Un grupo de amigos deciden dejar la ciudad atrás pasando unos días en una cabaña en medio del bosque, las cosas cambian drásticamente cuando despiertan por la mañana escuchando en las noticias que un extraño virus ha hecho presencia en toda Corea de...
Si EunWoo no hubiera intervenido a tiempo anoche hubiera acabado peor, quizás ni viviría para contarlo. En el reflejo del espejo del baño puedo ver mi rostro, mi ojo derecho tiene un moretón horrible, apenas puedo abrir mi ojo, EunWoo me había llevado a enfermería donde me revisaron y atendieron. Debía aplicar una pomada para la inflamación, apenas lo rozo y duele, no quiero imaginar la reacción de YoonGi cuando lo sepa.
Esta vez sólo un militar viene a buscarme para llevarme al comedor, es la hora del desayuno, no pude dormir bien anoche, no por las pesadillas, por mis pensamientos. No sé si hago bien o mal quedándome sin hacer nada, tampoco tengo a donde ir. Una de las condiciones que pedí a la doctora Meghan era que me ayudara a conseguir la ubicación de mis padres y anoche EunWoo había ido a confirmarlo.
Mis padres habían muerto por el virus.
— ¿Qué demonios...? —YoonGi es el primero en mostrarse molesto y preocupado cuando nos reunimos en el comedor.
— ¿Quién te hizo eso? —Solar tiene sus ojos muy abiertos.
— TaeHyung fue a verme anoche—antes de que YoonGi me diga algo lo interrumpo. Tomo asiento frente a una de las bandejas.
— ¿TaeHyung te golpeó? —JungKook me mira fijamente—¿Enserio te golpeó?
— Se enteró que sería el último en tener la vacuna—no tengo apetito. Ni siquiera miro la comida—Fue a exigirme la cura porque ha hecho mucho por mí, dijo que gracias a él sigo viva.
YoonGi bufa respirando profundo, está intentando controlarse.
— Es un animal—Wheein que está a mi izquierda se hace escuchar indignada—Puede estar molesto contigo, pero no es motivo para hacer esto.
Los chicos no dejan de repetir lo mismo, ni siquiera los escucho, tengo muchas cosas en mi cabeza y no me siento cómoda con ninguna. No quiero seguir dándole vueltas a las cosas. Cuando todos han comido comienzan a irse, antes de que YoonGi haga lo mismo tomo su muñeca.
— ¿Puedo hacerte una pregunta? —el pelinegro toma asiento de nuevo.
— Dime que no te sientes culpable de lo que hizo ese imbécil porque me enojaré contigo...
— No, no es eso—aclaro mi garganta—Últimamente...he escuchado la misma pregunta o la misma insinuación—YoonGi espera en silencio a que pregunte pues no tiene idea de a qué me refiero—Oppa, ¿Tú...sientes algo...por mí?
YoonGi mantiene la misma expresión por unos segundos.
— ¿Qué?
— Sé que es raro y no puede ser posible, ibas a casarte con Heize, entiendo eso...
— ¿Lo preguntas por lo que dijo EunWoo a JungKook esa noche?
— ¿No te incomoda esa clase de preguntas? —cuestiono—Es...incómodo para mí, sé que...—ni siquiera sé cómo explicarlo—Incluso Solar me lo preguntó y TaeHyung...—me doy cuenta muy tarde que no debí decir lo último.
— ¿Qué? ¿Tae también cree que tenemos algo romántico? —niega con la cabeza. Al verme tan callada frunce el ceño—¿Qué te dijo?
— Él...insinuó que...teníamos algo más que...un romance.
"Creo que lo entendió"
— Escucha, no me importa lo que la gente crea o no crea sobre nosotros, me preocupo por ti porque amé a tu hermana, te tengo aprecio y sé que ella sólo hubiera pensado en ti—miro sus ojos—Mi relación contigo es de un hermano, me preocupas como una hermana lo haría—coloca su mano en mi brazo—No debe incomodarte lo que digan los demás, tú y yo sabemos la clase de relación que tenemos. ¿De acuerdo?
Asiento convenciéndome de ello por su manera segura de hablar.
— EunWoo había ido a verme anoche para confirmar mi petición a la doctora.
— ¿Qué petición?
— Quería saber la ubicación de mis padres, fueron a casa y los encontraron...—mi voz va desapareciendo. YoonGi me abraza y apoyo mi cabeza de su hombro.
— Lo siento, GaRin—susurra—Lo siento mucho.
...
Según el reloj de mi habitación son las once de la mañana, no tengo nada que hacer y mi mente no deja de pensar en muchas cosas. Quiero ver a HwaSa, pero lo tengo permitido sólo en la noche, sé que NamJoon está con ella, debe odiarme, todos me odian, cada persona que me mira parece odiarme o quizás estoy paranoica. La puerta de mi habitación se abre, me sorprende verlos aquí, Hoseok, Jimin y Jin lucen nerviosos.
— No voy a morderlos, pueden acercarse.
— Tu ojo...—Hoseok es el primero en acercarse—TaeHyung pasó el límite.
— ¿Hablaron con él?
— Sí, en el comedor—Jimin juega con sus manos—Lo siento mucho, GaRin.
— ¿Por qué?
— Por haberlos dejado allí en el bosque.
— ¿Podemos no tocar ese tema? —respiro profundo—¿Vinieron a disculparse? Si es así déjenme sola.
Los tres intercambian una mirada. Algo sucede. SeokJin mira alrededor en la habitación como si buscara algo, frunzo el ceño sin entender.
— ¿Qué ocurre?
— ¿Hay cámaras aquí?
— No.
— ¿Micrófonos?
— No.
Jin se sienta a mi lado.
— ¿Qué te dijeron exactamente sobre la cura?
— Hace unos minutos vinieron a tomarme unas muestras de sangre, se supone que están analizándolas a profundidad antes de generar la vacuna.
Hoseok hace una mueca.
— Algunos dicen que venderán la vacuna a otros países, sólo podrán comprarla los políticos, gobernadores, presidentes, etc.
— ¿Quién dijo eso?
— Es un rumor que comentan mucho en el refugio—Jimin se cruza de brazos—La vacuna no será para nosotros ni para los militares, dicen que será para los estatus más grandes.
— ¿Qué te dijeron?
Miro a Jin sin saber que creer, quiero creer que no es posible pero la otra parte de mí dice que todo es posible.
"Las cosas no podían salir tan bien"
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