Capítulo 22

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-¿estás lista?- me preguntó David una vez que ya teníamos todo metido en la cajuela del carro que se compró hace poco.

-más que lista, además mis padres ya están allá, quiera o no tengo que ir- dije- aunque me da algo de miedo conocer a tus padres- confesé. David soltó una carcajada.

-se te olvida que también vas a conocer a mi hermana, ella es a la que tienes que impresionar- le lanzo una mirada de pocos amigos.

-¿por qué me lo tienes que recordar?-

-tranquila, los vas a impresionar, así como me impresionaste a mí-

Todo el viaje fue lleno de risas y anécdotas extrañas.

Me encanta pasar tiempo con David, me encanta ver como se le ponen los ojos cada vez que sonríe, amo como me hace reír, su manera de ser con todo el mundo, sacándoles una sonrisa en cualquier momento, como es con los niños, la forma en la que los trata, cualquier niño se le puede cruzar y él ya está abrazándolos, besándolos, y jugando con ellos, eso es lo que más me encanta de David. ¿Qué puedo decir? estoy enamorada de él.

-llegamos a nuestro destino, mi Luna- besa mis nudillos, lo que hizo que sonriera.

Cuando bajo del carro, me quedo pasmada con la belleza de la casa de los padres de David, un poco más y es una mansión. Una hermosa casa como las que se ven en las películas y series de Estados Unidos, blanca con detalles dorados, una puerta principal de cristal, y al entrar me conseguí con puro mármol y estanterías de cristal, en esta casa puede vivir un ejército.

-welcome to my house- David me señala su vieja casa, que de vieja no tiene nada. Trago duro, sin poder asimilar tanta belleza.

-wow, emmm... es- me interrumpe, él y su maña de interrumpir.

-mucho ¿verdad?-

-un poco, pero es hermosísima- los dos reímos.

-¡hijo!- la voz de la madre de David llegó a nuestros oídos, venía casi corriendo a abrazar a su hijo, y más atrás su padre.

-mamá, papá, los extrañé, muchísimo- David empieza a buscar a alguien con la mirada- ¿dónde está Karen?-

-oh, ella salió hace rato para comprar algunas cosas, no debe tardar en llegar- respondió el padre de David.

-mamá, papá- me toma de la mano- les presento a Génesis, mi amiga especial- yo asiento sonrojada y nerviosa, pero aun así pude formular algunas palabras.

-mucho gusto, es un honor conocerlos- les estreché la mano a cada uno.

-¡hijo qué hermosa es!- dijo su madre, y me sonrojé ante ello.

-lo sé, es perfectamente imperfecta- me guiña el ojo.

-no es para tanto, pero igual muchas gracias- respondí todavía sonrojada.

-mi hijo es afortunado de tener una chica tan hermosa como tú- ésta vez fue el padre de David quien me elogió.

-sí que lo soy- David me toma desprevenida al darme un beso en la mejilla.

-pasen, tus padres ya están adentro, nos están esperando-

Pasadas unas horas, empezamos a charlar entre todos. Los padres de David son demasiado dulces y amables, aunque a veces me llenaban de preguntas, pero nada de lo que no pudiera responder.

-llegó lo que más aman en esta casa- una voz femenina se hizo oír y todos volteamos. ¡Dios mío! La hermana de David sí que es una hermosura, me da un poco de envidia.

-¡hermana!- sale David a abrazarla.

-por fin te apareces- el padre de David se dirige a Karen.

-perdón, es que había una cola descomunal, de broma y pude salir con la luz del día- se ríe y cuando voltea su semblante se endureció al verme, pero fue reemplazada al segundo por una sonrisa leve- así que ella es la que robó el corazón de mi hermano- con timidez me acerqué a ella y estreché su mano.

-mucho gusto, me llamo- me interrumpe. Ya veo que es igualito a su hermano, al menos en eso se parecen.

-Génesis- se apresura a decir- David nunca deja de hablar de ti, cada vez que chateábamos o nos llamábamos, te mencionaba, era un fastidio. Pero eres demasiado bella, así que en eso acertó-

-uhm gracias- apenada respondí- pero tú eres aún más bella- ésta soltó una carcajada.

-me agrada- le dijo a su hermano.

-espero y se lleven bien- expresó David. Las dos asentimos.

-yo también- dijimos Karen y yo a la par, lo cual hizo que nos riéramos.

-por ahora, vamos bien- dijo entre risas Karen.

-vamos a cocinar, hija- le ordenó la madre de David a Karen, quien bufó pero asintió.

-está bien-

/

David parecía nervioso durante la cena, su pierna temblaba y casi no hablaba, lo cual es muy raro en él.

Cuando terminamos de cenar, se levantó y con un tenedor y una copa llamó la atención de todos.

-hay algo que quiero anunciar, bueno... pedir- sus ojos se clavaron en mí, lo cual hizo que me asustara. Sacó una cajita aterciopelada negra, y mientras la abría, anunció- Génesis Cardozo. ¿Quieres ser mi novia?- me atraganté con el champagne que me estaba bebiendo, empecé a toser como loca.

Mi vista se posó en mis padres para buscar una señal de aprobación o de rechazo. Los dos asintieron con una sonrisa de oreja a oreja.

Yo con las mejillas acaloradas y rojizas, respondí- ¡Sí! Sí quiero ser tu novia- todos empezaron a aplaudir y a silbar. La emoción en el rostro de David se notaba a kilómetros. A penas terminé de hablar me atrapó en sus brazos y me susurró al oído.

-prometo cuidarte, Mi Luna, Mi Damisela Cachetona y... Mi Novia- lo último lo dijo lento y gustoso.

Una vez terminó de abrazarme tomó el collar que se encontraba en la cajita aterciopelada y me lo colocó. Un hermoso collar de plata, con un dije de Luna que brillaba en un color azul claro.

-ábrelo- me ordenó, fruncí el ceño al no comprender- la luna se abre. Ábrelo- éste tenía una especie de botón, que al presionar hizo que la luna se abriera, dejando ver una pequeña foto. Una lágrima de emoción recorrió mi mejilla izquierda- ¿te acuerdas de ese día? Fue el día en el que nos declaramos- sonreí al ver la foto. Nos la tomamos el día en el que declaramos lo que sentíamos el uno por el otro, en el centro comercial.

-bueno, bueno, esto amerita un brindis- anunció el padre de David, y todos tomaron sus copas con champagne- ¡por los novios!-

-¡por los novios!- todos repitieron.

-felicidades, hermano. Ya era hora- todos reímos ante la felicitación de Karen.

David me tomó de la cintura y me acercó ligeramente a él- me haces el hombre más feliz del mundo-

Amando la Luna (EDITANDO)Where stories live. Discover now