SIEMPRE TUYA ©

By lauravaleno

7.8M 365K 25.1K

Engreído, prepotente y frío, pero sobre todo un empresario millonario sexy que arrasa con todo a su paso, eso... More

SINOPSIS.
Capítulo 1.
Capítulo 2.
Capítulo 3.
Capítulo 4.
Capítulo 5.
Capítulo 6.
Capítulo 7.
Capítulo 8.
Capítulo 9.
Capítulo 10.
Capítulo 11.
Capítulo 12.
Capítulo 13.
Capítulo 14.
Capítulo 15.
Capítulo 16.
Capítulo 17.
Capítulo 18.
Capítulo 19.
Capítulo 20.
Capítulo 21.
Capítulo 22.
Capítulo 23.
Capítulo 24.
Capítulo 25.
Capítulo 26.
Capítulo 27.
Capítulo 28.
Capítulo 29.
Capítulo 30.
Capítulo 31.
Capítulo 32.
Capítulo 33.
Capítulo 34
Capítulo 35.
Capítulo 36.
Capítulo 37.
Capítulo 38.
Capítulo 39.
Capítulo 40.
Capítulo 41.
Capítulo 42.
Capítulo 43.
Capítulo 45.
Capítulo 46.
Capítulo 47.
Capítulo 48.
Capítulo 49.
Capítulo 50.
Capítulo 51.
Capítulo 52.
Capítulo 53.
Capítulo 54.
Capítulo especial.
Capítulo especial ll parte.
¡Noticias!
¡SEGUNDA TEMPORADA!
Agradecimientos.

Capítulo 44.

118K 5.5K 366
By lauravaleno

Había llegado la hora, respire hondamente y me dispuse a cepillar mi cabello, estaba muy emocionada, ya era la hora de la gala, mi vestido era dorado ajustado a la cintura, era precioso, Anny había escogido mi vestido y el traje de Dereck.

Ya estaba lista, me aplique un rojo intenso y cepille mi cabello dejándolo suelto en ondas muy pronunciadas junto a un aplique dorado, respire hondamente y salí de la habitación, Jacob se encontraba en brazos de mi mamá, mis padres habían llegado hacía pocas horas y estaban enamorados de su nieto, Charles los trajo hasta la mansión, solo faltaban mis hermanos, pero como estaban casados les era un poco complicado viajar.

Lamentaban no haber podido estar en su nacimiento, pero era muy obvio que ellos estaban ocupados, mi hermano Chris llegaría mañana en la mañana con Samantha y Oliver, deposite un beso en la mejilla regordeta de Jacob y me despedí de mis padres, ellos se quedarían junto a Anny y Greg para así poder cuidar del bebe con Mía.

Dereck me informo que la limusina había llegado por nosotros, asentí y entramos, pude notar dos cajas sobre las sillas y mire confundida a Dereck.

—Es tu antifaz, no te lo vayas a poner aún —dijo él riendo mientras tomaba su caja.

Lo fulminé con la mirada y abrí la caja, en este había un precioso antifaz dorado con varias decoraciones del mismo tono, lo tome en mis manos y espere a que llegáramos al lugar para colocarlo en mi rostro, el camino fue muy cómodo y cuando llegamos procedí a ponérmelo.

Una vez lista, el chofer salió del auto y nos abrió la puerta, primero salió Dereck y después yo con ayuda de él, enganche mi brazo con el de él y las cámaras se enfocaron en nosotros, los flashes no tardaron en capturar nuestra entrada como a cada invitado, el sitio estaba lleno y prometía ser una noche genial.

Los invitados iban y venían con sus trajes elegantes, nos acomodamos en una mesa y nos sentamos, una chica se acercó a Dereck y comenzaron hablar, quede sola como un hongo y sin compañía, decidí acercarme a la barra a pedir una copa de champaña, me acerque a esta y pedí una por lo que la mesera me brindo una sonrisa.

La chica me la extendió y la bebí de golpe, llevaba muchos meses sin probar licor alguno, respire hondamente y volví a la mesa donde se encontraba Dereck, pero no estaba, se había ido el muy idiota, gruñí para mis adentros y observe a una figura muy peculiar para mí la cual no saldría desapercibida.

Era Alessa y vestía un lujoso vestido color gris con un antifaz del mismo tono, tras de ella venía Alexander tomados de la mano, quede helada al verlo después de tanto tiempo, sentí como mi cuerpo se tensaba y mi respiración comenzaba a fallar, voltee bruscamente para que él no pudiera verme, conté hasta diez y voltee de nuevo un poco más calmada, Alexander venía serio, ella solo sonreía y saludaba a algunos invitados a su paso.

