Capítulo 15

4K 673 299
                                    

Mi cuerpo se siente raro, pareciera que flotara, como si algo me levantara, escucho voces a lo lejos, abro mis ojos encontrando todo borroso, está oscuro, soy acostada en algo, muevo la cabeza distinguiendo en medio de parpadeos el cuerpo de HwaSa acostado en su cama, ella está durmiendo, no se da cuenta que están sacándome de la habitación. Quiero llamarla, pero mi voz sale muy baja, muevo mis brazos, pero unas manos desconocidas cubiertas con guantes me detienen.

No sé a dónde vamos, pero mi cuerpo se siente pesado además de lento. Hay dos personas cubiertas con trajes blancos, están trasladándome a algún lugar. Mi corazón se agita por los nervios, mi respiración comienza a acelerarse, ¿A dónde me llevan?

— YoonGi—susurro sabiendo que no puede escucharme.

Entramos a un cuarto totalmente blanco, hace mucho frío, hay más personas vistiendo con esos trajes, sus manos están cubiertas por los guantes, luce como una sala de operación. El pánico se apodera de mí, veo instrumentos de operaciones en una bandeja, hay ordenadores también y objetos que aumentan mi asma. Muevo mis brazos intentando gritar o soltarme, pero los colocan a cada costado atándolos con correas a la camilla, mis tobillos son atados de igual manera.

— ¿Nombre de la paciente? —escucho la voz de algún doctor.

— Lee GaRin—esa voz la identifico. Miro aterrada a la persona de traje blanco junto a mí, acomoda sus guantes y asegura su tapabocas, es la doctora Meghan—Tiene veintitrés años, sufre de asma desde muy niña—alguien le pasa una jeringa vacía, para entonces estoy hiperventilando—Tomaré una muestra de su sangre original.

"¿Sangre original?"

Intento moverme, pero es inútil, estoy inmovilizada por completo, la doctora toma un poco de mi sangre. No quiero ver la aguja, me hará empeorar, miro a mi alrededor con angustia, no entiendo que hacen ni que hago aquí, tengo miedo y mi pecho duele, mis pulmones duelen incluso.

— ¿Brindamos oxígeno, doctora Harris? —pregunta otra mujer. No puedo ver sus rostros, solo los ojos.

— No, necesitamos que esté alterada para la prueba—deja la jeringa en una pequeña bandeja, con ella coloca un pequeño frasco con un líquido rojo, esa es mi sangre—Analícenla.

— Doc...tora—mi voz sale entrecortada. Necesito mi inhalador.

— Tranquila, GaRin, terminaremos rápido—acaricia mi cabeza. Voltea a ver otras dos personas—Traigan a su compañera también, debo usar una dosis doble con ella.

"Irán por HwaSa, ¿Está haciendo pruebas con el bloque rojo?"

— No puedo...

— Lo sé, sé que no puedes respirar—recoge una jeringa llena. Tiene un líquido oscuro, diría que negro, mi pecho sube y baja más rápido, forcejeo intentando soltarme. Grito lo más fuerte que puedo siendo interrumpida cuando uno de ellos cubre mi boca con un pañuelo.

— Necesito que te mantengas quieta, GaRin.

— No, por favor—siento las lágrimas deslizar de mis ojos—No haga esto, doctora, por favor—suplico.

— Mira el lado positivo, sabes que tu hermano está bien—niego con la cabeza. YoonGi debería estar aquí conmigo—¿No quieres hacer algo por la muerte de tu hermana? —aquello me deja helada—Podrías ser la cura de este virus, GaRin, podrías curar miles de personas, millones de personas...

— Pero asesina a otras personas buscando la cura—trago con dificultad—Su familia no estaría de acuerdo con esto.

— Cierto, pero no están aquí para opinar—acto seguido introduce la jeringa en mi brazo. El líquido negro entra en mis venas, lo siento correr en mi interior. Colocan algunos chupones en mi pecho, escucho el aparato de los latidos dispararse, no puedo respirar nada y la angustia se apodera de mí.

Nadie me ayuda, ellos miran esperando mi reacción. Comienzo a toser intentando moverme, necesito mi inhalador, miles de imágenes pasan por mi cabeza, veo la luz del techo perdiendo la noción de lo que me rodea, mi cuerpo convulsiona y lo último que veo en mi mente es a Heize sonriéndome dulcemente.

...

— ¡Apresúrate! —dice una Heize de catorce años. Su cabello oscuro está recogido en una trenza, las olas de la playa chocan en las rocas, mis pies descalzos sienten la arena bajo ellos. Tengo ocho años y mi cabello es corto sobre mis hombros. Llego donde mi hermana que está agachada, al acercarme noto lo que ve, son cangrejos pequeños de color blanco—Se ven graciosos—sonríe divertida—¿Adoptamos uno?

— Los cangrejos no se adoptan—sonrío ante su idea—Se comen.

— ¡Oye! No lo digas frente a ellos, se asustarán—toma con uno de sus dedos un pequeño cangrejo—Son lindos así.

— A mamá le gustan los cangrejos.

— Para comer.

— ¡No lo digas tan alto! Se asustarán—repito sus palabras. Me agacho a su lado mirando el nido de cangrejos pequeños—¿Crees que su mamá esté lejos?

— Si aparece creerá que estamos lastimando a sus bebés.

— Pero no somos personas malas.

— Todos somos malos—deja el cangrejo en su lugar y se levanta, ella es más alta que yo—Una profesora dijo que la persona más dulce e inocente puede ser la persona más mala del mundo.

— Eso no tiene sentido.

— El mundo no tiene sentido, las personas fingen, GaRin.

Abro los ojos estando en un cuarto diferente, mi asma no está, mi respiración es tranquila, inhalo y exhalo asegurándome de no sentir dolor en mis pulmones, no estoy atada a la camilla, me incorporo quedando sentada, tengo algunas agujas en mi brazo que van conectadas a diferentes máquinas, miro los chupones de mi pecho que indican los latidos de mi corazón. Toco mi cuerpo asegurándome de estar bien, mi mano se detiene en el bolsillo de mi pantalón, sigo vistiendo la ropa de dormir, del bolsillo saco la navaja que YoonGi me dio.

"Dijo que la usara si era necesario"

Con cuidado quito las cosas de mi pecho y mis brazos, las agujas gotean sangre al suelo. Mis pies protegidos por las medias blancas tocan el suelo frío, luce como una habitación de hospital, pero pequeña. Camino hacia la puerta tambaleándome un poco, ¿Dónde estoy ahora? Escucho pasos que me hacen colocarme a un costado de dicha puerta, ésta cede abriéndose del otro lado, una mujer de bata blanca entra, mi cuerpo reacciona y la navaja termina en su cuello. El cuerpo cae al suelo manchando su ropa de rojo por su sangre, recupero mi navaja esperando que mi asma se dispare ante lo que acabo de hacer.

Pero eso no pasa.

Lo primero que pienso es en YoonGi.

Lo primero que pienso es en YoonGi

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Disease • BTS (COMPLETA)Where stories live. Discover now