Razón 2: Gustos inalcanzables.

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El cumpleaños de Sehun finalmente había pasado y nuevamente estaba ahogándose en su miseria de estudiante universitario frustrado y con deseos de irse a dormir. Ese domingo transcurría como cualquier otro, su hermano menor jugando y lanzados gritos por doquier en la primera planta, su mamá cocinando la cena y su padrastro viendo una película en la sala, mientras él leía por quinta vez las palabras en su computadora buscando algo de la poca concentración que le quedaba luego de dos horas intentando terminar ese informe. El teléfono vibró y lo dejó pasar, solo le faltaba unas cuantas líneas para acabar, sin embargo la persona al otro lado no daba tregua y la vibración se prolongó dándole a entender que lo estaban llamando.

- ¿Qué quieres? - el nombre de Minseok estaba en la pantalla antes de contestar y una risa fue lo que lo recibió.

- Ven a mi casa, Sehun y Junmyeon están aquí, solo faltas tú.

- Sehun vive en el otro bloque de tu apartamento, y con Junmyeon no se que clase de brujería hiciste para que se apareciera por ahí, pero yo no estoy tan desocupado como ustedes.

- Te espero en media hora - y con la diversión que caracterizaba a su primo, cortó la llamada haciéndolo suspirar mientras sopesaba sus posibilidades, y solo le bastaron dos segundos para saber que ese informe se haría al día siguiente después de regresar de sus clases.

- Mamá, voy a casa de mi tía.

- ¿Y la cena? - su madre salió de la cocina de brazos cruzados - ¿No estabas estudiando?

- Estaba, verbo pasado. Y la cena puedes guardarla, sabes que no me importa comer tarde - si seguía hablando con la señora encontraría miles de peros, así que solo se acerco a Baekho para dejar un beso en su cabellera oscura, y decirle adiós a su padrastro y a su madre con la mano, fundiéndose en las calles de su vecindario y no tardando mucho en llegar al complejo de apartamentos donde sus primos residían, ventajas de vivir cerca, era que siempre podía escapar cada vez que las cosas en casa se volvian difíciles. Luego de unos cuantos minutos más, llegó al segundo piso, tocando el timbre y escuchando el ruido al otro lado de la puerta.

- Llegaste más rápido de lo que pensé.

- Yo también - saludó a sus tíos, luego a sus primos y amigos antes de adentrarse en la habitación de ambos chicos y comenzar a pelear por una película.

- Pero Baekhyun...

- No, si piensas que voy a dejar que pongas una película de miedo es porque no me conoces, llego a ver alguna imagen que de indicios de eso y date por muerto Park Sehun - su amigo resopló para continuar vagando entre los títulos de las películas.

- Entonces Baek, ¿algún novio del que no sepamos? - rodó los ojos recordando que siempre le hacían esa pregunta, y la respuesta seguía siendo la misma.

- ¿Me ves como alguien con uno? - estallaron en risas en la habitación, reconociendo que lidiar con el castaño era algo complicado - Además, si no son idiotas, tienen pareja o son heterosexuales, no hay mucho para escoger y ...

- Y tu no ayudas mucho - completó Minseok la frase que no se suponía debería terminar así.

- Igual no tengo afanes de conseguir uno, no después de ser el elegido para consolar a un Minseok despechado ni de ver como Junmyeon pasa de mujer en mujer - los chicos rodaron los ojos, porque para ellos esas no eran razones suficientes para no enamorarse.

- A ver, el caso de Minseok y tuyo es diferente, solo debes saber elegir a uno que no sea tan idiota y listo. Mírame a mí, voy para dos años de relación con Irene y estoy bien.

- Sehun, es que Irene es un amor, ni siquiera se como conseguiste que aceptara salir contigo - el azabache hizo gestos de falsa indignación antes de que su teléfono sonara.

- Estoy donde la señora Kim... No... Dile a Yoora... Ven a buscarlas entonces... Como sea - las pocas frases dichas antes de que colgara no fueron desapercibidas por Baekhyun, quien se había quedado mirando luego de que Minseok saliera por llamado de su padre; y Jongin junto con Junmyeon comenzarán una conversación en torno a un partido de la semana pasada.

- ¿Qué sucede?

- Chanyeol llegó de la calle y no tiene llaves, Yoora se llevo por error las suyas la última vez que vino y nuestros padres salieron. Le dije que si quería viniera a buscar las llaves, porque yo no pienso llevárselas - río del puchero de Sehun y salió a la cocina después en vista de que el azabache se había sumado a la conversación del partido y él ciertamente no entendía nada de aquello.

- ¿Que hacen? - su tía y Minseok estaban de espaldas hablando de algo cuando entró.

- La comida, le estoy diciendo a Minseok que vaya al supermercado a comprar unas cosas que me faltan y no quiere.

- Mi papá dijo que puedes pedir pizza y no quieres. Ganas de complicar tu vida, y de paso la mía - río cuando su tía le dio un golpe en la espalda a su primo y este se quejara diciendo que no iba a ir a ningún lado, y luego el timbre sonó.

- Yo voy - se ofreció a abrir la puerta dado que era el más cercano, al estar apenas en la entrada de la cocina, luego de pelear con la compleja cerradura de esa casa finalmente la abrió y Park Chanyeol vestido de manera casual se encontraba al otro lado del umbral.

- Hola Baekhyun, ¿cómo estás? - la sonrisa de aquel chico debería ser ilegal, no podía ir por la vida de aquella manera sin hacerse responsable de los daños que hacía en el corazón de chicos y chicas.

- Hola Chanyeol, bien. ¿Buscas a Sehun? - el mayor asintió y mientras se alejaba a la habitación de sus primos, permitiéndole el paso al alto y escuchando los saludos del chico con su tía y Minseok recordó porque él mismo era un hombre frustrado - Sehun, vino tu hermano.

- Dale las llaves - el azabache le arrojó el objeto que lo había privilegiado con la presencia de Chanyeol, porque para nadie era un secreto que el hermano de uno de sus mejores amigos era hermoso. Con su estatura pasada del metro ochenta, sus ojos cafés escondidos a veces por elegantes gafas transparentes, su cuerpo delgado pero musculoso que se veía bien tanto en el uniforme de medicina, como en los simples jeans con suéter que usaba ese día, con su cabello negro rebelde y su lindo hoyuelos que le agregaba algo de ternura a su imagen - Chanyeol - estiró las llaves en dirección al chico y sus manos rozaron, sabiendo que la corriente eléctrica se desató en una sola dirección, porque aunque no trataba con Chanyeol, sabía que tenía dos grandes cosas, una novia y consecuentemente era heterosexual, o eso asumía su retrasado cerebro.

- Gracias Baekhyun, tiempo sin verte - no se sonrojó, rara vez le ocurría aquello a el, pero si se sintió bien saber que un chico lindo lo recordaba, porque a pesar de llevarse cuatro años de diferencia, en su memoria aún existía retazos de los momentos en que jugaron juntos cuando era pequeño y visitaba a sus primos.

- Si, mucho tiempo - y Chanyeol le regaló una de esas sonrisas que solo veía en las fotos de sus redes sociales, mientras decía lo afortunados que eran algunos por tener personas tan lindas a su lado.

Razones para NO enamorarse ♡ Chanbaek.Where stories live. Discover now