Han pasado dos semanas desde lo de Stiles, en todo ese tiempo la manada ha estado ignorándome, o bueno la mayoría, porque Malia prácticamente se ha empeñado en hacer mi vida imposible.
Sé que está enojada, bueno todos lo están y lo que más quisiera ahora mismo es decirles lo que está pasando, pero eso los pondría en un peligro mayor. Estoy pensando en mudarme a otro país, eso alejaría a los cazadores de aquí, pero todavía no estoy lista para eso, eso conllevaría a dejar a Stiles para siempre.
La zancada en mis pies me tiró al suelo junto con todas mis cosas, mire hacia arriba encontrándome a una Malia muy enojada.
—Estorbas —espeto para después irse con Lydia.
Esto está siendo muy complicado, toda la escuela se enteró de lo que paso y no han dejado de molestarme con eso.
Suspire para después recoger mis cosas y pararme rápidamente, por lo que termine chocando con alguien.
—Lo siento —la camisa de cuadros característica de Stiles me hizo verlo a la cara—. Lo siento —susurré con otro sentido en mis palabras.
Él no dijo nada, solo trago saliva mostrándose nervioso, para después pasar a mi lado, ignorándome.
Mis ojos se cristalizaron, tuve que parpadear rápidamente para evitar las lágrimas.
[...]
—Tengo que hablar contigo —sentí un tirón en mi brazo metiéndonos a un aula vacía.
—¿Qué pasa, Kira? —pregunté viendo como ella cerraba la puerta.
—No creo que tu hayas hecho lo que dices —hablo rápidamente.
—¿Qué? —pregunté en un susurro.
—No te creo capaz de algo así, porque por favor, se veía que tú —me señalo— amabas a Stiles con todas tus fuerzas, siempre lo presumías a todos, presumías tu relación con él —se cruzó de brazos viéndome fijamente—. Así que estoy segura de que tu no hiciste nada de eso.
—No parecía mucho eso al principio —dije recordando la vez que se me quedaba viendo mal.
—Lo admito —alzo sus brazos—, estaba furiosa, ver a Stiles así de destrozado hizo que mi corazón se rompiera. Pero luego analicé y vi que era imposible tu engaño.
—Pensé que nadie se daría cuenta.
—Ahora me dirás lo que está pasando.
Y así fue como le conté todo a Kira. Ella estaba un poco impresionada con lo que le contaba.
—Debes decírselos a toda la manada —yo negué rápidamente—, sería lo mejor.
—No, es peligroso —camine rápido a la puerta y poder irme de aquí.
—____...
—Nos vemos luego Kira.
[...]
Todo el camino a casa me puse a pensar en todo lo que estaba pasando, creo que lo mejor es irme del país. Me senté en una banca de un parque viendo si tenía más opciones, pero no encontraba ninguna.
Solía venir a este parque con Stiles mientras comíamos un helado y caminábamos con nuestras manos entrelazadas. Él es lo mejor que me ha pasado desde que llegue aquí, y agradezco mucho a Allison por habérmelo presentado.
Ojalá estuvieras aquí Allison, tú me darías un excelente consejo ahora mismo.
Ya casi era de noche por lo que camine directo a mi casa. Cuando entre, todo estaba hecho un desastre y en la pared había algo escrito.
Tienes hasta en la noche, brujita.
Mierda.
Ya no había tiempo.
Rápidamente marque el número de Kira.
—¿Hola? —su voz se escuchó.
—Kira, los cazadores van a venir por mí, solo quería despedirme. Quien sabe que pueda pasar.
—¡¿Vas a enfrentarlo tu sola?! —preguntó exaltada.
—Es lo mejor Kira, no quiero que nadie salga herido por mi culpa —salí de la casa directo al bosque.
—Sabes que eres humana a pesar de tener poderes ¿no? —trato de convencerme— Puedes morir si te pasa algo.
—Adiós Kira.
—Espera, espera ¡no me vayas a colgar!
—Kira, si algo sale mal, dile a Stiles que lo amo y que me perdone —no espere a que contestara simplemente corte la llamada.
Me encamine hasta estar un poco más lejos. Tenía miedo, pero si había posibilidad de enfrentarlos y que dejaran en paz lo haría, así después podría recuperar a Stiles.
—Veo que estás lista para morir —volteé rápidamente encantándome a Malcom, apuntándome con una ballesta.
—Espero que te pudras en el infierno —de mis manos empezó a salir unas ondas de color morado al mismo tiempo que mis ojos se volvían de la misma tonalidad.
Empezaron a llegar más cazadores y la pelea se desato, intentaba luchar contra todos, pero eran demasiados.
Estaba agotada.
Uno de ellos me alcanzo a dar un puñetazo en la mandíbula mandándome al suelo. Adolorida intente pararme.
—La bruja es mía —Malcom alzó la ballesta y justo cuando me pare, él disparó.
Caí de rodillas sujetando mi estómago soltando un grito de dolor, dolía demasiado.
—Serás tú la que se pudra en el infierno, brujita —me miro burlón, volvió a levantar la ballesta más no pudo disparar, algo lo ataco.
Su grito de dolor al ser mordido se escuchó por todo el lugar del bosque. Derek lo mordió otra vez, cerca del cuello.
Sentí unos brazos sostenerme.
—Vas a estar bien —Stiles hablo con la voz quebrada—. Vamos a salir de aquí.
—Stiles... —me costó trabajo hablar— yo...
Una mano diferente agarro la mía y vi mis venas tornarse negras, miré a Malia agradecida.
—Está bien —beso mi frente—, Kira nos dijo todo.
—Te amo —mis ojos se cerraban.
—No cierres los ojos, amor —sonreí un poco, me encanta que me diga así. Stiles me cargo y corriendo se dirigió a donde supongo está el Jeep—. No te voy a perder otra vez.
Y mis ojos se cerraron.
[...]
Huele asqueroso. A hospital.
Abrí mis ojos viendo a todos lados, pero pare de hacerlo cuando vi a Stiles sentado en el sillón dormido, con un poco de baba escurriéndole la boca.
Reí suavemente, se veía adorable.
Le acaricie el pelo y eso hizo que despertara.
—Estas despierta —me abrazo fuerte, pero teniendo cuidado—. Estás bien.
No pude soportarlo más y lo agarré de la cara para después besarlo.
—Te extrañe.
La puerta se abrió dejando ver a la manada. Cada uno se disculpó por haberme ignorado, la que más se veía afectada era Malia, pero hable con ella diciéndole que no importaba, nadie sabía que todo había sido falso.
Melissa me reviso y después se fue diciendo que todo estaba bien.
—Bueno, ya que vas a estar como una semana aquí, me quedare a vivir contigo —besó mis labios.
—Eso me agrada —lo bese de vuelta.
—Como en los viejos tiempos —dijo acostándose en mi pecho y pasando su brazo por mi cadera.
Todo estaba bien.