(ÚLTIMOS CAPÍTULOS)
Sus labios habían tocado los míos. Un roce. Fue solo un pequeño roce. Uno que duró algunos segundos. Me quedé completamente inmóvil, mirándolo. Sus ojos estaban cerrados y sus mejillas levemente sonrojadas.
[[ ¿Tú eres amiga de Michelle, no?]]
Se separó de mi lentamente y me miró. Su mirada parecía buscar algo en la mía, alguna reacción, algún pensamiento, pero yo simplemente estaba anonadada. Simplemente lo miraba, sin decir nada, sin hacer nada. Me encontraba en una especie de trance.
[[Ni siquiera estamos juntos]]
Abrió la boca para decir algo, por la mirada que tenía y la expresión en su rostro supuse que se disculparía, pero no lo dejé. Lo tomé por el cuello de su camisa, haciendo puños mis manos y lo atraje hacia mi para besarlo.
[[Quizás pronto lo estén, así que por favor no le hagas daño]]
Choqué mi boca con la suya y cerré los ojos fuertemente. Comencé a mover mis labios sobre los de él.
[[No lo haré]]
Al principio se había quedado paralizado pero fue cuestión de segundos para que empezara a corresponderme el beso.
[[Oh, ya sabes, me enteré que ya eres novia de Jace]]
Mis manos dejaron su camisa para pasar a la parte trasera de su cuello y comenzar a jugar con su cabello mientras que las suyas estaban masajeando mi cintura y cadera.
[[Déjame decirte algo, cariño, no soy como ellos, soy peor]]
Sus labios eran suaves, carnosos y adictivos.
[[¿Te pongo nerviosa acaso?]]
Parecían encajar con los míos a la perfección. De alguna manera, se sentía...
[[Ya te estás enamorando de mí]].
Inusual...
[[¡Vete al infierno!]]
[[ ¿Y de dónde crees que vengo?]]
Diferente.
[[Sigues siendo insoportable.]]
[[Y tú sigues siendo una malcriada]].
Nick era diferente.
[[Somos novios, por fin.]]
Pero no era mío.
[[Eres cercana a ella, la conoces mejor que nadie]]
Era el novio de mi mejor amiga.
[[Por supuesto que estoy feliz, tengo a la mejor chica del mundo conmigo.]]
Y ese pensamiento bastó para separarme abruptamente de él.
– Isabelle. – Pronunció con la voz entrecortada. Tenía la respiración agitada, los labios algo hinchados y el cabello revuelto por tener mis manos en él. Era una imagen digna de un adonis. Yo no podía permitirme seguir viéndolo.
– Tengo que irme. – Anuncié–. Dile a Lissy que puede quedarse a dormir, yo hablaré con mamá. – Me levanté rápidamente y abrí la puerta para dirigirme al ascensor. Marqué repetidas veces el botón. Podía escuchar a Nick acercarse. Afortunadamente el ascensor llegó así que entré rápidamente.
– Belle. – Dijo con voz suplicante. Había llegado frente a mi, pero se encontraba afuera del elevador.
– Nick. – Su nombre salio de mis labios como si me estuviese despidiendo de él. Sabía que si seguía mirándolo tan solo me quedaría, y eso no podía pasar. Para mi buena suerte, las puertas del elevador se cerraron un segundo después.
Suspiré, pegándome a la pared, pasando las manos por mi cabello en señal de frustración. Así me sentía, frustrada, confundida, decepcionada de mi misma.
[[¿De qué quieres hablar, Michi?]]
[[Yo... quería pedirte disculpas]]
El elevador abrió sus puertas apenas llegó a planta baja, salí a paso apresurado y comencé a caminar. Ni siquiera sabía a donde ir. Sólo necesitaba pensar, despejar la mente. Pero no estaba funcionando. Me sentía culpable. Yo tenía un novio y me había besado con otro chico, que es el novio de mi mejor amiga.
[[¿Hablas de Jace? Haha, soy alguien mejor que él, cariño]]
Me sentía como una maldita perra.
[[Estuvieron juntos por más de un año hasta que te diste cuenta de que ella te estaba engañando. –Asintió–. ¿Y cómo lo descubriste?
–Yo siempre la acompañaba a su casa. –Empezó su relato–. Un día ella estaba actuando de una manera extraña, me pidió que no la acompañara porque tenía cosas que hacer... Siempre hacíamos todo juntos, por lo cual me hizo dudar mucho, así que decidí seguirla... Y, vi como se encontraba con otro chico y lo besaba, de la misma manera que a mi.
–Vaya. –Respondí simplemente, aún analizando todo–. Debió ser duro.]]
Le había hecho a Jace lo mismo que Charlotte.
Quizás sí lo era.
Había caminado y caminado sin tener pensado a donde ir. Ya estaba algo cansada, por lo que me detuve a mirar mi alrededor a ver en donde me encontraba. Estaba algo lejos de casa, pero el lugar se me hacía extrañamente familiar. Volteé a mi izquierda, había un camino que conducía a una especie de callejón.
[[–¿Aquí?–Asintió–. Pues, empecemos. –Dicho esto se quitó su morral de los hombros y sacó unos aerosoles de esos que se utilizan para estas cosas, un par de fotos y una lámina que era como un borrador de lo que haríamos, la cual tiró en el suelo.
