ÉL Y YO

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ACTIVIDADES
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• Jessica Allen •

Es extremadamente especial estar con Thomas aquí, donde nos conocimos.

Y me alegro que este lugar ya no sea ese espacio de soledad al cual acudía constantemente para estar a solas y hacer lo que me gusta. Ahora compartía este lugar con Thomas, haciendo las cosas que nos gustan y las cuales tenemos en común—simplemente perfecto—la música y el dibujo. La música es algo que nos gusta a muerte, aunque a mi me apasiona más el dibujo que a él, seguía siendo alucinante.

Ni hablar del panorama: Mi espalda apoyada en una de las estanterías con libros, sentada en el suelo y cruzada de piernas. Él tumbado con una pierna arriba de la otra y su cabeza descansando encima de mis piernas.

Sí, definitivamente nuestra confianza va por buen camino.

—Es tu turno.—le entrego mi teléfono cuando acaba la canción.

Ahora mismo estamos escuchando música juntos, el tiene uno de mis auriculares mientras yo tengo el otro. Nos turnamos por canciones, algo estratégico para conocer un poco nuestros gustos musicales, y debo admitir que los suyos son muy bueno.

—Ohhh, esta es muy buena.—dije cuando escucho la canción She de Green Day.

—Tú si que estás buena.—dice en un susurro, riendo por lo bajo.

—Ni hablar de ti.—bajo mi mirada  y lo confronto, divertida.

Yo cierro los ojos inconscientemente para prestar atención a la letra.

Waiting for a sign to smash the silence with the brick of self control...
(esperando una señal para romper el silencio con el ladrillo del autocontrol)

Are you locked up in a world that's been planned out for you?
(¿estás encerrado en un mundo que ha sido planeado para ti?)

La canción es realmente buena.

Scream at me until my ears bleed
(Grítame hasta que me sangren los oídos)

I'm taking heed just for you
(estoy prestando atención solo por ti)

Al escuchar esa última frase me atrevo a mirarlo, y entonces nuestras miradas chocan y puedo ver ese brillo de diversión.

—Dime Thomy, ¿me quieres decir algo?—Podría apostar lo que sea a que esta canción tiene doble intención.

—puede—Y solo con mirar esa sonrisa desafiante supe que tenía razón, me estaba incitando a seguir su juego. —Ten.—me ofrece mi teléfono sonriendo de oreja a oreja.

Oh... yo también sé jugar a esto...

Busco entre mi lista de canciones y la primera que se me ocurre es Head first de Christian French.

Oh sí, esta es posiblemente muy directa, pero... ya que estamos y no me ando con rodeos le doy a reproducir y en microsegundos está sonando a través de los auriculares.