Descontrol

Sabían que...?

Hola! Cómo están?? Muy bien supongo y espero.

Bueno, esto obviamente no es un capitulo, pero tampoco es un aviso, así que no se asusten. Resulta que hoy estaba pensando en esta historia (ya que me encontraba escribiendo el siguiente cap, que aún no va ni por la mitad, por cierto) y me di cuenta que hay muchas cosas en la historia que han cambiado mientras avanza, así que en este... eh, ¿apartado? he decidido contarles curiosidades acerca de la historia y sus personajes. Léanlo si les interesa saber cómo se fue creando esta historia o si simplemente están aburridos y no saben en qué más gastar su tiempo... Bueno, sin más que añadir, aquí vamos!

1. La edad de Laila

Bueno, resulta que antes de comenzar la historia tuve problemas con la edad de Laila. Como saben, cuando la historia comienza ella tiene 14 años y a mí eso me... incomodaba "¿Por qué Julie? ¿Por qué te incomodaba?" Pues porque yo estoy lejos de tener esa edad, sí aun soy joven, pero hace tiempo que no pienso como una chica de 14 y ni recuerdo qué cosas se pasaban por mi cabeza a esa edad. Me fue difícil convencerme de empezar a sus 14, pero así debía ser y así fue, aunque aún sigo con la idea de que no supe retratarla como debía ser en los primeros capítulos. Sobre todo porque no se comporta como una niña de 14, digo, ¿Quién bebe y fuma y piensa en cosas para mayores a esa edad? Nadie! Bueno, deben haber excepciones ._.

2. Lucas!

Oh, Lucas!!! Ese personaje que por tanto tiempo muchas amaron y que siguen amando en secreto porque presienten que nunca volverá a aparecer... (lo sé chicas, sé que tienen esperanzas) Ok, no, enserio, ¿por qué se ganó tantas fans? Nunca pretendí que fuera un personaje relevante. Bueno como sea, la cosa es que Lucas no iba a existir en un principio, pero se metió en la historia porque necesitaba a alguien que reemplazara a Tyler (el hermano de Laila) no la podía dejar sola y abandonada en el mundo sin nadie para guiarla... y, Lucas, tú fuiste perfecto, cumpliste tu rol y te extrañamos, ojala aparezcas pronto... Oh, otra cosa, no soy fan de las relaciones alumna-profesor, hubo un tiempo en que lo consideré, pero luego deseché la idea porque no me gusta. Así que siento destruir sus esperanzas, aunque a estas alturas creo que ya no tenían jajaj

3. Laila en la vida real

Creo que nunca mencioné esto antes, pero Laila está basada en una persona de carne y hueso, más específicamente en una de mis amigas. Ambas se parecen mucho en general, por lo infantiles, orgullosas e indecisas con las cosas que tienen que ver con los lindos, lindos, sentimientos... pero claro que Laila es una versión muy exagerada de mi amiga, de todas formas, ahora me cuesta un poco compararlas... ya que Laila cobró vida por sí sola y ahora ya no sé si mi amiga haría las cosas que Laila hace xD

4. Laila y sus venganzas

Bueno, como han notado, nuestra amiga es algo explosiva y bastante rencorosa. No le gusta quedarse sin hacer nada si alguien la lastimó o molestó (cosa en la que es muy diferente a mí, por cierto, odio las discusiones y peleas, trato de evitarlas lo más posible) Y sus venganzas... aquella en que le corta el cabello a María Gómez (¿recuerdan a esa chica?) se me ocurrió gracias a Paramore, por la canción Misery Business, vean el video y sabrán por qué. Oh! y cuando vuelve a vengarse de María y besa a su novio, sí... eso también salió de ese video.

5. Seth en la vida real

Al igual que Laila, Seth está basado en alguien real con quien tuve unos momentos difíciles... Son muy parecidos en la forma de hablar, pensar y actuar, oh y no sé si recuerdan que en la historia Seth tiene problemas al corazón (aunque no se nota mucho) bueno, el verdadero también los tiene. Como sea, al principio un chico como él encanta, divierte y vuelve a encantar y es fácil de tratar, pero con el tiempo las cosas cambian... La diferencia más notable entre el Seth de Laila y el real es que el de Laila al menos tiene sentimientos. Cuando terminé de escribir la escena en que él le dice que se enamoró de ella me di cuenta que se parecía mucho a lo que me hubiera gustado escuchar alguna vez, pero no... Ok, esto ya se puso patético, vamos al siguiente punto.