¡Mi estrella favorita eres tú! (Hinata x Inuoka)

Capítulo 14

Narra Inuoka

Admitía que tenía nervios y a la vez emoción de ver a Shoyo una vez más.
La fotografía que él me había enviado la noche anterior, había hecho que las cosas se quedaran muy claras.

Aunque se escuche muy tonto, Shoyo era el que aparecía en mis sueños. Al llegar a esa conclusión, deducí que él posiblemente haya soñado conmigo.

Pero quise dejarlo de esa manera y ya no darle vueltas a la situación.

También ya era el día de la excursión, nuestro equipo y los otros ya se estaban preparando para hacer los partidos. Todos menos los de Karasuno.

– No han llegado...

– Lo más seguro es que se les hizo tarde – me dijo Shibayama – no creo que ellos falten a la excursión.

– Sí, tienes razón – sonreí.

– ¡Inuoka, Inuoka! – Lev se acercó hacia mí – ¿¡En serio estás bien con esto!? – lucía preocupado.

Era cierto, después de que fuimos a competir contra los de Karasuno, Lev había hecho un avance realmente grande en cuestión de sus jugadas y su gran beneficio de estatura. Tanto que hasta Lev llegó a ocupar mi lugar, por el momento.

A pesar de aquello, no me sentía triste o enojado con él, de hecho era todo lo contrario. Estaba muy contento de que al fin Lev haya establecido una de sus metas en el equipo y que partícipe en los juegos. Al igual que ayudaba al equipo.

– Sí, al fin vas a participar en los partidos gracias a tus esfuerzos – le sonreí – felicidades.

– Inuoka... – puso sus manos en mis hombros y me parecía que él estaba a punto de llorar – ¡Eres tan gentil, en serio que nadie te merece!

– Bueno...

– ¡Te quiero, amigo mío! – me abrazó y yo sólo le di palmaditas en su espalda – ¡Gracias por confiar en mí!

– Es mejor que vayas a calentar – lo alejé al ver que Yaku se acercaba – ahora mismo.

– Pero todavía no ha empezado nadie a cale-

– ¡Lev! ¡Ven acá ahora mismo! – a pesar de que sabía que Yaku estaba cerca, me sobresaltó su grito – ¡tienes que practicar tus espantosas recepciones!

– ¡Pero no lo digas de esa manera!

– ¿¡Y de que otra forma quieres que describa tus recepciones!?

– ¡No lo sé, pero no lo digas así a pesar de que es verdad!

– ¡Vamos de una vez! – Yaku agarró la muñeca de Lev y lo empezó a jalar – ¡y espero que hayas practicado desde la última vez!

* Ah, pobre Lev... *

Después, cada equipo inició con los calentamientos mientras que otros empezaban ya sus partidos. Me di cuenta que Kuroo se salió del círculo de calentamiento para después salir del lugar.

Me quedé viendo un rato más a la salida hasta que noté que Kuroo estaba entrando ahora con los chicos de Karasuno. Me emocioné, y hasta mis ojos trataron de visualizar a Shoyo.

No lo encontré.

Cuando acabamos de calentar, traté ahora de visualizar a su aterrador armador (el número nueve) para así poderle preguntar pero tampoco lo encontré.

No conocía tan bien sus demás compañeros, así que, me dirigí hacia donde estaba Kuroo. Al menos él estaba viendo la libreta de las estrategias.