En las garras del amor, Libro 1 saga cambiaformas enamorados

Epílogo

—Gracias por venir, perdonen que les moleste tan temprano, Khalé se veía agotado pero eso no le restaba de forma alguna su varonil atractivo, —siéntense por favor.

El alfa señaló dos sillas que estaban frente al escritorio.

Tanto Brandon como Yelaím se sentaron pero nunca se soltaron de las manos.

—¿Qué sucede Khalé?, Brandon observó a su amigo que se notaba incómodo, como si buscara las palabras para la noticia que daría.

—Bueno entiendo que tu pareja fue atacada por César Brito y su grupo.

—Así es alfa. Tú mismo viste la batalla que tuvo dentro de la cabaña.

—Lo hice, afirmó Khalé quien junto sus manos sobre el escritorio, —pero quiero estar seguro de que la justicia se imparta de forma correcta.

—César no es totalmente responsable de todo lo sucedido alfa, Yelaím por fin habló logrando que los dos hombres lo mirasen.

—Él te atacó Yelaím, dijo Brandon entre dientes y visiblemente enfadado pero ante la mirada atenta del alfa Yelaím no se acobardó.

—Lo sé Brandon, pero no fue totalmente responsable, el verdadero incitador fue Vicente que con adjetivos humillantes lo provocaba para actuar como lo hizo, César si tiene su parte de culpa, pero de ninguna forma dejaría que César sea quien resulte señalado pues el que desataba la violencia fue Vicente.

Brandon se mantuvo callado, a pesar de que no estaba totalmente de acuerdo con Yelaím, lo prefería valiente y ecuánime dando su versión de los hechos.

Aunque si por Brandon fuera, él se hubiera encargado de darle una paliza al osado lobo.

—Bien, eso mismo declararon los demás, César aun no despierta pero en cuanto lo haga y se recupere será puesto en el programa de trabajos comunitarios junto con los otros. El único que será enviado a custodia será Vicente, el alcaide Ruiz ha sido notificado

—Gracias alfa, Yelaím se sentía verdaderamente aliviado por el curso que estaban tomando las cosas, —y gracias por todo, pronto iré a visitar a César, él está solo y creo usted sabe mejor que yo sobre su pasado.

Khalé asintió mientras se levantaba de su silla, —gracias amigos y Brandon felicidades por tener ya a tu pareja, estoy feliz por ustedes.

Brandon se levantó y abrazó a su amigo, —gracias alfa por todo lo que has hecho por mí y por Yelaím, la mirada de Brandon se posó en su hombre que se miraba hermoso y llamativo con ese par de ojos que fascinaban a Brandon, —espero que pronto seas tú quien encuentres a tu pareja.

Khalé solo asintió pero el suspiro que dejo salir a nadie engañó, ese suspiro llego hasta el hospital en donde un joven lobo estaba sedado...