—Un bebe—repito dejando a un lado el helado, lleve mis manos a su pancita— ¿Qué has hecho, Allie? —pregunto entre risas nerviosas.
—Tiene tres meses.
La miro.
— ¿Antes de la graduación? —ella asiente volviendo a llorar.
—No lo sabía, me había estado sintiendo mal pero no quise darle vueltas.
— ¿Y por qué no me dijiste? —me enfurecí—Se supone que somos amigas, te considero mi hermana, Allie, ¿Por qué no solo me dijiste? ¿A caso no confías en mí? —pregunto entre lagrimas y tembladera.
—No quería que pensaras nada malo de mi, tenía miedo, de perderte...—hizo un silencio para tragar—Estabas feliz por todo lo que te estaba pasando, no quería que cancelaras el viaje por mí.
— ¿Qué pensara algo malo de ti? —analizo sus palabras—¿Por qué piensas eso? ¿Acaso no me conoces?—me levante de la cama para respirar profundamente.
—Lo siento, Hal—volvió a susurrar—Tenia... tengo mucho miedo.
— ¿Sebas lo sabe?
—Si...
— ¿Se va a ser responsable?
—Mi madre lo ha echado—ella se acomodó llevando sus manos a su pancita—Se emocionó, quería hacerse cargo pero cuando se lo dijimos a mi madre, ella solo lo echo.
Me quede en silencio y volví a sentarme.
—No te odio, Allie—susurro—Tampoco voy a alejarte de mi vida por esto y mucho menos estoy decepcionada, no por el bebe, sino por no confiar lo suficientemente en mi.
— ¿Me perdonas? —preguntó volviendo a llorar, me quite los zapatos y me monte completamente en su cama para abrazarla.
—No puedes pasar esto sola, Al—dije entre lagrimas—Siempre te voy a apoyar, aunque estemos haciendo mal, no te voy a dejar sola.
—Perdón por mis inseguridades, prometo no volverlo hacer, fui una idiota, soy una idiota por no ser tan cuidadosa...
—Calla, ya lo hecho, hecho esta—dije separándome de ella— ¿Lo vas a tener, verdad?
Ella me miró y sonrió limpiando sus lágrimas.
—Claro—ella hizo un breve silencio—Cuando me entere que estaba embarazada, lo pensé, pensé en abortarlo...
— ¿Estás loca?
—Este bebe no tiene la culpa de nada—susurró sobándose la barriga—Me hare cargo, voy a dar lo mejor de mí para que nada le falte.
— ¿Nani no dijo que abortaras? —ella abrió los ojos de par en par.
—Lo primero que dijo cuando se lo dije fue que no abortara.
—Me parece bien—me acosté a su lado—Traje helado aunque ya debe ser sopa.
—Gracias—me tomó de la mano y la besó—Por ser mi amiga y mi hermana, por apoyarme.
—Solo te digo, si vuelves a ocultarme algo así de mayor enjundia o si vuelves a dudar de mi amistad te juro que te asesino—ella me miró fijamente—Y tienes que ver a Sebas.
—No he sabido de él—susurro frunciendo el ceño—Quisiera verlo.
— ¿Nani no te deja salir?
—Tampoco lo he intentado.
—Cuando me vaya le preguntare si mañana podemos salir, ir a nuestra casa, hoy vamos a arreglar algunas cosas, quizá para que nos acompañes a decorar la casa o algo—digo acurrucándome a su lado, me sentía un poco culpable por no haber insistido en llamarla.
—Gracias, Hal.
—Calla, vamos a comer sopa de helado.
Luego de dos horas hablando, Estefan esperaba afuera, baje las escaleras y me reuní con Nani.
—Me voy—dije abrazándola.
— ¿Cómo esta ella? ¿Te contó todo?
—Está bien, solo necesitaba hablar, necesitaba mi apoyo—respondo—Y si me contó todo.
—Cuando lo supe no sé cómo podía reaccionar, quería matarla—admitió a la vez que sus ojos se humedecían—Pero ya pasó, ya no había vuelta atrás y no iba a permitir ninguna locura.
—Y me alegra que lo haya aceptado—intento decir suavemente—Sabe que recibirá mi apoyo y ayuda siempre, ustedes son parte de mi familia, Nani.
—Muchas gracias, cariño—ella me abrazó.
—También le quería pedir un favor—dije abriendo la puerta de la casa, ella saludó a Estefan que estaba en el auto.
—Dime.
—Sabe que Estefan y yo tenemos nuestra casa y estamos decorándola, me gustaría invitar a Allie, mañana quizá vamos a comprar algunas cosas y no estaría mal que tomase un poco de aire, que despegue un poco sus pensamientos.
Ella me miró fijamente, quizá tratando de encontrar la mentira que ocultaba, bueno, una parte de ella.
—Prométeme que no se va a reunir con Sebas, no quiero ver a ese muchacho cerca de Allie—me mordí la lengua y cruce mis dedos.
—No se preocupe por eso—respondí sonriendo, dándole un abrazo y casi corriendo hacia al auto, no quería que me hiciera prometerle otra cosa, entre al auto y le pedí a Estefan que acelerara, no hablamos en todo el camino hasta llegar a casa.
¡BUENAS, BUENAS!
ESPERO COMO SIEMPRE QUE SE ENCUENTREN DE MARAVILLAS, QUIERO DESEARLES HOY UN FELIZ DIA A SUS MADRES (AQUI EN VNZLA ES MAÑANA) Y QUE SIN ELLAS USTEDES NO ESTUVIESEN LEYENDO ESTO.
TAMBIÉN QUIERO AGRADECERLES POR ESTAR AQUÍ Y POR APOYARME EN ESTO, ME HACEN FELIZ Y YA DEBERIAN DE SABERLO.
¡102 BESOS, ABRAZOS, CARIÑOS, AMOR, TODO, TODO LO QUE DESEEN!
NO OLVIDEN QUE EN MI PERFIL ESTAN MIS REDES SOCIALES DONDE PUEDEN ESCRIBIRME O STALKEARME O CUALQUIER COSA!
Y RECUERDA QUE TODO LO PUEDEN HACER, QUE NADA ES IMPOSIBLE EN ESTA VIDA, SOLO CREEN EN ELLO Y SOBRE TODO, CREE EN TI.
LOS ADOROOOOO MIIIIIIIIIIIIIIIIL.
BYE, BYE.