16

1.5K 92 5
                                    


-Tu tienes el poder, Emma -Me toma de las manos con delicadeza- Alex y tú son los hechiceros más poderosos del universo, pueden apoderarse del mundo si ustedes quisieran -Sus frías manos tocaron mis mejillas, sus ojos azules estaban fijos en los míos

Estábamos sentados en la cama con las piernas cruzadas, el se encontraba enfrente de mi. Las luces de mi recamara se encontraban apagadas, solo se encontraba la televisión encendida pero con poco volumen.

-¿Por qué debería devolverte a la vida? -Pregunte embobada por sus ojos

-Necesito reunirme con mi familia, ellos me necesitan y soy el único que puede ayudarlos -Dice con su voz un tanto ronca pero suave

Me perdí mirando el azul de sus ojos, una sonrisa pequeña se forma en su rostro

-Los ancestros no nos permiten revivir.. -Trate de explicarle, en sus ojos se reflejo tristeza- Trataré de ayudarte, solo porque soy buena persona -Dije finalmente, su mirada de suavizo y sonrió dulcemente- ¿Quien es tu familia? ¿Cómo moriste?

-Vengo de una familia de hechiceros, no tan poderosos, un día fuimos cazados por monstruos.. vampiros. -Apretó la mandíbula- Sólo estábamos pasando la tarde en familia, no hacíamos nada malo.. -Su voz se quebró y sus ojos se inundaron de lagrimas, sentí como sus frías manos agarraron las mías y él me miró a los ojos- Te lo juro, emma.

Trague saliva antes de hablar, acaricie sus manos suavemente

-Te creo, sé cuándo alguien dice la verdad -Apreté los labios- ¿No sabes quiénes eran los vampiros que te atacaron?

-Los Mikaelson -Dice entre dientes- Los monstruos con los que tú convives a diario, ellos fueron los que me arrebataron la vida.

-¿Te asesinaron así nadamás? -Pregunte, el asintió- No lo sabía.

-Ya habíamos tenido problemas con ellos -Dice, fruncí el ceño- Yo amaba a Rebekah, quería casarme con ella pero Klaus no permitía que yo me acercara a su hermana, debí hacerle caso.. -Unas cuántas lágrimas resbalaron por sus mejillas- Rebekah me dejó de hablar de un día para otro, dijo que solo me utilizaba y dijo que era el ser más débil que había conocido -Su labio inferior tembló- Eso me rompió, pensé que me amaba. Kol asesinó a mi hermanito -Esta vez no pudo sostener su llanto y empezaron a resbalar las lágrimas por sus mejillas- Kol asesinó a mi hermanito de siete años, dijo que solo era una advertencia.

No podía creer lo que el chico me estaba diciendo, sé que Kol es capaz de asesinar a mayores pero no a un niño de siete años, me niego a creer que Kol hizo tal cosa.

-¿Estás seguro que fue Kol? -Pregunte con la mirada perdida

-Fue él. -Dice firmemente, lo mire con dolor- Sé que nos acabamos de conocer y que no confías en mí pero no sé que hacer para que confíes en mí.

-Jackson, te creo. -Repetí y lo tome de las manos- Sé cuándo una persona dice la verdad, es algo de mis poderes.

El suspira profundamente, se abalanza encima de mi abrazándome

-Gracias, sé que puedo confiar en ti -Dice separándose de mi- En el otro lado todos hablan muy bien de ti, ¿Cómo lo haces? -Pregunta- Todos te aman y eres la preferida de los ancestros, ellos confían en ti y te apoyan en todo.

-Ni siquiera yo lo sé -Levante mis hombros, nos reímos- ¿Puedo preguntarte algo?

-Claro.

-¿Conoces a una chica un tanto alta de pelo rizado? -Pregunte

-¿Amelie? -Pregunta, asentí rápidamente- Ella fue la que me guío a tí, es una gran chica.

-¿Que le ha pasado? -Me atreví a preguntar- No la he visto desde hace mucho, y aunque no lo quiera admitir.. la extraño.

La pequeña Salvatore Donde viven las historias. Descúbrelo ahora