Niñ@s bell@ seria super lindo que escucharan esta canción mientras leen este capítulo aunque ya saben que siempre es opcional solo son como pequeños consejos.
Después del momento compartido con Stark, le pedí que me diera a llevar unos cuantos bocadillos para llevar a la casa de una amiga.
— Y esa amiga....¿me la presentarás ? — dijo mientras rellenaba la bolsa con algunos de ellos.
— Por supuesto que si — a pesar de lo que había pasado con Natasha, no volvería a ocurrir debido a dos motivos sencillos; ella amaba a Bruce y yo a Tony, o al menos comenzaba a saber que mis sentimientos iban creciendo drásticamente.
La puerta de la cafetería se abrió de un momento a otro, sabía quién era el hombre que entró, conocía su mirada y forma de caminar.
En estos momentos — recalcando que son poco atinados — aparecía aquel hombre que tenía una gran ventaja ante mi, Tony simplemente al percatarse de ello me dedicó una sonrisa que intentaba disculparse ante lo sucedido, cuando Stephen llegó hasta el mostrador le dio una sonrisa a Tony.
— ¿Sabe donde puedo encontrar al chico más atractivo e inteligente del mundo? — lo veía fijamente sin despegar por un segundo esa maldita sonrisa de su rostro.
Vi como Tony río y me vio a los ojos, parecía que quisiera decirme "Definitivamente tú" por lo que solté una pequeña risa y cogí la bolsa que llevaba los bocaditos.
— Gracias — mientras lo decía le daba una última mirada a aquellos ojos chocolate.
— A usted — correspondió mi despedida con una sonrisa.
Mientras me acercaba hasta la puerta volteé rápidamente y vi como Strange acariciaba el rostro de Tony con afecto mientras él sonreía forzadamente, suspire y me limite a salir del lugar e ignorar lo pasado.
Narrador Tony.
Mi mente estaba llena de pensamientos acerca de Steve, el hecho de que mi corazón y pensamientos se sintieran tan confundidos tras conocerlo era asombroso.
Pero lamentaba que tuviera que pasar por esta situación, pero era necesario, por que se lo mucho que mi madre y yo habíamos pasado debido a que papá perdió aquellos proyectos tan importantes.
Habían días en donde ni siquiera podíamos comer, tan solo me faltaba un poco más para quitarle aquellos papeles a ese bastardo y comenzar una nueva vida; en la que quería agregar a Steve.
Me encontraba sentado en las piernas de Stephen mientras nos besábamos; sus manos recorrían mi torso y las mías simplemente se limitaban a quedarse quietas en su nuca.
¿Acaso los besos de Steve se comparan con los de Strange? ¿O su toque? ¿La manera en la que sus cuerpos se juntaban y generaban esa fricción tan exquisita se comparaba?
No. Mil veces no.
Sentí como las manos de Stephen intentaban dirigirse a mi trasero para probablemente apretarlo; corte el beso rápidamente para fingir una risa nerviosa.
— No me siento listo aun...— dije mientras tomaba su mano desde la muñeca para pararlo — ...se que desde hace tiempo lo hemos intentado y siempre te doy la negativa pero..
— Lo entiendo bebe — apoyo su frente contra la mía —, solo recuerda que el día de la fiesta daremos aquel paso del que habíamos hablado, ¿verdad?
— Sí — lo abracé mientras suspiraba levemente —, claro que me acuerdo.
Tenía que evitar que eso sucediera a toda costa, Steve jamás lo perdonaría y cualquier toque a mi cuerpo sería preferible al lado de Él.
— Iré a acomodarme en el baño — depósito un beso en mis pómulos —, ¿podrías esperarme en la sala?
— Con mucho gusto mi rey.
Cuando se levanto y metió al baño; salí rápidamente de la habitación para dirigirme a la sala, obviamente me desviaría hasta la caja fuerte que estaba en la habitación que servía como estudio a Stephen.
Una de aquellas veces en las que él quedó ebrio, le comento que jamás podría abrir esa caja fuerte, contenía unos papeles importantes; era suficiente información como para que mi interés se despertará.
— J.A.R.V.I.S ¿me escuchas? — dije en voz baja mientas me ponía un audífono en mi oído izquierdo.
— Bienvenido Señor — la voz robótica de aquel I.A resonó en mis oídos — ¿Desea algo?
— Claro que sí cariño, ¿no es obvio? — coloque en medio de esa habitación una pequeña máquina creada por mí — Prende el prototipo S.T.O.C.K y asegúrate que examine la habitación.
— A sus órdenes señor.
Salió una luz expuesta en hilos de color azul se encargó de extenderse por toda la habitación; demoraría 2 minutos pero no preví que Stephen saliera tan rápido.
— ¿Tony? Cariño, ¿Donde estás? — escuche su voz en la sala y me alarmé.
