Me gustó como quedó el lemon aquí (͡° ͜ʖ ͡°)
Tomaste aire mientras pensabas. Tenías a dos personas a tus costados insistiendo casi a gritos que no faltaras al día siguiente. Tus ojos se encontraban cerrados e intentaste que su respiración fuera regular; inhalaste, exhalaste... Sus insistencias estaban comenzando a molestarte pero no querías molestarte o incluso llegar a enojarte con tus amigas.
Ellas se calmaron al ver tu cara, aunque no lo pareciera te veías irritada con todo lo que habían dicho y eso comenzaba a asustarles, después de todo; tú estando molesta ya dabas miedo.
—Podrías... Pedirle al profesor Kyojuro que se case contigo —una de ellas recomendó en voz baja.
—¡Oh sí! Rengoku sensei es muy amable, ¡seguro acepta! —la otra apoyó.
Ahí fue donde comenzaste a pensarlo más, en la tarde hablarías con Kyojuro pero aún así para que todos piensen que es de chiste; se lo propondrás enfrente de todos. Desviaste la mirada, todos tus demás compañeros empezaron a entrar por montones asustados, a tus amigas ni a ti les importó y siguieron hablando.
—Tienes que considerarlo —te dijo la otra. —¡Estamos en tercer año! El último en donde podrás casarte con alguien, si no quieres que sea Hashibira-kun o Kamado-san, pideselo a Rengoku...
Cuando ella mencionó los nombres lo hizo en voz baja.
Todos (incluso tus amigas) volvieron a sus lugares, el profesor que tocaba entró al aula y como si fuera el destino, Kyojuro era quien tocaba. Dejó sus cosas en el escritorio, saludó y después fue al frente para explicar algo. La atención fue rápida por parte de ustedes.
—Como sabrán mañana será su convivio por el 14 de Febrero, por petición de la mayoría entraremos a las 8 de la mañana y vamos a salir a las 12.
—¡Profe! —alguien levantó la mano, el rubio le dio la palabra de inmediato. —¿Habrá registro civil?
—Claro —sonrió. —El consejo estudiantil decidió hacerlo ya que muchos lo pidieron, van a poder casarse cuando instalen la mesa, habrá un cartel que diga donde es. Les darán sus anillos y una hoja donde diga que se casaron.
Explico Kyojuro, todos se emocionaron.
Recordaste las palabras de tus amigas, mientras Rengoku se encontraba respondiéndole las dudas a tus compañeros, tú pensabas. ¿Pedirselo estaría correcto? La mayoría pensaría que es broma y se reiría, sería genial para que nadie se enterara de su relación pero incluso también te daría algo de pena hacerlo en frente de todo tu grupo. Sin embargo, es más que obvio que aceptaría. Levantaste tu mano lentamente, casi temblabas, el de ojos dorados cuando te vio te dio la palabra de inmediato.
—Casese conmigo profesor —le pediste con una sonrisa nerviosa.
—_______-chan, ~ ¿qué clase de propuesta es esa? —rió. —Ya veremos.
Todos hicieron un "ohhh" de burla en voz alta, después rieron. Para ellos ese "ya veremos" pudo significar no, pero para ti fue un completo y rotundo sí.
La clase siguió con normalidad, después de explicarles todo lo que habría el día de mañana continuó con las clases de su materia de manera normal.
• • •
Ibas más que nada obligada, tomaste tu mochilita con comida para que pudieras desayunar y te miraste al espejo. Llevabas puesta encima una sudadera que Kyojuro te había dado la última vez que fuiste a su casa, no encontraste la mejor ropa pese a haberte despertado un par de horas antes. Te colgaste la mochila en los hombros y después de despedirte de tu madre saliste de casa, para dirigirte camino a la escuela.
Cuando llegaste viste a tus amigas, querías pasar de ellas pero te vieron antes de que escaparas, las dos te tomaron de las manos impidiéndote huir.
—¿Si te vas a casar con Rengoku, ______-chan? ~ —preguntó la castaña mientras te daba unos leves codazos.
—Sólo si el profesor quiere —respondiste.
—Si no quiere podrías insistir —la otra te dijo mientras reía.
Reiste junto a ellas, a veces llegaban a ser molestas pero te sientes feliz estando junto a ellas. Llegaron a su salón, te sentaste en tu lugar y mientras ponías tu mochilita sobre tus piernas para sacar tu comida y desayunar, tus amigas se jalaron sus butacas para juntarlas con la tuya y así pudieran comer las tres. Ya era costumbre que te robaran comida así que preparabas algo extra para darles.
Pusiste dos platos frente a ellas y abriste tu tupper, les diste un tenedor a las dos para que pudieran agarrar de ahí lo que quisieran.
