-Ya tengo todo listo,¿ sabes? Te voy a extrañar mucho- me dijo justo antes de dormir.
-A qué hora viajas mañana?- le pregunté medio adormilada.
-A las 3- me dijo en un suspiro- ya he puesto la alarma, vendrá por mí un chofer.
-Pero puedo llevarte, pediré permiso en el trabajo.- dije yo, pues aun no me enteraba y no entendía el porqué de la alarma.
-Me iré a las 3 de la madrugada, no puedo correr riesgos, es el mejor horario para viajar.- me dijo tranquilamente como si le explicara las cosas a una niña de 5 años.
-Pero qué???- me senté de un salto en la cama- Como que a las 3 de la madrugada, osea en 4 horas? Cuando pensabas decírmelo, cuando te despidieras? O pensabas desaparecer simplemente como un ladrón?- estaba realmente exaltada, ¿cómo no le pregunté antes? Era mi omisión o suya?
-Perdona, no quería que te pongas así, lo siento- y tomó mi mano besando mis nudillos, yo solo atiné a llorar, luego se acercó, tomó mi rostro entre sus manos y me beso tiernamente.
-Yo pensé que te irías por la noche, a lo mucho pensaba que nos quedaba una tarde mas, no ahora, es tan pronto….
-Tranquila, volveré pronto, sólo será una semana.- yo solo asentía como una niña, sorbiéndome los nada sexy mocos. Definitivamente no podría dormir, me dedicaría a acariciarlo, besarlo, y quien sabe, hacer el amor.-Te dejaré las llaves de mi auto…si bonita? Y no acepto un no por respuesta, ahora durmamos un poco.-pero qué?
-No puedes dejar las llaves en tu departamento?- le pregunté ingenua de lo que intentaba decirme.
-Quiero que te movilices en mi auto Laura.- me dijo a manera de orden.
-Porque? Yo tengo mi auto.- le dije de la forma más normal.
-No confío demasiado en tu auto.- me dijo muy serio.
-Pues yo sí, nunca me ha fallado, y además no quiero manejar tu auto, es muy lujoso, querrán robarme o secuestrarme, es mejor que se quede guardado.
-Tienes razón, pero es muy seguro, aunque quisieran asaltarte, no podrían romper las lunas del auto, es muy seguro.- ya no quería seguir discutiendo, así que simplemente asentí, total él se iría y yo podía usar o no su auto.
-Está bien- le dije.
-Es en serio- me advirtió- revisaré el kilometraje.-vaya que es intenso…
-Ahora si, a dormir.- volvió a decirme.
-No quiero dormir.- le dije haciendo un mohín.- te irás en unas horas.
-Y que quieres hacer?- me dijo con una mirada bastante coqueta y seductora
-No lo sé- le dije algo nerviosa mordiéndome el labio sin poder controlarlo, mientras acariciaba su barba.
Una vez dicho esto se abalanzó sobre mí…y lo demás es historia.
………………
Exactamente a las 2:50, llamaron por teléfono, era el chofer, lo estaba esperando fuera, yo sentía que moría por dentro, no esperaba que se fuera tan pronto, lo acompañé a la puerta, nos dimos un beso de película de esos que parecen eternos, y que el mundo se detiene ante ellos, y luego con lagrimas en los ojos nos separamos, fue la despedida más dolorosa que he tenido en mi vida.
Domingo por la noche
Era casi consciente de que el viaje tenía una duración aproximada de 12 horas, claro si es que hacía alguna escala, entonces lo más seguro es que si su vuelo salía a las 4 de la madrugada, lo más probable era que el haya llegado aproximadamente a las 4 de la tarde a Chicago, porque supongo que él va directo a Chicago, o tal vez va a otra ciudad y lo de su reunión es otro día, porque fui tan distraída, se supone que soy periodista y no le hice una sola pregunta de lo que iría a hacer por allá tantos días, sólo me limite a quedar hipnotizada en su mirada, en su sonrisa, ¡Maldición! Me pregunto porque aún no da señales de vida, es decir ya son las 10 de la noche, hace rato debió haber llegado.
