Un minuto más (Jesús y Daniel Oviedo)

Capítulo 39

Capítulo 39 –

19 de marzo.

*Narrador en primera persona*

Se supone que en un par de días voy a poder marcharme y la verdad es que me alegro muchísimo porque tengo ganas de ver mi móvil, mi habitación y todo lo demás. Tengo ganas de ver si recupero algo de estos seis meses.

Lore está a mi lado leyendo atentamente uno de los libros obligatorios de segundo de bachillerato y David está en el sillón jugueteando con su móvil. En estos casi dos días ninguno de los dos se ha movido prácticamente de aquí, excepto para ir a casa en un par de ocasiones. Me acurruco un poco más al lado de Lore, adormilada. Me da unos calmantes para el dolor de cabeza que me dan un sueño terrible. Mi hermana me acaricia el pelo con cariño y a los pocos segundos David se agacha también al borde de la cama.

–¿Estás bien? –Me susurra David con dulzura, y yo asiento como puedo.

–Sí—Contesto en un hilo de voz—Solo  son los calmantes que me dan muchísimo sueño, de verdad. Ya nos lo ha dicho mamá.

Aunque tengo los ojos cerrados casi puedo sentir sus miradas de preocupación sobre mí.

–En serio—Insisto con una sonrisa—Estoy bien. Dejadme dormir la siesta.

Y aún así se quedan allí unos minutos a sabiendas de que va a pasar una enfermera con la merienda y la atosigan a preguntas. Al final, convencidos de que efectivamente son los calmantes y de que estaré dormida un par de horas, se despiden de mí y me dicen que volverán para la cena, que así van a casa un rato pero que en breves vendrán mis padres. Yo asiento como puedo y me dejo llevar por el sueño y por el silencio y calma que reina en la habitación, por fin.

*Narrador en tercera persona*

─ ¿Cómo estaba esta habitación en septiembre? ─Piensa Lore en voz alta, con el ceño fruncido.

─Con bastante menos Dani de por medio. ─Ríe David tristemente mirando a su alrededor.

─A ver, Dani me ha dicho que aquí tiene que haber como tres sudaderas de él, así que... ─Suspira Lore, abriendo el armario y rebuscando entre ellas. ─Esta tiene que ser una, esta y...

Se cruza de brazos después de lanzar las dos primeras a la cama y observar a David quitando fotos del corcho. Lore examina las prendas de ropa como si le fuese la vida en ello y suspira al encontrar la tercera.

La azul, la de la historia bonita. La que ella tiene igual. Con la que se sacaron la foto.

Se muerde el labio inferior, porque a ella también le afecta. Si siempre Elena ha sido su mejor amiga, desde que estaba con Dani la cosa se había duplicado. Y ahora esto.

─Dios, David, esto va a ser muy complicado, tendremos que hacer limpieza hasta en los instagram.

─El primero en el suyo. ¿Nos sabemos contraseña?

Lore asiente una vez.

─Supongo que como nosotros, la misma para todo, ya sabes.

─Sí, claro. ─Suspira David, que quita otra foto del corcho y se queda mirándola─ La idea de Dani no es mala, pero tiene que estar destrozado.

Lore se apoya en el hombro de su hermano y los dos se detienen a observar atentamente la fotografía en la que salen Dani y Elena. Lorena sonríe, porque aún recuerda como Ele se encaprichó de su chaqueta roja de hollister aquel día y como ella se la cambió por la suya de cuero y como discutieron de coña y como acabaron entre risas como siempre. Y como les sacó la foto a Dani y Elena en el jardín. Salen tan... adorables. Luego David rescata del corcho también la de aquel día en la nieve. Es preciosa.