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Jungkook POV

– Hola – me dijo Haewon con una pequeña sonrisa en cuanto le abrí la puerta

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– Hola – me dijo Haewon con una pequeña sonrisa en cuanto le abrí la puerta.

– Pasa – le dije y me aparté para dejarla entrar.

Como habíamos acordado, ella vino a mi casa para terminar el trabajo de inglés. Mi madre había salido a hacer unas compras y mi padre estaba trabajando, así que estábamos solos.

– Sígueme – le dije mientras cerraba la puerta.

La guié hasta las escaleras, pero cuando comencé a subir ella me detuvo.

– ¿A-Adónde vamos? – me preguntó. Parecía nerviosa.

– A mi cuarto. Creo que trabajaremos más cómodos ahí.

Ella abrió los ojos un poco de más y me miró sorprendida y un tanto dudosa.

– No te preocupes que está bastante ordenada – le dije con una pequeña sonrisa para tranquilizarla.

– No. No, si no es... No importa.

Comenzó a subir detrás de mí. Caminamos por el pequeño corredor y nos detuvimos frente a la blanca puerta de mi cuarto. Entramos y volví a cerrarla.

Mi habitación era bastante amplia. Estaba iluminada con la luz que entraba del exterior, y yo siempre la tenía organizada. Me gustaba tener todas mis cosas en un lugar específico, así sabía dónde encontrarlas.

La castaña se quedó mirando alrededor hasta que su mirada cayó nuevamente en mí y le hice señas para que se sentara en la cama en lo que yo me sentaba en mi escritorio. Me puse el portátil en mi regazo y me volteé para quedar frente a ella.

– Por cierto, he revelado las fotos – estiré mi brazo para alcanzar un sobre que tenía a un lado y se lo tendí – Ten.

Comenzó a ojearlas y, a medida que las veía, su rostro adquiría una expresión de asombro.

– ¿Qué te parecen?

– Están increíbles – me miró con admiración – En serio tienes talento. Es un trabajo realmente impresionante.

Sonreí halagado.

– Gracias.

Las volvió a colocar en el sobre con cuidado mientras yo encendía el portátil y abría un nuevo documento.

– ¿Hago yo la introducción o prefieres hacerla tú? O si quieres la hacemos entre los dos.

– Déjamelo a mí – me dijo con una sonrisa tímida – Esa es mi especialidad.

Le entrgué el portátil y ella lo colocó sobre su regazo y comenzó a escribir. La observé mientras lo hacía. Tecleaba con rapidez, haciendo alguna que otra pausa de vez en cuando, y se veía concentrada y realmente segura de lo que escribía.

Golden Boy [JJK]Onde as histórias ganham vida. Descobre agora