Pov. Natalia
" No quiero presionarte, ésa nunca ha sido mi intención y mucho menos que te sientas incómoda conmigo.
Sé que mis sentimientos podían no ser correspondidos pero no quería seguir ocultándolos, eres parte de mi vida y estaré bien aunque lo único que puedas ofrecerme sea amistad".
El ave sigue esperando pues no me he decidido si contestar o no, después de dejar a Konan en Konohagakure me fui como alma que lleva el diablo.
Tal vez no fue lo mejor pero tampoco sé que responder pues ni yo entiendo mis propios sentimientos. No sé si lo quiero o si estoy agradecida por todo lo que ha hecho por mí.
Aprecio a Neji pero ahora tengo algo más para proteger y no estoy segura de si todo funcionaría. Suspiro y decido mandar al ave sin respuesta alguna.
Usami vuelve a llorar y entro al cuarto para calmarlo, a diferencia de Seijun, él nunca se duerme o se calma con Tita, ni idea del porqué. Cuando entro su mamá sigue dormida, su hermana también está durmiendo y cargado en brazos me lo llevo para otro cuarto.
Él estuvo a punto de morir por mi culpa, tenerlo sano me alivia tanto el corazón. La guerra está a la vuelta de la esquina y por lo que veo Tita está dispuesta a participar, por ella y por sus hijos.
Desde hace tiempo yo había guardado energía para curarlos en cualquier tipo de inconveniente, era muchísima, tanta que creí que estaba exagerando pero al ser prematuros los mellizos la consumieron por completo.
Todavía nos queda tiempo para ponerlos a salvo, para prepararnos nosotras y salir a la guerra, "Tal vez deberías amarrarla para que no vaya" "Aunque tenga que usar los dientes para desatarse irá".
Y luego yo soy la testaruda.
🌊
Hace horas que la isla aterrizó cerca de la orilla, Ōnoki se alejó y eso sólo puede significar el inicio de todo éste embrollo, si todo sale bien el veneno en el cuerpo de Yamato debilitará a los Zetsu y los hará perceptibles a cualquier ninja sensor que esté cerca.
— Ya va a empezar ¿cierto?—.
Tita se queda en el marco de la puerta, se ve mucho mejor y ya hasta se puso su ropa de siempre. La banda de Konoha brilla con la luz y asiento entrando al edificio dónde nos quedamos.
— Empiezan hoy, por lo que sentí ya están formando las divisiones —.
— ¿En cuál estaremos nosotras?—.
— ¿Sigues en pie con lo de participar? Te puedes quedar aquí, no importa cómo pero los protegeré si pasa algo—.
— Iré y no voy a cambiar de opinión, he pensado que tal vez con mi Mokuton podramos disminuir los daños del Jūbi—.
— Hiruzen se encargó de que lo aprendieras casi todo pero ¿segura que estás en condiciones?—.
— Muy segura—.
— ¿Están dormidos?—.
— Profundamente —.
Desato a Harusame de mi cintura y la desenfundo, la pongo enfrente de Tita y agarro su mano izquierda. Del mango sale una espina y la sangre se desliza por ella, Tita no se sobresaltó y mira con curiosidad todo.
— Quedate con ella, tú no la podrás empuñar como tal pero te protegerá tan bien como yo lo haría —.
— ¿Cuál es el plan?—.
— Debido a que heredaste gran parte del potencial que tenía el Primero, tú irás con Naruto y B para enfrentar a Obito—.
— Deberíamos hacer algo con la Cuarta División, nunca se sabe cuando podríamos necesitar a tanta gente —.
— Tú no irás para allá hasta mañana, hoy descansa, recupérate y reúne energía, ve para ése lugar y luego vas para dónde Naruto—.
—¿Y tú? —.
— Iré hoy por la noche, debo de revisar como va lo del veneno—.
—¿Y Usami y Seijun?—.
—¿Completamente segura de que no te quieres quedar?—.
— Muy segura—.
Suspiro resignada y la veo fijamente a los ojos.
— Antes de irme pondré un sello en ellos, como el que puse en Sasori y en Nagato—.
— Me lo esperaba—.
Se queda mirando la cuna tan improvisada que hizo, parece pérdida en su mente.
— ¿Pasa algo?—.
— No quiero que seamos una carga para ti Nati, estaremos bien—.
—¿A qué se debe ésto?—.
Desvía la vista avergonzada y me doy cuenta que para tomar su banda debió abrir el cajón dónde tengo los mensajes que me ha mandado Neji.
