—Bien, ya sé.

—¿Qué?

—Es una sorpresa—digo rápidamente con una sonrisa—Viniste en tu moto ¿verdad?

—No, vine en avión.—sonrío, tomando eso como un sí.

—Para no levantar sospechas tengo que hacer algunas cosas antes con mi padre. Si eres capas de esperar hasta las...—miro el reloj, calculando la hora a la que deberíamos irnos—... 10:30 de la noche iremos, al contrario iré sola.

Es un plan bastante básico, solía hacerlo con Alison de pequeñas.

—¿Pretendes que espere... tres horas y media para irnos?—dice aburrido.

—Sí, y todo depende de ti.

••••

—¿Por qué no le dijste a tu padre que ibas a casa de Alison? Así no tendrías que escapar por la ventana—Pregunta.

—Bueno. Primero, no suelo hacer planes con Alison un lunes. Segundo, se supone que estoy estudiando. Y tercero, es más divertido salir por la ventana—Termino de ponerme los converse—Listo, vamos.

—Menos mal.—suspira.

En silencio abrimos la ventana de mi habitación para que Thomas salga primero, cuando está abajo me dispongo a salir por el mismo sitio. Primero un pie, luego...

—Hola, vecina.

Me sobresalto por el susto, mirando la casa de mis nuevos vecinos. La ventana que está justo al frente de la mía dejándome ver al chico de pelo negro fumando.

—H-hola Marc, ¿Qué tal?—intento no sonar nerviosa, aparentando normalidad.

—Bien ¿y tú?—dice tomando una calada.

—Bien, bien, muy bien. ¿Qué haces?—suelto una risa nerviosa.

—Estoy fumando mientras veo a mi vecina...¿Escapar de su casa...?—Baja la cabeza y mira a Thomas con mala cara—...a escondidas con su... ¿Novio?

—¿Qué?—chillo nerviosa—¿Novio? No, no, solo es...

—Primero, no me van las explicaciones. Segundo, si no quieres suicidarte hoy, mejor baja de esa ventana.—añade—Ya, si es posible.

—Oh, si.

Bajo rápidamente de la ventana y me sitúo al lado de Thom, que por cierto, está mirando a Marc con curiosidad.

—Bien, he evitado una muerte menos en el mundo.—habla un poco más fuerte para que lo podamos  escuchar desde allí arriba, mirando significativamente a Thom.

—No se iba a caer—dice Thom tranquilo—Y tampoco hubiera dejado que pasara eso—repone.

—Amigo mío, eso no lo sabes... desde esa distancia no la hubieras atrapado.

Marc mira a Thomas con una mirada desafiante. No dice nada, solo me dedica una mirada significativa.

—¿Nos vamos ya?

ÉL Y YO Where stories live. Discover now