— Mierda — recogí a mi querida S.T.O.CK del suelo para guardarlo en mi bolsillo — Amor desactiva el dispositivo y ponte en el modo 4.6 de suspensión.
— Como ordene señor.
Saque el audífono de mi oído y salí de la habitación despacio, lo vi de espaldas buscándome y lo abracé rápidamente.
— ¿Desesperado Doc? — susurre aquellas palabras cerca a su oreja mientras apoyaba mi mentón en su hombro.
— Cuando no estás conmigo definitivamente sí.
Volteo para poder tomar mi rostro con ambas manos y estampar un suave beso en mis labios.
Tal vez disfrute un poco más ese beso debido a que sabia que faltaban tan solo una hora para ver a Steve y podría respirar aquel aroma tan suyo.
*****
Narrador Steve.
Me encontré con Natasha y le extendí los bocadillos al entrar a su casa, se le veía decaída pero no tanto como antes.
— ¿Qué tal Steve? — se sentó en una de las sillas del comedor mientras abría la bolsa — ¿En que te puedo ayudar?
— Veras..le pedí a Fury que me diera información acerca de una persona, pero estoy seguro que no me dará absolutamente toda — me senté frente a ella para verla mientras se metía a la boca un pedazo de pastelito.
— Dios Steve, no puedo creer que volviste a hablar con el idiota de Fury, seguramente te pidió que volvieras a cambio de la información ¿o me equivoco? — me vio seriamente para luego rodar sus ojos y volver a dirigir su vista a el pastel — Eges gun Didiota.
Me limite a reír ante su comentario y su boca llena de aquel postre. Cuando termino en engullirlo puso a un lado la bolsa y retomo la conversación.
— Necesito que busques también indagues de esa información.
— Definitivamente no, ¿Sabes lo peligroso que es? — ella desvió la mirada —, además...no quiero enterarme de cosas desagradables otra vez.
Era cierto, Natasha se había enterado de que yo había quedado congelado en el hielo hace casi 60 años y que para que no comenzara sin ninguna amistad — debido a que todas habían muerto — le lavaron el cerebro para que pensara que era una amiga de mi infancia.
Cuando me entere no dude en decirle la verdad y comenzar una verdadera amistad con ella, cosa que agradeció ella infinitamente.
Pero no aceptaría a menos que le dijera de que se trataba realmente todo esto, decidí comentarle la historia que Tony me había contado, necesitaba respuestas de esto que parecía llegar a algo más profundo que un simple problema de familias.
— ¡Es hijo de Howard! — casi se atora con su propia saliva —, esto es realmente confuso; Howard nunca nombró a una familia y mucho a un hijo.
— Lo se... — no quería que Tony saliera lastimado de esta situación y al mismo tiempo quería ayudarlo a desenterrar la verdad —..por favor necesito que me ayudes.
Ella comenzó a masajear el puente de su nariz entre la yema de sus dedos para finalmente suspirar con pesar.
— Joder Steve, te ayudaré — me dio una sonrisa ladeada — encontrare la información de Eugene y Howard; no por nada soy La viuda negra.
— Te lo agradesco Natt — sonreí completamente complacido con su respuesta.
Vi el reloj y ya se acercaba la hora en la que había coordinado para ver a Tony.
— Discúlpame, necesito ir a un lado — le dije mientras me ponía de pie para despedirme.
— Supongo que iras con tu Sugar baby — se rio mientras veía mi expresión —, pero te apuesto que no sabes que significa eso, ¡si aprender a usar un teléfono te costó tanto no me imagino el aprender lo que es eso!
Fruncí el ceño, sabia que no era muy bueno con la tecnología pero daba un gran esfuerzo para aprender más acerca de ella; aunque sentía muchas veces que en mis tiempos todo era más sencillo.
Me despedí de Natasha para luego salir de su casa, ella se apoyó en el marco de la puerta y antes de que yo subiera al taxi que estaba estacionado frente a aquel lugar ella me llamó.
— Steve.
— ¿Si Natt? — dije asomando mi cabeza desde el automóvil,
— No confíes tanto en aquel niño — entrecerró los ojos para verme —, algo en el descuadra y estoy segura de que lo sabes.
No me gustaba que hablaran así de Stark, cerré la puerta de golpe ignorándola y pensando si realmente tenía que tomar en cuenta aquellas palabras.
HOLAAAAAAA, los extrañe.
Estuve realmente ocupada estos días y me demoré un poco publicando el capitulo pero espero que haya sido de su agrado.
Muchas gracias por apoyarme siguiéndome en mi perfil, me hace súper feliz aunque seamos una familia chiquitita; pero no saben que cada vez que veo un seguidor más o un voto o simplemente comentario me pongo así :
Gracias x2 por seguir leyendo este libro y no aburrirse :,v
Los quiero y nos vemos en muy poco tiempo!!