— Oh...te refieres a eso—.
— Es un buen chico y muy guapo—.
— ¿Ahora eres casamentera?—.
— No te mentiré me da envidia el amor que te tiene, pero me gustaría verte feliz—.
— Soy feliz—.
— Más feliz, a menos que no te guste— juega con el borde de una manta— Aunque a diferencia de aquella vez con tu compañera, a Neji me lo escondiste, ¿Estás confundida?—.
— Mucho—.
— Se ha portado espléndido contigo—.
— Y también es arrogante y me saca de mis casillas—.
Tita ríe y niega con la cabeza.
— Ambos se sacan de sus casillas, pero parecen divertirse con eso—.
— Tengo miedo de estarme confundiendo y sólo esté agradecida con él —.
— No lo creo, si fuera agradecimiento lo habrías sentido con Kimimaro, Gaara e incluso Temari—.
— Agh detestó el amor, sólo consigue alterarnos—.
🌊
Amarro mi cabello en una coleta alta, ajusto el uniforme de Kirigakure y en lugar de utilizar esa especie de calentadores azules los sustituyo por vendas y sandalias normales. La armadura me queda algo pequeña pero no es incómoda.
Su color se parece al caparazón de Isobu, "Extrañamos a esa tortuga"" Con tal de que vuelva estaría dispuesta a que me pegara con su cola todo lo que quisiera". En parte es la razón por la que no me acerco a Killer B, su relación con Gyūki me trae nostalgia y los sentimientos negativos no son buenos ahora.
— ¿Estás lista? Ya me debo ir—.
Tita guarda varias cosas en un pequeño baúl, acaricia a sus hijos y siento como ya no está tan segura de dejarlos, "Di que te quedas, di que te quedas". Los despide con un beso y se retira para que yo haga mi trabajo.
Al ser muy pequeños no necesito tanto tiempo para sellarlos, en lugar de una especie de ataúd están encerrados en una esfera verde. Se quedarán ocultos en un lugar recóndito, levanto varias barreras por si alguien intenta acceder a ellos.
— Me iré ahora, si mañana no te sientes bien no hay problema si no acudes—.
— Llegaré a medio día —.
— Te cuidaré Tita, a ti y a ellos—.
— Tú también cuidate Nati, mañana será un día difícil —.
Nos despedimos con un abrazo y me marchó de la isla. La luna ya está alumbrando el cielo y para matar el tiempo me concentro en sentir a los demás.
Los Hyūga son fáciles de ubicar, Kimimaro está en la división con Hinata y Neji, más allá en el cuerpo médico se encuentra Chiyo, Utakata y su alumna Hotaru también se nos han unido y comparten división con Gaara.
Junto con Kakashi y Guy siento un chakra muy especial y sonrio para mis adentros. La vieja Chiyo lo logró, Sasori está tranquilo, él será una gran ventaja para combatir a los espadachines de la neblina.
Konan y Nagato se encuentran en Konoha, al iniciar la guerra pedí el traslado de él para el País del Fuego, cuando llegue el momento iré por ellos.
Como lo había planeado Obito no se dio cuenta de que yo suplanté a Konan, él piensa que está muerta y que antes de eso alcanzó a sellar el cuerpo de Nagato con un sólo ojo.
'Sellado' Nagato, Kabuto no intentaría siquiera en utilizar el Edo Tensei con él, hasta el momento todo está saliendo muy bien, espero que así siga. Estoy cargada de pergaminos, tantos que tuve que desechar algunos, es la razón por la que debo llevar cargada la Kubikiribōchō.
Recuperé la espada en el País del Hierro, no puedo creer que la vuelva a cargar aún cuando dije que no lo haría. Maldito Taka, les dije que era una trampa.
Estoy por llegar a la Segunda División, a la lejanía distingo a Kiba. Disminuyo la velocidad y me acerco a paso lento, a falta de una banda de la Alianza tuve que utilizar la normal de Kirigakure, sólo espero que los más tontos no me ataquen por eso.
— ¡Ya basta Kiba!—.
—¡No le grites a Akamaru!—.
Neji voltea a verme, o lo intenta porque se nota a leguas que no me enfoca. Está acostado y Kiba parece aliviado de verme.
— Que bueno que llegas Kikyo, ¿Eres ninja médico cierto? Neji está muy agotado y necesita que alguien lo revise—.
