El amor, la cosa por la que han existido guerras, mitos, leyendas... por lo que la gente sufre y anhela, pero cuando chocas miradas con esa persona sientes esa profunda conexión que revoluciona todo lo que conocías incluso si al final todo es un de...
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Como lo dijo Alice llegamos el lunes para la escuela, esto no nos emocionó mucho. Hoy era miércoles y estábamos preparándonos para exámenes. Jackson me seguía hablando normal en todas las clases.
-¿Le entendiste a lo que explico en Matemáticas?- Jackson me pregunta al sentarnos en el escritorio que compartíamos en Ciencias.
-Sinceramente, no le preste atención- le sonrío inocentemente. El suelta una risita por lo bajo
-¿Qué hare contigo Bennett?- me dice fingiendo regañarme
Coloco un puchero
-No me digas de esa manera- hago una mueca- Me siento una niña pequeña que cometió un crimen cuando pronuncian mi apellido- me rio
-Bien- levanta las manos en señal de inocencia
-¿Qué tal tu relación?- me pregunta
-¿Con Edward?
-¿Tienes otra?
-Ja, Ja- me rio sarcástica- Bien, estamos muy bien
-Me alegro- hace una pausa meditando sus palabras- Si te hace algo que a ti no te guste, solo me avisas y consigo la escopeta- me rio
-Claro, yo te aviso- le guiño el ojo
Edward ríe en mi mente, por supuesto que está escuchando.
Las clases continúan igual. En historia Edward y yo nos sentamos demasiado juntos recibiendo miradas del profesor pero las ignorábamos y los alumnos reían suavemente.
-¿Jackson, eh?- Emmett me hace ojitos
-No hagas eso- Jasper se mete- Edward se nos va a poner celoso- dice en un susurro alto para que Edward lo escuche. Este solo rueda sus preciosos orbes
-Somos amigos- respondo simple
-Me he dado cuenta- Emmett desvía su mirada hacia la mesa en donde estaban ellos – Te observa constantemente- Edward profana un leve gruñido hosco
-Solo está preocupado- digo- Aparte solo amo al celoso a mi lado- Rose suelta una risita
-¿Cómo lo soportas?- Jasper me pregunta
-¿A Edward o a Jackson?- Emmett pregunta
Edward lo golpea lo bastante fuerte en el brazo
-Me calmo- levanta las manos inocentemente
-¿Cómo soportas el olor de Jackson?- Jasper reformula su pregunta
-Años de práctica, su olor no me causa mucha tentación
-A veces se me olvida que eres como Carlisle pero en mujer- Emmett dice causando risas por parte de todos los de la mesa
-¿Por qué empezamos a hablar de mi compañero de pupitre?- pregunto
-Curiosidad- Emmett se encoje de hombros
-La curiosidad mato al gato- recuerdo
-Porque siempre está observándote "disimuladamente"- Edward hace comillas con sus dedos
-Celoso- Alice dice bajito
-Yo no soy celoso- Edward refunfuña
-Si lo eres- le digo abrazándolo, siento sus brazos de mármol rodearme
"Así te quiero"
El día de clases transcurre normal. Empiezo a sentir más la mirada de Jackson donde quiera que voy. Su mente es un lio, esta celoso de Edward, me quiere de alguna manera pero es más su manera de querer saber si estoy segura con él pues siente algo raro de los Cullen como los demás.
Él siente lo mismo conmigo, en su mente la primera vez que me vio también me comparo con los Cullen, sentía una vibra más pesada de mi parte que la de ellos, pero sorprendentemente eso no lo alejo, en cambio se sintió más atraído hacia mí. Su mente a veces comparaba las auras de sus compañeros con los de mi familia, siempre resultaba más fuerte la de nosotros. Tal vez el amor es ciego como muchos han dicho.
Jackson me dejo con un gusto raro en la boca, algo tenía. En el coche con Edward estaba en otro mundo y él lo sabía.
-¿Crees que Jackson es algo?- le pregunto rompiendo el silencio. Estábamos acostados en el sillón de su cuarto.
-¿Algo como que?- me dice sobándome el brazo
-No lo sé- me encojo ante la sensación que causa el roce
-No- me dice- He revisado en su mente y no hay nada de nada- me tranquiliza
-Lo sé, también lo he hecho pero algo no me cuadra, siento algo que proviene de el
-Tal vez sea su don- bromea Edward- No ha de ser nada, solo estas intentando encontrarle algo de sentido a emociones que los humanos sienten- su mano recorre mi brazo
-Tal vez
Le restamos importancia y pasamos a hablar sobre qué haremos en un futuro. Aunque claro esa duda sigue en mí. La idea de Edward no es tan descabellada, si se convirtiera tal vez tuviera un don extrasensorial.
-¿Viste el anillo en la visión de Alice?- me pregunta sacándome de mis análisis sobre Jackson Smith
-Si
-El anillo es de mi madre, Carlisle lo consiguió- me explica
-¿Has pensado en casarnos?- le pregunto
-¿Tu no?- me dice
-No en verdad, llevamos solo mes y tanto- digo recordando las fechas
-Auch, no me importa que solo sean unos meses, siento que eres tú, estoy seguro de que eres tú la persona con la que quiero pasar el resto de mi existencia. Eres mi luz y la razón de mí existir.
Si tuviera un corazón seguramente estaría desbocado ante las palabras de mi novio.
-Tenemos toda una eternidad para poder casarnos, la vida como inmortal es larga- le digo- Aunque también sé que eres tú, eres mi destino
-Ten por seguro que algún día te lo propondré, Alice ya lo vio- se excusa
-Ese día voy a estar lista para dar ese paso
Aunque he vivido una eternidad, el matrimonio es con lo que más sueño pero al mismo tiempo a lo que más temo. He realizado miles de experiencias humanas, tomar alcohol aunque sepa horrible, tener sexo con cualquier desconocido, pero el matrimonio nunca, espero por mi príncipe azul para casarme.
El hombre que tengo a lado me hace soñar con la boda perfecta. Luego de la visión de Alice la imagen de nuestra boda no desaparece de mi fluida imaginación.
-No creo que cambie nada
-Lo sé- le doy la razón
Dudo mucho que las cosas entre nosotros cambien. Parece que somos el uno del otro. Me imagino dentro de 10 años cambiándonos de ciudad, ahora podríamos entrar a las cafeterías y Edward ya no estaría solo, estaría a su lado y mi apellido cambiaria a Cullen para oídos humanos.
-Pero me gustaría decirle señora de Cullen-susurra al oído
