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~ Narración omnisciente ~

Un nuevo día había comenzado, los cálidos rayos del sol alumbraban con todo su resplandor la finca mariposa.

A simple vista se podía ver qué haría un buen día. Sin embargo, al menos no sería uno bueno para la actual cabeza de dicha finca.

________ se encontraba en esos momentos caminando hacia la recidencia Ubuyashiki, pues el día anterior, Aoi había avisado que Oyakata-sama deseaba verle a primera hora del nuevo día, por lo que _______ partió en seguida en cuanto los rayos del sol golpearon sus profundo ojos azules.

Al ir llegando a dicha finca, fue recibida por las dos hijas mayores del matrimonio Ubuyashiki, siendo estas quien le dieron una cálida bienvenida.

- Es un gusto volver a verle kocho-San. - saludo ejerciendo una reverencia.

- Oyakata-sama desea verle, síganos porfavor. - completo la albina.

- También es un gusto volver a verles, Hinaki-San, Nichika-San. - saludo a las pequeñas comenzado a seguirles.

Recorriendo un no muy largo trayecto de dicha finca, llegaron a una de las habitaciones, donde normalmente se llevaban acabo las reuniones de los pilares, dato que le pareció bastante extraño a _____, pues casi siempre que oyakata-sama quería hablar con algún pilar de un tema que no fuera de la organización, se sentaban a tomar té el el jardín. Por lo que _______ pudo intuir que a lo mejor el motivo de la llamada se tratase de alguna nueva misión.

- Kocho-San está aquí, Oyakata-sama. - comentó la niña ingresando al cuarto segura de su hermana y ______.

- Es un honor poder volver a verle, Oyakata-sama, de todo corazón espero y goce de una buena salud usted y su familia. - hablo muy respetuosa incandose ante el.

- También es un gusto volver a verte bien hija mia, gracias por tus buenos deseos. Seguramente te has de preguntar la razón por la cual te mandé a llamar repentinamente... - El hombre habló con su característica voz calmante, la poca visión que aun tenía se enfocaba en el cielo azul.

- Debo admitir que me sorprendí un poco, pero aún así, por el hecho de hoy estar presente ante usted justo en esta habitación, quiero creer que se trata de una misión... ¿Es así? - la intriga se notaba con claridad en el rostro de la chica, pues la curiosidad la mataba por dentro.

- Me temo que no es así ______, si no es por otro asunto que... Debía haberte comentado antes, pero, la situación no era la mejor en su momento. - confesó mirándola con ternura.

- ¿En serio? Bueno... Si es así... Dígame, estoy para escucharlo. - dicho eso su mirada se centró solo en el, teniendo cierta inquietud en sus palabras.

- Tiene que ver con tus difuntas hermanas... Kanae Kocho y Shinobu Kocho... - dijo ahora con un toque de melancolía.

Ante aquella confesión, un nudo se formó en la garganta de _____, pues escuchar el nombre de sus hermanas, solo le traían un sentimiento de dolor y tristeza.

- S-sobre ellas... ¿Qué es oyakata-sama? - Para ____, hablar de sus hermanas era un tema delicado, no era asombro qie se pusiera andiosa.

- Se que esto debí dártelo en el momento que llegó a mis manos, pero como te comenté, debido a la situación en la que te encontrabas por la reciente muerte de Shinobu... Preferí esperar, ya que si no, temía que cometieras una locura. - confesó haciéndole una señar a su hija de que le entregase algo.

𝐋𝐚 𝐮𝐥𝐭𝐢𝐦𝐚 𝐊𝐨𝐜𝐡𝐨 - Kimetsu No Yaiba Fanfic - Where stories live. Discover now