Narra Zoey.-
Ambos nos quedamos mirando fijamente a la Ouija, mientras ésta se movía dictando aquella frase. Ambos estábamos completamente paralizados, tratando de buscar alguna acción a lo que estábamos prescenciando. Ambos permanecíamos tomados de las manos, y creo que eso nos dió el valor suficiente como para seguir observando al juego.
-....
-....
Un ruido fuerte se escuchó en la habitación, y el diario, que se encontraba cerrado y en mi cama, se cayó solo y se abrió juato en la página donde habíamos quedado.
No lo dudé y salí corriendo, arrastrando a Josh mientras nuestras manos seguían unidas.
-Tenemos que seguir leyendo.- dijo él.-
-Estás loco o qué te pasa?.- le repondí atónita por lo que acababa de decir.-
-Acaso no te das cuenta? ella nos dejó el diario justamente en la página donde habíamos quedado. Ella quiere que lo sigamos leyendo.- dijo. Eso me hizo pensar un poco. ¿Qué sería peor? Seguir leyendo el diario como ella quiere......o desobedecer a un espíritu que no conocemos. Definitivamente opción número uno, pero aún tenía mis dudas.
-Y si lo del diario no tiene nada que ver?.- le contesté a mi amigo, que pronto se iría dejándome sola como antes.-
-No lo creo.- me respondió. Dí un largo suspiro, algo frustada, porque realmente ya me daba miedo seguir leyendo aquel viejo montón de papeles y cartón.-
-Está bien, pero sigamos mañana.- él me puso una mirada rara, lo que me hizo reflexionar nuevamente. Si aquel espíritu nos "ordenó" que leamos el diario ya, debíamos leerlo ya.- mmm...mejor no...leámoslo ahora.- le volví a decir.-
-Eso me parecía...mm bueno...vamos.-
Entramos en mi habitación, y yo comencé a leer, a pesar del miedo que le tenía a volver a hacerlo...-
Narra ___.-
Luego de separarnos del beso, nos quedamos mirándonos fijamente por unos minutos. Juro que en ese momento todo lo malo se había esfumado, y era como si...nuestras locas mentes se hubieran unido en una sola, formando una increíble pero letal combinación. Juro que en ese momento, todo era perfecto.
Hasta que mi papá entró en la habitación. Chand y yo nos separamos de golpe, tratando de fingir que nada había pasado. Al parecer, mi padre ni siquiera se había dado cuenta.
-Chicos, tenemos que hablar.- dijo mi padre. Y en ese momento mi corazón se transportó lentamente desde mi pecho hasta mi garganta, donde se alojó como si estuviera de vacaciones en una parte de mi cuerpo nunca conocida por él. Tragué, intentando devolverlo a donde pertenecía, pero me fué imposible. Y lo peor de todo, es que no sabía de qué rayos nos iba a hablar mi padre. Él dió un largo suspiro.- acabo de atender una llamada que supuestamente, era de los estudios de Fox.-
Y en ese mismo instante, mi mirada y la de Chandler, que anteriormente estaban concentradas en mi papá, se conectaron con un reflejo de alegría. Luego, una gran sonrisa se formó en ambos rostros.
-No me digan que todo esto es verdad....?- preguntó mi papá con una expresión indescifrable. Volteé a verlo y asentí lentamente.
-Y...qué dijeron los de Fox?.- preguntó Chand.-
-.....ustedes...fueron seleccionados para protagonizar la serie chicos...- mi corazón, que seguía instalado en mi garganta, dió un gran vuelco. Empecé a sonreir y luego miré a mi amigo, que tambien sonreía. No lo dudé. Me paré en la cama y comencé a saltar como loca...bueno, digamos que desde antes ya estaba loca...