La mirada de Alexander se encontró con la mía, sentí como un frío recorrió mi cuerpo y mantuve la compostura seria, no haría mi debilidad visible, sonreí falsamente y él me miro confundido, al parecer no sabía que era yo.

Me acomodé en la barra y una mesera iba con una charola de copas de champang, tome dos y las bebí de golpe, mis ojos no se quitaban de Alexander y la víbora esa, no estaban tomados de la mano o simplemente no se basaban, eso para mí era muy extraño, puesto que son esposos.

Me levanté de la silla y fui directo al baño, quite mi antifaz de mi rostro y me mire al espejo, me sentía otra vez confundida y desconcertada, acomode mi maquillaje un poco y volví a poner mi antifaz, tome mi bolso y volví a salir.

Quede paralizada al verlo allí, estaba afuera del baño y a mi mente volvió el recuerdo de la boda de Aliah, cuando él fue a buscarme, pero yo tenía una gran barriga, mi respiración se cortó por completo y quede helada, por suerte pude controlarme y recobre mi compostura.

Lo miré atenta sin emitir alguna reacción, pude notar que estaba con algunos kilos de más, pero eso no le quitaba, lo guapo al muy idiota, lo que paso me dejo atónita, solo pude ver como Alexander se acercó a mí tomándome del torso y acercándome a él con brusquedad, me agarro del cabello y deposito un beso en mis labios, al principio me rehusé lo que más pude, pero me fue imposible, sus malditos labios eran tan adictivos que me odiaba a mi misma por quererlo tanto y ser tan débil con él, me odiaba.

El beso pasó de ser romántico a ser un beso apasionado, sentí cada parte de mí encenderse con el tacto de aquel hombre sobre mi cintura baja, nuestros labios se buscaban con desespero, lo peor es que estaban hechos como dos mitades perfectas, nos separamos por falta de aire y lo mire sorprendida por lo que había hecho, se suponía que él estaba casado con Alessa.

Respire entre cortada mente y lo mire atenta, Alexander sabia muy bien que era yo a quien había besado, sus labios estaban hinchados y tenían mi labial impregnada en su boca, sonreí con un poco de victoria y me marche de allí dejándolo anonadado, llegue a la mesa y note que Alessa buscaba a Alexander con desespero, después de unos minutos Alexander solo salió del baño sonriendo y al ver a Alessa su sonrisa se esfumó, comenzaron a pelear y pude notar que ella le decía algo al oído, él solo la miro fastidiado.

Pov Alexander.

Al llegar a la gala, Alessa se puso insoportable diciendo que no podía dejarla sola, entramos y los invitados estaban muy elegantes, todos llevaban antifaz, era imposible reconocer a alguien, Alessa entro primero e intento cogerme la mano, pero la esquive hasta que lo logro tomarla, ella solo saludaba a algunos invitados que no conocía, en una mesa pude notar a una mujer con un vestido dorado bastante hermosa con unas curvas perfectas, recorrí su cuerpo y llegue a sus ojos, esos ojos no eran de cualquiera, eran los de Kaylee, al verla quede sorprendido, su gran vientre no estaba allí, tenía un gran cuerpo después de dar a luz, note que me miraba atenta, me sonrió raramente y la mire confundido, ella nunca me había sonreído así, las preguntas me invadieron, ¿por qué estaba ella aquí?, ¿acaso estaba con él?, ¿el idiota ese la acompañaba en la boda de Aliah y Paul?, la ira me carcomía, en sus labios llevaba un rojo carmesí tentador.

Note que pasaba una mesera y Kaylee tomo dos copas, las bebió de golpe y eso se me hizo raro en ella, ella no bebía o al menos hasta donde yo sabía, se levantó de la silla y salió del lugar, sin que se diera cuenta la seguí y vi que entro al baño, por suerte estos no tenían puerta y pude ver como se quitó su antifaz y se veía preciosa, más que antes, el vestido hacía que se viera como una gran diosa esculpida, después de maquillarse volvió a salir y noto mi presencia allí y quedo perpleja.

Quedo estática y solo me veía atenta, un impulso me gano, me acerque a ella y la tome por el cabello y la bese, aunque al principio se rehusó, después no pudo y siguió mi beso, esta mujer podía ser mi debilidad, toda la vida sin que ella lo supiera, ella era muy diferente a Allesa y a todas las mujeres con las que llegue a salir, no fueron muchas, pero si era diferente a todas ellas en todo sentido, Kaylee hacía que en mí se despertara no solo un deseo, sino amor, ganas de tenerla toda la vida junto a mí, pero ahora era muy tarde y quería llevarme un último recuerdo de ella.

