1

10.3K 628 334
                                    


LA BIBLIOTECA

• Jessica Allen •

—Hola Marisol— saludé a la bibliotecaria del instituto con una sonrisa en la cara mientras me dirigía al último pasillo de este acogedor lugar.
Me senté en el suelo y apoyé mi espalda en uno de los estantes de la biblioteca.

Alison me dejo sola, se suponía que íbamos a ir a la biblioteca juntas... Pero últimamente sale con alguna que otra de sus excusas baratas.

Típico de mi mejor amiga.

Solo llevamos una semana de instituto y los nuevos profesores ya están mandando tarea, MUCHA TAREA. Esto es estresante.

Hemos quedado aquí para hacer los deberes "juntas" y de las veces que hemos quedado ha venido unas... ¿tres veces?

En fin...

Yo ya suponía que Alison no iba a venir hoy, por eso me voy a tomar las dos horas del supuesto "horario de estudio" para hacer lo que siempre hago cuando me deja plantada en la biblioteca.

Sí, solo me deja plantada cuando se trata de estudios... Pero siempre es la primera para cualquier otro plan.

Bueno, lo que hago siempre se resume en: Leer, escuchar música, componer tablaturas y dibujar algunos bocetos.

En el último pasillo—En el que me encuentro—Está muy retirado de los demás ya que es una sección en la que nadie está interesado. "La típica sección aburrida". Y la verdad es algo que no me atrevo a desmentir.

Es bastante irrelevante.

Podríamos decir que estoy en este pasillo por la simple tranquilidad. Retirada de la poca gente que suele venir aquí.

Me coloco mis auriculares mientras busco la canción 505 de Arctic Monkeys... Pero en ese momento me interrumpe Marisol, la bibliotecaria.

—Jess, acuérdate de que no deberías estar aquí.—suspira cansada—¿Por qué no eres normal y vas a sentarte en las mesas de allí?— señala unas que están a unos pocos metros de nosotras.—¿Por qué te gusta estar sola escuchando esas canciones diabólicas del demonio?—Me lo pregunta con un tono gracioso.

Me conoce tan bien...

—Tranquila mujer—Le respondo con un tono de burla—Nadie viene aquí y no creo que vengan jamás, y... mis canciones no son diabólicas del demonio—le digo con el mismo tono— son ARTE, ¿vale? AR-TE algo que no comprenden todos los seres humanos de este planeta—me encojo de hombros.

—A bueno...—junta sus manos—Perdone señorita alien, no sabía que tenia usted la apariencia de Jessica Allen— dice con sarcasmo.

—En fin... tú estate tranquila y yo nerviosa—le respondo con una risa—No va a pasar nada, siempre hago lo mismo y no pasa NADA, de NADA, ¿De qué te preocupas?—le pregunto curiosa por la respuesta.

—La verdad... me preocupas.

—WOW ¿Desde cuando Marisol, la bibliotecaria mal humorada se preocupa por los demás?—le digo con tono sarcástico.

ÉL Y YO Where stories live. Discover now