Una de tus amigas empezó a sonreír mientras le decía tonterías a la otra, te dejaron confundida. Ellas son hermanas y parecen tener algún tipo de telepatía rara.
Fue poco después que entendiste el porqué de sus acciones.
—Entonces ______-chan quizá podría pedirle a Hashibira-kun que se case con ella —la castaña le mencionó a su hermana.
—Nop, pienso que Kamado-san sería una mejor opción. Ha sido muy lindo con ella, quizá haya algo ahí.
Frunciste el ceño al escucharlas.
—¡No quiero a ninguno de los dos! —les dijiste quejandote. —Por algo se lo pregunté a Kyo... Rengoku.
Te sentiste avergonzada cuando de pronto, alguien te acaricia la cabeza. Tragaste saliva volteando a ver a esa persona; Kyojuro.
Como habías volteado tu butaca para que se unieran mejor, le estabas dando la espalda a la puerta. La razón por la cual tus amigas empezaron a decir esas tonterías era provocarte y que dijeras eso frente a Kyojuro, quien se dirigía hacia ustedes y después de procesarlo... Pudo haberte escuchado.
Te pusiste toda roja.
—Me siento feliz de que me tomes mucho en cuenta, ______-chan... —Dijo él con una risita.
Quitó su mano de tu cabeza.
—¡Siempre tan temprano chicas! Gracias por venir hoy —les dijo a todas con ese tono energético.
Cruzó los brazos y puso una sonrisa en su cara.
—¿Me permiten a _______ un segundo? —les preguntó a tus amigas quienes asintieron de inmediato.
Que no le agregara el "chan" a tu nombre significaba dos cosas; una, te dirá algo súper importante u otra, le preocupa algo. Es más probable que sea la primera pero sigue siendo raro.
En efecto, fue la primera.
Fueron al escritorio, no muy lejos de donde tus amigas, sólo que hablaron en murmuros.
—Te ves muy bien así, ______-chan —te dijo con una sonrisita en el rostro y un tono tranquilo. —¿Debería prestarte más de mi ropa? Me encanta como te ves así.
Reiste nerviosamente.
—¿Puedo ir hoy a tu casa? —preguntaste cambiando de tema.
—¡Claro! —aún seguía murmurando. —Después de las bodas hay luna de miel, ¿no es así?
Ahora el fue quien rió.
—Oh... ¿nos casaremos de verdad? —preguntaste emocionada.
—Claro que sí, por ahora es sólo un juego pero... Me aseguraré de que nos casemos en verdad —te respondió.
Volvió a revolver tu cabello, regresaste a tu lugar y Kyojuro salió de nuevo.
—¿Qué te dijo? —preguntaron las dos.
• • •
Estabas sentada, al lado tuyo se encontraba Kyojuro, como estaban afuera y había sol, los rayos del mismo le pegaban en la cara y el cuerpo; dando una vista hermosa de él. Las chicas frente a ustedes les dieron la hoja para firmar, se la pasaron primero a Rengoku, miraste con atención como lo hacía.
Ibas a atesorar esa hoja mucho más que tu vida. Su maldita letra es hermosa.
Había un montón de niñas y niños rodeándolos, en su mayoría tus compañeros y algunas de primer año las cuales también querían casarse con Kyojuro pero ninguna tuvo el valor para preguntar como tú, aparte él las hubiese rechazado debido a que tiene una relación contigo y ahora aunque de mentira serán esposos, serán esposos. Tus compañeros más que nada eran los que gritaban de emoción, comenzaban a molestar y tus amigas hasta habían llevado velo del cual no te diste cuenta pero que terminaron poniéndote cuando te sentaste en la silla.
Te lo quitaron antes de que te molestaras y alguien se burlara.
—Hagamos esto bien ya que es una buena pareja —dijo la chica del consejo estudiantil que se encontraba casándolos. —Kyojuro Rengoku, aceptas a _______ como tu espo-...
Ya no la dejaste continuar porque pediste que se callara, el mayor sólo rió mientras te pasaba la hoja para que la firmaras.
—Bueno, tengan los anillos —ella sacó les entregó dos anillos de mentira. —Ponganselos.
Kyojuro tomó tu mano izquierda y escuchaste como algunas chicas gritaron, puso con cuidado el anillo en tu dedo anular y lo ajustó para que te quedara bien. La chica del consejo que los casó se estaba derritiendo de amor, tu cara mientras tanto crecía y crecía de tono rojos por cada acción y comentarios de tus amigas y Rengoku. Ahora en tu turno, le pusiste el anillo a el mayor (realmente tu pareja).
—Ay... Hasta sabe donde ponerlo, usted es un hombre perfecto profesor —le dijo la chica bromeando.