Me acerco a él y noto la pequeña tensión que se genera, "Enfocate en revisarlo, enfocate en revisarlo"" Sólo está agotado". Paso parte de mi energía, con las manos a los laterales de su cara continuo con mi trabajo.
— ¡Un enemigo! —.
Adiós concentración, un ninja de Iwagakure clava el kunai en otro sujeto, de inmediato se transforma en un Zetsu "Funcionó" "Que lista que sos Natalia".
— ¿Cómo lo hicieron? Déjalo, debo ayudar—.
Neji intenta incorporarse pero lo vuelvo a poner en el suelo.
— Tus compañeros se encargarán de eso, ¿Ves? No tienen ningún problema—.
Siguen apareciendo Zetsu transformados pero la División logra identificar a todos los que son infiltrados, " Ah lo que daría por ver la cara de Kabuto y Obito ahora" "Ya habrá oportunidad".
— ¿Qué hiciste?—.
Como no podía ser de otra manera, Neji frunce el ceño mientras me analiza. Me hago la inocente y bufa.
— Bueno, lo que sea que haya sido, sirvió —.
— ¿Ya te sientes mejor?—.
— Sí, no debí exagerar en utilizar mis ojos—.
— Levantate con cuidado—.
— Por fin llegas—.
Kimimaro se acerca a nosotros, él no lleva puesto ningún uniforme, trae su kimono de siempre pero a manera de cinturón se ha puesto la banda de la Alianza Shinobi.
— A ti te estaba buscando precisamente —.
— ¿A mí? Sólo espero que no me metas en líos inecesarios—.
— Para nada, es más bien de carácter social—.
Entrecierra los ojos, su bonito color aguamarina busca la respuesta en mi cara pero al no conseguirla desvía la mirada a Neji.
— Te ayudo—.
Levanta a Hyūga y por un instante siento que sabe todo lo que pasa entre nosotros, " Hasta Kimimaro no aguanta un buen chisme" "Y si él sabe en automático lo sabe Chiyo".
— Ésta noche me quedaré aquí, mañana me desplazare entre las Divisiones y tú irás conmigo Kimimaro—.
— No me gusta cómo suena eso—.
— Ni a mi, pero será mejor esperar, creo que se acercan más infiltrados—.
En contra de mis protestas, Neji activa el Byakugan para seguir vigilando, más y más Zetsu son localizados y erradicados. " Ésta noche va a ser larga".
🌊
— Incluso Kimimaro está tomando un descanso, tú también deberías de tomar uno—.
Me pongo a lado de Neji, mantenemos la vista al frente sin mirarnos entre nosotros.
— El enemigo puede atacar en cualquier momento—.
Otro silencio se instala entre nosotros, las palabras de Tita me vienen a la mente como burlándose de mi resistencia a aceptarlo.
— Kikyo, es bueno ver que estás bien—.
La dulce voz de Hinata es inconfundible, me levanto para saludarla pero ella sigue con la mirada clavada en Neji, "Un minuto, ¿ella también lo sabe?" "¿Es que hay alguien en el mundo que no lo sepa?" "Tal vez fue tema de discusión en la reunión de los cinco Kages y tú ni en cuenta".
— Hola Hinata, de verdad esperaba verte en una mejor situación —.
— Es el mismo sentimiento de todos—.
Disimuladamente nos alejamos, ella parece medio apenada medio atrevida, una rara combinación en Hinata.
— ¿Sabes cómo está Naruto-kun?—.
— Él está muy bien, ustedes progresaron mucho en mi ausencia me imagino, por ahí me enteré que incluso fueron a comer juntos—.
— Ta-también iban Ino, Shikamaru y Sai—.
— Sólo faltaba Temari y hubiera sido una cita triple—.
Se sonroja toda, por más que me lo quiera disfrazar yo sé que fue Naruto el que la invitó, los demás llegaron por obra y gracia del espíritu santo. Esos dos traen algo desde lo de Pain pero no quieren admitirlo, "Ay, ¿es que acaso no te estás mordiendo la lengua?" "Es diferente" "Eso dicen cuando no lo es".
— No te preocupes, él está en buenas manos—.
— Gracias por cuidarlo, ¿Ustedes están bien? Los sentí muy callados—.
— Siempre hemos sido así —.
— Pensé que en cuanto se veían empezaban a gruñir—.
¡¿Hinata me está contestando?! ¡Y utiliza mis propias palabras en mi contra! No, llevame Dios mío, llevame porque si la amable y tierna Hinata me voltea la tortilla que puedo esperar de los demás.