–Ten. –Me lanzó una sudadera que no sé de donde sacó. Intenté atajarla–. Para que no te ensucies mucho la ropa.
–Gracias. – Sonreí sin enseñar los dientes y me puse la sudadera–. Me queda gigante.– Señalé mientras veía como me sobraba mangas. Lo arremangué. Nick rió.]]
Me introduje en el lugar, un bello y extraño paisaje junto las palabras: "Déjame hacerte feliz" se hizo presente frente a mis ojos
Admiré el mural. También me fijé en las fotos de Michelle con Nick.
[[Valió la pena]].
[[Así es]].
Una lágrima resbaló por mi mejilla izquierda.
[[–Le va a encantar, es algo realmente lindo lo que hiciste. –Sonreí, ya habíamos estacionado frente a mi casa pero no tenía ganas de irme.
–¿Tú dices? – Me miró.
–Sí. Tienes que avisarme cuando decidas llevarla para allá y pase todo... ya sabes. – Alcé mis cejas repetidas veces de manera graciosa, soltamos una risilla.
–Lo haré. – Asintió. Sonreí. Me acerqué lentamente y besé su mejilla, acto que lo sorprendió un poco.]]
También pensé en mi mejor amigo.
Hace algún tiempo, poco más de un año, habíamos tenido una fuerte discusión. La primera y única pelea que hemos tenido en tantos años de amistad que llevábamos. Recuerdo que fui a su casa, con intención de arreglar las cosas, pero terminó mal. Comenzó a gritarme, a expresarse de una no muy gentil manera y terminó golpeando la pared de su habitación repetidas veces. Me acuerdo de lo asustada que me encontraba, pero no de él, sino por él. Estaba haciéndose daño y no se detenía. No sabía que hacer para pararlo así que solo lo abracé, lloré, le dije que odiaba que hiciera eso porque solo se lastimaba. Recuerdo perfectamente lo que me dijo.
Estampé mi puño derecho en la pared con una fuerza que ni yo sabía que poseía. Grité de dolor. Había dolido como el infierno. Sacudí la mano en un fallido intento de aliviarlo. Suspiré y repetí la acción, con mi otra mano. Y así repetidas veces.
[[Es la primera vez que me gusta alguien de este modo, Isa. En serio espero que dure]].
Un golpe.
Tras otro.
Y otro.
Cada golpe que daba parecía doler más que el anterior, pero no me detuve.
[[Con él soy feliz]].
Me deslicé por la pared hasta el suelo, como las protagonistas desoladas en las novelas, sólo que yo me estaba ensuciando y empapando la ropa puesto que para mi mala suerte y también para darle más drama a mi sufrimiento... había empezado a llover. Lloraba desconsoladamente y las lágrimas volvían mi vista nublosa. Traicioné a mi novio. Traicioné a mi mejor amiga. Y lo peor del caso era que no me arrepentía del todo de ese beso. Creo que eso era lo que me hacía sentir como mierda. Mientras veía como mis nudillos sangraban las palabras de Josh aquel día inundaron mi mente.
No lo había entendido en ese momento.
"No es nada. El dolor físico no es nada comparado al dolor emocional. Por eso suelo hacer esto. Así me lastime, es como encuentro... desahogarme."
Pero ahora... le daba la razón.
No me había dado cuenta de que ya era de noche, mis ojos estaban empezando a cerrarse, sentía mis defensas bajas. No tenía fuerzas para levantarme así que sólo me quedé allí, en el sucio suelo de ese abandonado callejón.
– ¿Isabelle, eres tú? – Fue lo último que escuché antes de perder la conciencia
***
Cuando desperté me encontraba recostada en un sofá. ¿Donde demonios estaba?
– Al fin despiertas.– Se escuchó una voz femenina y volteé mi cabeza, mirando a Ross–. ¿Cómo te sientes?
Wow.
Me había olvidado de su existencia.
La detallé mejor. Había cortado su cabello, ahora le llegaba por los hombros, también su cara había cambiado en estos meses, se le veía más rellenita, pero seguía luciendo linda. Traía en sus manos un botiquín.
– Mejor... – Me estiré–. ¿Cómo llegué aquí?
Tomó mis manos entre las suyas, poniendo con un poco de algodón algo de alcohol. Me ardió demasiado.
– Te encontré inconsciente en un callejón en medio de la lluvia. – Colocó una crema sobre mis nudillos luego de eso y los masajeó un poco–. Creo que tendría que preguntarte lo que pasó.
Dirigí mi mirada hacia mis manos mientras ella las vendaba. ¿Debería contárselo? Ni siquiera Ángela sabía la historia completa, pero creo que necesito sacar todo esto, porque me estoy asfixiando.
Así que lo hice, le conté todo. Desde mi atracción hacia Nick, hasta mis dudas con Jace y el beso que había pasado hace poco, pero creo que debí haber sido más cuidadosa.
– ¿Tú besaste a Nick? – Se escuchó una voz, proveniente del pasillo. Volteé sorprendida y la vi, entrando a la sala.
– Nancy...– Murmuré.
Porque una persona que consideraba leal, estaba a punto de traicionarme.