¿Y si quizás le pasó algo? ¿Si tal vez le secuestraron?, por supuesto a mi no me avisarían, tal vez a su ex, yo no soy nadie, ¿pero yo como podría saberlo?
Hoy fue un día tan largo agotador, y no sé nada de él, lo extraño tanto que duele, no puedo respirar, me es casi imposible hacerlo.
Debo dormir, mañana tengo mucho trabajo y pensar en esto me está realmente angustiando.
Lunes 31 de marzo
Hoy fue el peor día de mi vida, apenas desperté revisé mi celular, no había si un solo mensaje de él, era como si hubiera desaparecido, como si algo no estuviera bien, solo que no sabía qué, salí a correr como pude, para despejarme, al menos eso intentaba, pero fue peor, porque sólo podía recordar todos estos días que hemos salido a correr juntos, nuestros desayunos, y se me hacía un nudo en la garganta de recordarlo, esto era increíble, no me había sentido así jamás por Cristian, porque ahora me sentía así, ¿cómo le había permitido, convertirse en mi centro?
Encima debo reescribir un informe sobre un político a manera de ensalzar todo lo bueno que ha hecho a lo largo de su carrera, y no es que sea una persona intachable, se de algunos entripados que se cuecen por sus malas mañas, pero como es accionista de este canal, definitivamente debo obviar todos sus secretillos, lo más triste de mi situación es que ya había terminado mi informe, solo lo estaba editando, pero por una burrada mía lo cerré y no guardé los avances, ahora debo ocupar mi tiempo libre reeditando todo el dichoso informe, debo agradecer al menos que me va a ayudar a no pensar en Thomas, porque me estoy volviendo loca, ha pasado un día más y no sé nada de él, y no es que no quiera llamarlo, de hecho me pican las manos por hacerlo o enviarle un texto, pero no puedo hacer eso, no quiero ser de ese tipo de novias psicóticas, al menos no quiero mostrarle eso a él, quizás se asuste, no tenemos mucho tiempo de novios, quizás si hubiéramos seguido siendo amigos lo hubiera hecho, pero siento que ahora es diferente.
Debo seguir con lo mío y esperar que él este bien, sólo eso.
Martes 01 de abril
Las cosas fueron igual, o quizás hasta peor, levantarme, correr, comer, trabajar, y llegar a casa, la única variación, es que me invitaron a salir, para celebrar el cumpleaños del jefe.
Estaba en el baño, en una increíble bipolarización, pues cuando comprobé en la mañana que no había llegado ningún texto, a pesar que como idiota apague y prendí el celular, aludiendo que tal vez no le estaba llegando bien la señal, harta de pensar lo mejor de él, decidí que el maldito se había olvidado de mi, que todo esto solo había sido un teatro y que tal vez para que no me sienta mal solo me había dejado su auto, sería eso posible, o quizás enviará a alguien para que se encargue de su auto, quizás un día salga y no lo encuentre y como estúpida pensaré que lo han robado, y el simplemente habrá desaparecido de mi vida, como si nunca hubiera estado en ella.
Luego me sentía mal porque pensar así de él, algún problema debía tener y presa de este horrible sentimiento ingresaba al baño cada dos horas aproximadamente, primero para llorar y lamentarme por mi mala suerte, porque él ya me había olvidado, y luego para decidir que era un maldito bastardo que había jugado conmigo, y es que ya no sabía que pensar, estaba allí en medio de mi bipolaridad, lloraba y luego me secaba las lágrimas con furia, dándome palmaditas porque simplemente lo olvidaría, porque fue bueno mientras duró y luego recuerdo lo bueno que fue, y las lágrimas vuelven a invadirme.
Sentí que alguien ingresaba al baño, e intenté detener mi absceso de hipos, pues no quería que me escuchen, me sobresalté cuando tocaron mi puerta, es decir acaso no había más baños libres? A qué clase de tonta se le ocurre llamar a un baño ocupado, cuando hay cuatro más libres.
-Laura? Estas bien?- preguntó una voz algo cautelosa, quise no responder, pero sería descortés de mi parte.
-Si estoy bien- dije en un hilillo de voz.
-Como que te estás tardando en salir…el supervisor me envió a preguntar.- me dijo a modo de excusa, la noble Cecilia.