— Bueno pero es diferente, ya casi no peleamos —.
— Si tú lo dices, nos vemos Kikyo voy con Kiba y Shino a revisar el perímetro —.
— Cuidate Hinata—.
La despido y regreso a lado de Neji, " Espera, ¿desde cuando le dices Neji?" "Pues ése es su nombre" "Creo que si nos está pasando algo grave".
—¿Te sientes bien?—.
Grito sobresaltada por la repentina interrupción de Hyūga.
— ¿Qué pasa?—.
— Agh ¡¿Por qué siempre tienes que hacer cosas que me confunden?!—.
— No es mi culpa que no entiendas ni la mitad de lo que pasa—.
Frunce el ceño molesto, "Hoy correrá sangre" "Lo sabía, nunca debimos dejar el buen camino, nadie es igual que el suculento de Kakashi" "¿Kakashi? No querida, nunca debimos involucrarnos con un hombre, son criaturas extrañas que lo único que hacen bien es generar terribles migrañas".
— Retractate Hyūga—.
— Orgullosa—.
— Arrogante —.
— Tonta —.
— Imbécil —.
— Ajerosa—.
— ¡Inepto!—.
— Embustera—.
— ¡Si te quiero!—.
Cierro la boca demasiado tarde, " Si alguna vez te dije que eras inteligente pues olvidalo ¡Estúpida! " "Ya valió todo, si sale bien podemos salir corriendo en cinco segundos".
— Hmp lo sabía —.
Neji sonríe autosuficiente, busca algo dentro de su chaleco mientras yo estoy a nada de temblar por lo alterada que estoy.
— Te lo iba a dar en cuánto aceptarás, Temari me dijo que te gustaban las piedras verdes—.
Me muestra un anillo con una bonita piedra aguamarina, muy parecido al color de ojos de Kimimaro que me encantan. Es pequeña pero se le nota el buen trabajo de tallado.
— ¿Un anillo?—.
" Peligro, Peligro" "Lo mismo hizo Sandra, no caeremos en esa trampa dos veces" "Recuerda que ya no somos tan libres" "No te apresures, tal vez sólo sea algunos de ésos accesorios de promesa".
— No quiero que te espantes y corras, aunque sé que quieres hacerlo—.
— ¿Ahora lees la mente?—.
— Tú cara lo dice todo, ésto es para que recuerdes que estoy dispuesto a todo siempre y cuando me digas que sí —.
— Somos muy jóvenes —.
—Lo sé —.
— Tu tío me odia—.
— Eso...también lo sé —.
Aparta la vista apenado, me pregunto si Hiashi se lo contó, no creo pero Neji es muy listo, seguro que se dio cuenta.
—¿Le temes mucho al compromiso?—.
— No tengo gratas experiencias si eso es lo que te preguntas—.
— ¡¿Qué?! —.
Decido restarle importancia al asunto, ok no es un anillo de compromiso pero tampoco puedo engañarlo.
— Sabes Neji, si quieres estar conmigo debes saber que por encima de ti está otro hombre—.
Su rostro palidece y un asomo de decepción pasa por sus ojos.
— Más bien un niño... Misaki acaba de tener a sus mellizos y yo seré su madrina, y si tengo que ser cómo su madre pues que así sea—.
—Misaki...¿Qué? —.
— Estaba embarazada, nacieron el 2 de Octubre—.
—¿Quién? —.
Casi que puedo verlo uniendo las piezas del rompecabezas, la verdad es que no es muy difícil saber quién es. Tita no se relacionaba con nadie en Konoha y se ponía susceptible con lo referente a Akatsuki.
Añadiéndole la poca diferencia de edad y su participación en mi captura, bueno, la respuesta es bastante obvia. Neji llega a la misma conclusión que yo en su tiempo, me mira sin poder creerlo pero en ningún momento se aleja.
— Que así sea—.
"Ay no...no te pongas a llorar" "Es que...nunca había sentido tanto apoyo de una persona" "Pero eres Uzumaki Kikyo, levanta la cabeza que estás enfrente de muchas personas ¡Y de varias Aldeas!, será muy fácil recordar a la llorona de pelo rojo".
— Te quiero—.
— Ni pienses que te lo voy a decir, todavía debo acostumbrarme a esto—.
Tallo mis ojos para evitar ponerme sentimental y siento como Neji aprovecha para ponerme el anillo en el dedo índice derecho.
— No hay problema, esperaré —.