Cap. 73: Fiesta Azul

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Ok... no era como que estuviera esperando ansiosa la famosa visita de Seth, pero admito que creí que se demoraría menos tiempo en aparecer. Lo que quiero decir es que, pasarme dos semanas mirando por la ventana cada dos segundos no significaba nada, era sólo que quería estar preparada para llevármelo lejos antes de que conociera a los Doyle y me dejara en vergüenza. Sí, eso era. De todas formas, como ya dije, han sido dos malditas semanas de estúpida espera y ahora mi móvil vibraba y al revisarlo, lo único que encontré fue un "Ya voy", nada más.

-¿Qué es?.- preguntó Chris, sacándome de mis quejas internas.

-Al parecer Seth está vivo.- dije tratando de restarle importancia.

Me guardé el móvil en el bolsillo y volví a tomar la cuchara, revolví el helado que había dentro del pote y le agregué un chorro más de salsa de caramelo. Chris hizo una ligera mueca de asco al verme, pero luego simplemente sonrió mientras alejaba la salsa de mí.

-Suficiente.- dijo, casi me sentí como si yo fuera Emily y él me estuviera cuidando de enfermarme del estómago.-Así que, sí va a venir.- comentó.

-Y justo cuando ya se me pasó la locura, y con ella las ganas de verlo, obviamente.- bufé.

Era cierto, ahora estaba segura de que si lo veía me quejaría hasta que se me secara la boca por dejarme esperando tanto tiempo. Incluso podría hacerle una ley del hielo e ignorarlo.

-Entonces llámalo y dile que no venga, dile que encontraste un atractivo novio que no te va a engañar con rubias teñidas.- cuando terminó de hablar sonrió ampliamente y me guiñó un ojo.

-Oh, basta, harás que me sonroje.- dije siguiéndole el juego.

-Como sea, hablando en serio, si no quieres que venga puedes decírselo.- dijo con simpleza.-Y si viene, podemos echarlo.-

-¿A patadas?.-

-A patadas.- confirmó.

-No sé, no tengo ganas de ponerme violenta.-

-Oh por dios, Laila, eres tan complicada.- dijo llevándose una mano a la frente.-Dices que amas a su hermano, pero aquí estás esperando a que él venga.-

-¿Vamos a hablar de eso de nuevo?.-

Quizás ya lo notaron, pero Chris se sabe toda la estúpida historia, me vi obligada a contarle, por el bien de nuestra nueva relación de amistad y confianza. El único problema con que sepa todo es que no se ha contenido a la hora de decirme lo que piensa, al parecer tiene madera de psicólogo o de doctor corazón, ¿quién lo iba a pensar? Quizás cambió un poco durante el año pasado.

-Creo que deberías olvidarte de los dos, no eres buena para ninguno de ellos.- dijo.

-¿A qué te refieres? ¿Estás tratando de decir que soy poca cosa?.- dije, bastante indignada, era la primera vez que opinaba algo así.

-No, estoy diciendo que ya arruinaste todo con los dos y que no hay forma de que salga algo bueno de toda esa situación. Para empezar, ya destrozaste completamente a Seth...-

-Eso suena feo.- lo interrumpí.

-Ahora él sabe lo que es amar a alguien y que ese alguien no te quiera, así que, sí, pisoteaste su pobre corazón.-

-Oh, por el universo, eres tan malditamente cursi, me siento como en un libro de Nicholas Sparks.- no pregunten como conozco a ese tipo.

-Y Keith... bueno, si comienzas algo con él arruinarás más a Seth y así terminarías de ganarte el título de la persona más destruye sentimientos de la galaxia.-

DescontrolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora