se acercó a mí, flotando lentamente.
Ni siquiera lo voltee a ver, seguía molesto con él. Me limité a responderle en un susurro.

- Por supuesto que sí, ¿No deberíamos terminar con esto ya? La hemos seguido todo el día y no ha pasado nada, estamos perdiendo el tiempo

- _______ tiene razón, mis amigos siguen siendo ancianos y podrían morir mientras estamos en esto

Hanako cedió ante mis quejas unidas a las de Kou, y terminó diciendo que solo haría una prueba más.

- Hemos estado investigando como humanos normales, así que ahora actuaré como uno de los siete misterios

Diciendo eso, Hanako se puso de pie sobre los asientos y usó su haku-joudai, haciendo que esa capa apareciera sobre sus hombros.
No entendí que estaba pensando hacer, hasta que extendió su brazo en dirección a la chica y habló con voz firme.

- ¡Haku-joudai, ve!

El orbe salió disparado con fuerza y golpeó un gran candelabro de utilería que colgaba sobre Aoi.
Kou, Akane y yo nos pusimos de pie de inmediato, pero realmente no había nada que fuéramos capaces de hacer.

Todos gritamos un nombre, Kou y yo el de Hanako y Akane el de Aoi, pero el candelabro siguió cayendo y nuestros gritos tan solo sirvieron para hacer que la chica se diera cuenta de que estaba por morir.
Cerré los ojos con fuerza, no es que me apeteciera ver eso. Sentía como mis manos temblaban, y simplemente me quedé ahí esperando a escuchar el sonido del candelabro al caer.