Me había enamorado de ella, tanto que esa mujer enciende en mí, que ninguna otra logro hacer, ni siquiera Alessa, la tome por su espalda y comencé acariciar esta, recordando la noche en la que fue mía en cuerpo y alma, esa noche siempre estuvo en mi memoria.

El beso fue fuego, nos separamos por falta de aire y ella sonrió, sentí mis labios hinchados, se marchó dejándome únicamente con el recuerdo de sus besos, reaccione varios minutos después, toque mis labios y sonreí levemente, salí son una sonrisa en mi rostro, pero esta se desvaneció al ver a la loca de Alessa mirarme como si quisiera matarme, se acercó a mí y me hablo.

—¿Dónde demonios andabas metido?, ¿por qué tienes labial en tu rostro idiota?, ¿está la zorra de Kaylee aquí cierto? —cuestiono ella cabreada.

—Eso no es asunto tuyo, déjame en paz maldita loca —dije fastidiado.

—Vete al demonio maldito, imbécil, no me vas a ver la cara de estúpida —respondió ella cabreada.

Ella se aceró a mi oído y comenzó con sus malditas amenazas, realmente odiaba a Alessa, todo en ella ya me molestaba y quería divorciarme de ella de una maldita vez.

—Esta me las pagas idiota —dijo ella sonriendo.

—Haz lo que quieras, me da igual —respondí riendo falsamente.

Mire a Kaylee y ella estaba viendo todo, le sonreí y Alessa noto que miraba aquella mujer la cual me volvía loco, Alessa miro a Kaylee y quedo perpleja, lo que menos se esperaba ella era que mi exesposa estuviera aquí y menos viendo todo lo que estaba pasando.

—¿Qué hace esa maldita zorra aquí? —cuestiono ella mirando a Kaylee.

—A ella no la tratas así, ella es mucha más mujer que tú en toda una vida —respondí enojado mientras la tome de la muñeca.

—¿Ahora la defiendes? —cuestiono ella riendo sarcásticamente.

—Sí, la defiendo porque por culpa tuya la lastime y la perdí, entiende que ya no siento nada por ti y a quien quiero de verdad es a Kaylee, tarde mucho tiempo en darme cuenta de lo que sentía por ella y de lo idiota que fui al dejarla por ti —respondí cabreado mientras la fulminaba con la mirada.

—Me das asco —dijo ella con un ataque de rabia.

—No más del que tú me das a mí, eres una loca interesada que solo quería el dinero de mi familia, pero claro, como no pude cobrar mi herencia —espete lleno de ira, Alessa era una completa interesada.

Esa loca me iba a matar pronto de un ataque de ira, deje que se marchara y luego me acerque al bar, pedí dos copas, mi intención era sentarme junto a Kaylee para poder hablar con ella, pero cuando di vuelta ella ya no estaba allí, se había marchado y me sentía vació.

Tome mi copa y bebí de ella, el lugar estaba realmente lleno, no me interesaba conocer o ver a otra mujer que no fuera Kay, tenía que recuperarla a como diera lugar así se me fuera la vida en ello, sería un poco difícil que ella crea en mi arrepentimiento y en lo que siento por ella, por todo lo que la hice sufrir y sobre todo lo que le hice a mis papás, estaba cegado pensando que estaba enamorado y era solo un capricho que me ha salido bastante caro al punto de perder a toda mi familia y la mujer que quiero.

Deje la copa sobre la mesa y decidí irme a casa, ya no había sentido de seguir en la fiesta, si ya Kaylee se había ido, Alessa podía irse como quisiera, total no me importaba si no llegaba a la casa, sería perfecto que se fuera y no volviera nunca más, pero con lo loca que es, eso era casi imposible, ya que ella tenía lujos en la mansión, pues aunque no había recibido dinero de mi familia tenía algunos ahorros para poder sostenerme, siempre tuve ese ejemplo de mi papá.

Siempre fue un hombre que me enseño a ganarme lo mío, a trabajar por lo que quería y sobre todo a luchar por mis sueños, extrañaba mucho a mis padres y a mi familia.

Continue Reading

You'll Also Like

47.4M 2.2M 116
Señorita Isabella Mariet Moore acepta como esposo al señor James Alexander Harrison- me quedo en silencio es un debate en mi mente en este mismo inst...
7.8M 365K 60
Engreído, prepotente y frío, pero sobre todo un empresario millonario sexy que arrasa con todo a su paso, eso define perfectamente a Alexander Harris...
302K 31.9K 55
Darío está decidido a conseguir justicia para su novio Joel, sin imaginar que, en su lucha, encontrará un aliado en el novio de su hermana, y tal vez...
11.3M 535K 51
Andrew Evans, dueño de Evans Enterprises. Andrew es extremadamente guapo y sexi. lamentablemente su caracter no es lo mejor de él, pues es soberbio...