-La verdad es que aún sigo sin entender qué he tenido que hacer en otra vida para tenerte, porque eres demasiado para mí. No puedo darte mucho : solo puedo prometerte que esto será verdadero; que no habrán mentiras ni engaños; que seremos fieles y, los "te quiero" serán sinceros. Prometo que nunca te haré perder esa sonrisa; que siempre serás feliz a mi lado. Créeme, no vas a tener un infinito lleno de lágrimas y desengaños, si lloras, será de alegría. Prometo hacer lo posible y lo imposible para hacerte enamorarte de mí cada día, para que no pierdas esa mirada llena de luz que tanto me encanta. Quiero ser la razón de tus sonrisas. Y, te advierto, puedo llegar a ser insoportable. Tengo miles de defectos y, sabes lo inseguro y celoso que soy. Pero, a pesar de todo, te quiero. Y ese es el motivo de levantarme con una sonrisa. Tú eres mi motivo, mi propósito.
-Draco... -murmuro mientras las lágrimas recorren mis mejillas. -¿Sabes? Hay días en los que me siento perdida, pero, entonces te miro y nada más importa. Quiero celebrar los buenos momentos a tu lado y poder levantarme contigo en los malos. Quiero ser el sabor de tus besos, y el tacto de tus manos. Quiero que me hagas temblar cada vez que me miras; déjame ser tus mañanas y tus noches de desvelo porque, juro que no hay mejor sensación en el mundo que dormir abrazada a ti. Permítame que te diga que soy yo la que está enamorada de ti porque, es así, sin más. Enamorada de tu risa, de esa voz que eriza mi piel cada vez que pronuncia un "te quiero". Enamorada de hasta tu última imperfección. Te pido en cada deseo, en cada sueño y en cada beso. Quiero ser la letra de tu canción favorita. Esa que no te cansarías nunca de escuchar, la que te sabes de memoria y aún así te emocionas cada vez que la escuchas. No olvides que quiero ser tu secreto más bien guardado, tu suerte y tu locura. Quiero ser tuya y que tú seas mío.
Tras nosotros, se escuchan los aplausos de los invitados.
A través de mis ojos que ven borroso por las lágrimas, puedo ver que Draco está sonriendo como nunca.
-Entonces, os declaro marido y mujer. Puede besar a la novia.
Draco agarra con suavidad mi rostro entre sus manos y sus labios se pegan a los míos en un lento y precioso beso.
Las personas, tras nosotros, aplauden aún más fuerte.
Cuando la ceremonia termina me reúno con mi hermano, el cual me está esperando con los brazos abiertos.
-Estoy tan orgulloso de lo que te has convertido, pequeña. -murmura y besa mi mejilla.
-Ann. -oigo como me llama Narcissa a mis espaldas.
Me giro y le entrego una pequeña sonrisa.
-Bienvenida a la familia. -dice.
Sonrió aún más y le abrazo con todas mis fuerzas.
Lucius Malfoy fue metido en Azkaban, acusado por ser mortífago y fue condenado al beso del dementor.
Abrazo a todas las personas que han venido: Hermione, Harry, Ron, George, Sirius...
Sonrío mientras aparto una lágrima de mi mejilla. No puedo ser más feliz, tengo a todos los que quiero conmigo. Pienso en Remus y Fred y sonrío, sabiendo que aunque no estén conmigo, están orgullosos de mí, viéndome desde el cielo.
Draco se coloca a mi lado y coloca sus manos en mi cintura.
-Ahora eres completamente mía, señora Malfoy. -murmura sobre mis labios.
-Y usted completamente mío. -sonrío.
Enrollo mis brazos alrededor de su cuello y le beso sabiendo que, con este beso, hemos sellado nuestro pequeño infinito.
❤️Recuerda: siempre te querré. Adiós. ❤️