Atlanta, 3 de Septiembre de 2054.-
Narra Zoey.-
-Zoey...esto se está volviendo muy macabro, ya....sólo vámonos.- dijo Josh.-
-¡Vamos! no seas miedoso Josh!.- le grité a mi mejor amigo, que aún seguía negándose a mi propuesta.-
-La respuesta aún sigue siendo NO! entiéndelo Zoey, ese diario no es nuestro, por favor, deja eso allí y vallámonos de aquí...-dijo con un semblante que expresaba algo de terror.- porfavor, ya vámonos de esta estúpida casa abandonada.-
-Josh, sólo sigamos leyéndolo y listo, total mira! esto debe ser más viejo que mi abuela!.- le respondí. Quería convencer a mi mejor amigo a toda costa de leer aquel viejo diario, que por lo que ya habíamos leído, pertenecía a una niña llamada ___ Mellark.
- No lo sé Zoey, esto definitivamente no me trae buena espina.....-concluyó él.- recuerda los rumores....a...aquién perteneció esta casa...- dijo mientras comenzaba a temblar...-
-Lo sé, pero recuerda que eso fué hace mucho tiempo Josh, además....todos están muertos...- le respondí. ¿Pero qué le pasaba a este inútil ahora?.-
-¡Con más razón!.- dijo.
-Pues entonces vete, yo lo seguiré leyendo sola. Adiós.- le dije ya bastante enojada. Si tanto quería irse, que se valla, yo no me muevo de aquí.-
-No te dejaré sola Zoey.- dijo con un semblante serio.- vamos.- volvió a decir, obligándome a tomar su mano y salir de aquí.-
-Adiós Josh.- le dije.-
-Dió un largo suspiro.- está bien...me quedaré...pero solo por tí.- dijo bufando.-
-¿Qué esperas entonces? ¡Ven!.- lo llamé, mientras le hacía un gesto para que se sentara junto a mí con mi mano.-
-¿Lees tú o yo?.-le dije.-
-Lee tú.- me contestó con una cara seria.-
-Está bien.- dije buscando con mi vista por donde me había quedado.- aquí está:
Diario de ___.-
15 de Mayo de 2012.-
-___, despierta!- escuhé una familiar voz hablándome, mientras unos brazos me movían de un lado a otro.-
-Mmmmm.....cinco minutos más.....-alcancé a decir con una ronca voz, mientras me tapaba de la luz con mi almohada.-
-___! es el último día de vacaciones, debemos aprovecharlo al máximo.- dijo mientras eguía moviéndome sin cesar.-
-Ahhh! sabías que he llegado a odiarte Chand?.- le refregué a mi amigo, mientras le reboleaba la almohada en la cara.-
-Ya mueve tu trasero de ahí y levántate!.- chilló otra vez.- o te levantaré yo con un balde agua fría!.- y, como sabía que él era completamente capaz de hacerlo, decidí poner un pie fuera de la cama.-
-Está bien.- bostecé peresozamente.- pero vete que me voy a cambiar.- él sólo asintió con una sonrisa y me dejó sola en mi habitación.
Salí de la cama, me cambié con algo simple ya que estaba en la casa de mi mejor amigo, casi hermano, y todos ya me conocian, así que no tendría que estar presentable todo el día. Salí de la habitación y bajé a la cocina. Allí se encontraban Chandler junto a su madre y su hermano desayunando.
- Buenos días!.- exclamé.-
-Buenos días!.- contestaron todos al unísono.-