—Claro, ¡tengo que practicar para cuando tenga una esposa!. ~
—¡Ahora puede besar a la novia, Profe Kyojuro! —Dijo la chica en tono de broma nuevamente.
Sin embargo, el rubio acercó su rostro al tuyo, este fue el movimiento que hizo gritar a todos. Tú como tonta también pensaste que iba a besarte en los labios, sin embargo te dio un beso en la frente y de pura suerte.
—Kyo... —le dijiste por ese apodo.
Él se separó de ti mientras revolvía tu cabello.
—Recuerda lo que te dije en la mañana —te mencionó cuando se levantó se la silla. —Con permiso.
Les dijo a tus compañeros y demás alumnos para poder salir. Agarraste el "acta de matrimonio", te levantaste de la silla y tus amigas te sujetaron de los hombros mientras te agitaban.
—¿Viste que hizo?, ¿Cómo se sintió?, ¿Fue bonito?
Estabas en un shock por sus palabras, lo dulce que fue y que se atreviera a hacerlo en la escuela delante de todos.
• • •
E
stabas dándote un baño en casa de Kyojuro mientras pensabas en lo de la mañana, ¿cómo diablos puede ser tan dulce? Y más lo que dijo sobre casarse de verdad. Suspiraste, cerraste la llave de agua y cuando saliste del baño envolviste la toalla al rededor de tu cuerpo tomando un tiempo para secarte, después con otra te secabas el cabello.
Te pusiste tus chanclas y con cuidado para no resbalarte saliste, fuiste a la habitación de Rengoku para poder cambiarte, ahí habías dejado tu ropa.
Cuando entraste y te fuiste a sentar a la cama aún secándote el cabello, Kyojuro apareció en frente tuyo besándote. Te tomó por sorpresa pero no dudaste en corresponder, sin embargo era difícil hacerlo sin soltar la toalla que tenías enredada en el cuerpo.
Tenías porque él te la quitó.
—Te ves muy linda —dijo cuando se separó del beso. —No tengas pena, _____-chan, amo todo de ti.
Te recostó sobre la cama y después tomó con cuidado tus senos entre sus manos, empezó a masajearlos tranquilo para que no hiciera un movimiento que pudiese lastimarte. Volvió a besarte así que no sólo la calidez del beso era lo que hizo que te exitaras, si no que también la forma en la que Kyojuro te tocaba jugaba un papel muy importante en ese momento.
Cuando dejó de besarte, su boca pasó por tu cuello dando leves y rápidos besos pero húmedos.
Hasta que llegó a tu pecho, metió uno de ellos a su boca; no pudiste evitar gemir. La mano que quedó libre debido a su acción (la otra aún seguía acariciandote) bajó hacía tu zona íntima; empezó a jugar con tu clitoris, frotándolo de arriba hacia abajo. Sus manos eran cálidas y estaba estimulándote de dos formas distintas, era imposible que no te mojaras, y lo hiciste rápido cuando empezó a jugar con tu clitoris.
Sacó tu pecho de su boca y volvió para besarte.
—Al... —dijiste entre el beso —parecer no era mentira... Lo de ah, la l-luna de miel.
Se separó de tus labios dejando un besito en tu frente.
—Esto no es nada aún, bebé.
No habías visto que no tenía su camisa, Kyojuro te sonrió ahora besando tu mejilla.
—Bueno —tus manos fueron hacia el cinturón en su pantalón —dejame a mí también que me divierta.
Le pediste con una sonrisa mientras le quitabas el cinturón y bajabas el cierre de su pantalón, se lo quitaste junto a su ropa interior, Rengoku se encargó de quitarse bien la ropa. Se acostó a tu lado, te pusiste encima de él atacando sus labios con un beso.
Los dos estaban tan tranquilos en ese momento que no se esperó que tu mano bajara hacia su miembro y empezaras a masturbarlo. Soltó un suspiro al sentir tu mano encima de su pene, la estabas moviendo con lentitud, casi como si quisieras torturarlo, gracias a esto le provocaste un sonrojo en la cara. Terminaste de besarlo y lo miraste a la cara.
—¿Q-qué haces ______-chan? —su voz sonaba entrecortada, estaba exitado.
Ya tenía una erección por lo que fue más fácil mover tus manos pero cuando la empezaste a mover más rápido (teniendo cuidado de no apretar tanto) sentiste como creció aún más en tus manos. Ibas a bajar tu rostro para hacerle una felación pero él te detuvo, tomando de las mejillas acercó tu cara a la suya besándote con ganas. Empezaba a sentir ansias de estar dentro tuyo, todo por culpa de que tu mano aún se encontraba masturbandolo y con ganas.
