9: Frente a frente

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En la mañana y luego de haber ido a dejar a Laurie en la puerta de la escuela, David y su hija Lucy se fueron caminando y conversando tranquilamente, como si nada hubiese pasado. 

_ Y por eso me ha estado yendo bien, de hecho estoy metida en un proyecto de diseño en la universidad. Así que por eso ayer no pude pasar a recoger a Laurie - le comentó la joven a su padre con alegría.

_ Qué bueno, mi amor, me alegro por ti. Siempre supe que te iba a empezar a ir bien, ambas salieron bastante inteligentes. Estoy orgulloso de ustedes - le dijo su papá, mirando a su hija, sin que ella se percatara.

_ Gracias, papá - le devolvió Lucy con una sonrisa y un beso en el rostro.

Cuando se detuvieron en la puerta del establecimiento, antes de partir, la joven le hizo a su padre la siguiente petición:

_ ¿Papá, tienes dinero que me des? Es que lo necesito para sacar unas fotocopias, por favor.

_ Por supuesto - le dijo, llevándose la mano a un bolsillo de su pantalón para luego sacar unos tres billetes -. ¿Con esto te alcanza?

_ Es más que suficiente, gracias - dijo la joven luego de recibirlos.

_ ¡Ojo, no te los andes gastando en tonterías! - le advirtió.

_ ¡Ay, papá si tu sabes que no ando haciendo esas cosas! - exclamó la joven en señal de reproche.

_ Estoy atrasado, así que me voy. Adiós, mi amor - dijo el hombre dándole un beso a su hija en la frente.

_ Obvio que estás atrasado, si tan tarde que te acostaste anoche - le recordó Lucy levantando una sola ceja.

_ ¡Ya vamos a empezar otra vez con eso! - suspiró David, llevándose una mano a la cabeza.

_ Ya, papá - dijo la joven para apaciguar los ánimos.

En eso apareció a sus espaldas  la misma joven que había ido a recoger a Lucy el día anterior, aquella chica de cabello negro y lacio, y que usaba frenos. Era la misma Jacque en persona.

_ Hola, Lucy - le saludó la joven tras darle un abrazo a su amiga.

_ ¿Jacque, cómo estás? - le respondió con un beso en la cara.

_ Hola, señor - dijo la joven estrechándole la mano a David. 

_ Hola, qué tal - contestó el hombre entregando su mano con gentileza.

_ Papá, ella es Jacque, una compañera de la universidad - la presentó Lucy.

_ Mucho gusto, Jacque, soy David el padre de Lucy - respondió con una sonrisa.

_ El gusto es mío, señor David - respondió la chica con amabilidad, luego dirigiéndose a Lucy dijo - ¿Oye, trajiste las cosas para el trabajo que hay que hacer en la noche?

_ Sí, claro, aquí tengo todo - contestó Lucy con formalidad, luego a su padre le preguntó - ¿Papá, me das permiso para quedarme en casa de Jacque esta noche? Es que estamos juntas en el proyecto que te conté.

_ ¿Pero van a trabajar? - insinuó su padre, señalando a las chicas con su delgado dedo.

_ Sí, no se preocupe - aseguró Jacque.

_ Pues, no hay problema puedes ir.

_ ¡Gracias papá! - exclamó la joven emocionada.

Los tres se despidieron amistosamente, David siguió su rumbo hacia el estudio de grabación, con el fin de continuar con su álbum, en cambio las dos chicas ingresaron al recinto tomadas de la mano, sin que el primero lo notara.

Ella no es mejor que yoWhere stories live. Discover now