-Tengo unos cólicos muy fuertes..Mmm tu me entiendes, dile que tengo cólicos menstruales, ya salgo.
-Quizás debas irte a casa. – me dijo en tono maternal.
-No…tengo mucho trabajo y con un par de pastillas se soluciona.- pero noté que ella no se iba.- Se te ofrece algo más?
-Ah sí!!! El jueves saldremos todos a celebrar el cumpleaños del jefe…iremos al Olimpyc y estás cordialemente invitada…claro si para entonces ya te encuentras mejor.- ¿como se le ocurría hacerme esa pregunta si se supone que estoy medio convaleciente?
-Si claro…yo te confirmo.- le dije aún con la voz dolida.
Cuando salí del baño, el supervisor me miraba como un águila, felizmente mi rostro demostraba que había llorado, claro que un cólico menstrual no es para tanto, pero él que podía saber de eso.
-Será mejor que te vayas a casa si te encuentras tan mal- se me acercó y me lo dijo a modo de susurro, definitivamente hablar de ello le avergonzaba, pero mi rostro hablaba por mí.
-Compraré una pastilla, si me das permiso para ir a la farmacia, y volveré a seguir trabajando.
-Haz lo que creas correcto- cogí mi bolso y pensé en ir a tomar un café, después de todo, tenía unos diez minutos antes de volver.
Luego de terminar con mi pesado trabajo, me fui a casa, a terminar con mi trabajo dañado, y aquí estoy aún esperando como una idiota su maldita llamada o mensaje.
Será mejor que continúe con mi trabajo….
PD.
Recibí un sms de Thomas es aproximadamente media noche, no sé si saltar de alegría o viajar a donde quiera que esté y reclamarle.
“Llegué bien, he tenido problemas, pronto me comunicaré contigo. Buenas noches bonita”
En serio???? Es decir, ¿era un telegrama?, acaso le cobran los mensajes por palabra? Me llené de rabia con aquel mensaje, presa de mis impulsos quise llamarlo y gritarle una serie de improperios, pero me controlé, pensé, como dice mi madre lo mejor es el desprecio, así que opté por apagar mi celular e ignorarlo.
Me inquietaba tremendamente no poder responder, en serio quería hacerlo pero no lo haría, lancé el celular muy lejos de mí, y en medio de mis luchas internas me quedé dormida.
Miércoles 02 de abril
Hoy le confirmé a Cecilia que iría con ellos a la reunión por el cumpleaños del jefe, necesitaba despejarme, era un hecho que yo ya no le importaba a Thomas, ese mensaje solo trataba de ser una panacea para que el dolor sea menos fuerte y yo no estaba dispuesta a asumirlo, de ninguna manera, mañana saldría a divertirme y a olvidarme de ese pendejo.
Conscientemente olvidé el celular en casa, quería evitar la tentación de prenderlo y llamarlo, había momentos en los que entraba al baño y lloraba arrepentida por no haber traído el celular, pero luego me daba palmaditas por mi valentía.
Lo único bueno del día de hoy es que entregué el maldito informe, me salió mejor de lo que pensé, tanto así que me felicitaron por mi esfuerzo y por resaltar las “virtudes” de aquel hombre.
Llegué a casa muy tarde, después de comprar algo de fruta para comer, me obligué a ir a la cocina en lugar de correr directo a coger mi celular, preparé mi cena, comí casi lentamente, la verdad es que me atraganté con la fruta, no quería verme como desesperada, lo sé nadie me veía y podía hacer lo que quisiese, pero yo si me veía y mi yo interna me veía de forma desaprobatoria.
Luego intenté prender mi celular, pero el muy bastardo estaba sin batería, no sé si alegrarme o llorar, estoy muy cansada, lo mejor será dormir, mañana me iré de rumba.
GRACIAS CHICAS POR LEER, GRACIAS POR SUS COMENTARIOS, GRACIAS A MIS NUEVAS SEGUIDORAS, ESPERO QUE SIGAN VOTANDO Y A VER SUS OPINIONES...QUE CREEN QUE PASÓ CON THOMAS?? YO AUN NO SE PORQUE NO SE COMUNICA...GRRR