Si seguías de esa forma pronto iba a correrse, no quería decírtelo porque le harías la maldad y en lugar de utilizar una mano, lo harías con las dos. Prefirió quitar tu mano de su miembro y tomarla con la suya, entrelazando sus dedos mientras que con su otra mano acariciaba tu cabello, cortando el beso.
Su respiración estaba agitada, la tuya no tanto.
—¿Lo hice bien? —preguntaste con un para nada sutil tono "inocente" lleno de lujuria.
—Claro _______-chan... —Kyojuro se puso de rodillas, te jaló de las piernas tomandote por sorpresa.
Levantaste un poco tu cadera, esta fue la señal que le dio luz verde a lo que el rubio quería hacer. Aunque quería meterse e ir rápido (por culpa de la excitación que tú provocaste), cuando entró en ti fue totalmente lento. Estabas tan mojada que era fácil moverse sin embargo también le apretabas mucho. Rengoku se movía con cuidado, no quería correrse antes que tú.
—Kyo... Más rápido, por favor —le pediste tomando sus manos y abriendo más las piernas.
Él negó con una sonrisa en la cara, la mantuvo lo mejor que podía porque su cara se veía tan lasciva como la tuya.
—Te amo —le dijiste cerrando los ojos mientras arqueabas la espalda, aunque iba lento se movía jodidamente bien.
Esas palabras fueron su éxtasis, empezó a moverse más rápido. Soltó tus manos y te jaló hacia él para que lo abrazaras. Lo hiciste pero antes te separaste un poco para poder besarlo. Sus movimientos se volvieron rápidos y como quería desde que entró en ti, golpeaba con toda su fuerza que te hizo gemir mucho, quizás dolerá un poco después... Pero valió la pena.
Fue la justa estimulación para los dos, Kyojuro y tú llegaron al clímax a la vez, se corrió dentro tuyo.
Rengoku se recostó a tu lado, lo abrazaste y él también lo hizo.
—Acabo de salir de bañarme, Kyo... —Le dijiste mientras suspirabas. —Antes de que digas algo más, no te preocupes empecé a tomar pastillas desde que nos volvimos novios. ~
—Está bien —dijo él más tranquilo. Respiró hondo. —Podemos bañarnos juntos ahora. ~
Reíste.
—Te amo —Kyojuro pronunció y después besó tu frente. —Tengo algo que darte, me encantó que pidieras que nos casaramos porque ahora tengo una excusa para dártelo.
—Pero ya me lo diste... —murmuraste en voz baja. —¿Qué es?
Él rió, si te escuchó.
Se levantó de la cama y abrió un cajón que se encontraba al lado de esta, de ahí sacó una pequeña cajita. Tragaste saliva, la forma, el tamaño... A simple vista reconociste de que se trataba.
Te sentaste en la cama mientras te tapabas con las sábanas, Kyojuro se sentó a tu lado, abrió la caja y después sacó el objeto que se encontraba adentro; un anillo.
—¿Me harías el gran honor de volverte mi esposa, ______? —Rengoku te preguntó mientras tomaba tu mano y colocaba el anillo de verdad.
—¡Obvio que sí! —te lanzaste a abrazarlo. —Auch...
Como afirme hace un rato, era obvio que dolería después de como lo hizo el rubio. Te dio un beso en la frente.
—Perdón —se disculpó.
—No fue tu culpa, yo lo provoqué —reíste mientras lo veías a la cara.
Te separaste para poder observar mejor el anillo en tu mano.
—No sé que le diré a mi madre —comentaste seria para después volver a reír. —¡No puedo esperar a salir de la escuela! Podré presentarte formalmente con mamá y sentirme orgullosa de estar a tu lado. ~
—Yo también tengo que presentarte con Senjuro, sólo le he hablado de ti y quiere conocerte.
Acarició tu cabello mientras te abrazaba por los hombros, sonreiste.
—Te amo ______-chan.
HACE MUCHO QUE NO SALÍAN 3K DE PALABRAS Y ESTOY SÚPER FELIZ.
Regresando a lo de ayer de las bodas en mi escuela (eran de a mentis) no fue el profe de matemáticas si no le hubiese pedido que nos casaramos :( (no es la gran cosa vdd, pero amo su personalidad)
Tengo ganas de escribir sobre Sabito, tengo por ahí un buen pedido que voy a publicar pronto pero hasta que termine con el especial (atrasado) de San Valentín. O quizás lo publiqué dentro de estos días si se me antoja xD
Un lemon acá bien bacán con Sabito y Giyu (͡° ͜ʖ ͡°)
¿Qué tal les fue hoy? Yo siento el día un poco aburrido, quizás me ponga a escribir más al rato el que sigue xD