VOLVERIA A TI.

Capitulo 94

Estacione en la casa de Allie y toque la puerta, ella abrió.

—Oh Hal—dijo abrazándome— ¿Estás bien?

Al decir eso comencé a llorar en la entrada de su casa, manchando con mis lágrimas su camisa.

—Ven pasa—pasamos y fuimos a su sofá que estaba lleno de ropita de bebe—Sebas me dijo anoche lo de Estefan.

— ¿Lo sabía? —pregunte limpiando mis lagrimas.

—No, Estefan lo llamó anoche, no pude escuchar lo que le dijo porque se había ido de la habitación.

—Solo quiero llorar y quedarme en cama todo el día—admití—Pero se supone que no lo voy a hacer, porque esto se decidió juntos, al menos después que comprara el boleto.

—No terminaron, simplemente se están dando un poco de espacio ¿No sabes cuándo va a volver?

—Me dijo que en un mes.

—Que llegue antes del nacimiento de esta belleza—dijo tocando su pancita.

—Faltan cuatro meses para eso—el miedo recorrió mis venas, mi corazón.

—Solo digo, no va a pasar. Al menos no quedara vivo para contarlo.

—Dejemos de hablar de esto—dije—Hablemos de nosotras, de Sebas, ayúdame a despejar mi mente.

—Podemos ver una película, quería ver una sobre un chico que viaja por el tiempo... se ve bien.

—Vamos, necesito mantener mi cabeza distraída por el mayor tiempo posible.

Allie dejó de doblar la ropita del bebe y nos fuimos a su habitación, puso la peli y nos acostamos en su cama, trate de concentrarme y despejar la mente, antes de que la peli se acabase, Allie ya se había quedado dormida, me quede viéndola por unos segundos y me levante, cogí un boli y papel y le deje una nota que volvería mas tarde.

Baje las escaleras y salí de la casa, me subí al auto y fui hacia la casa de mi madre, estacione el auto y entre a casa encontrándomela en la cocina.

— ¡Hija, que sorpresa! —dijo ella echando aliños a una olla.

—Hola, mami.

Me senté en el desayunador a verla cocinar hasta que me doy cuenta que está tomando vino, me vuelvo a levantar, cojo una copa y me sirvo.

— ¿Todo bien, hija?

—Estefan se regresó a Canada—mi madre dio media vuelta, miró la copa entre mi boca.

— ¿Haziele lo llamó para que volviese?

—Nop—mi madre se me quedo viendo un par de minutos.

— ¿Y qué pasó?

—Pasó que lo estábamos arruinando todo que llegó a un punto en el que no pudimos mas y decidimos poner tierra de por medio—dije tomándome la segunda copa.

— ¿Lo decidieron los dos? —mire a mi madre.

—Él compro el boleto primero, luego me dijo­—mi madre iba a hablar pero no la deje—Antes de que lo comprara habíamos discutido y le dije un par de cosas hirientes. Fue a casa me contó lo que planeaba y yo estuve de acuerdo.

— ¿No han terminado?

—No—me bebí otra copa de un solo golpe, mi madre me quitó la copa.

—Esto no lo traerá de vuelta.

—Estoy enojada—admití tomando de la botella—Necesito pasar mi enojo, no me embriagare.

—No lo harás, no te voy a dejar—dijo—Tomate lo que queda de esa botella, que no es nada, tomas un baño y comemos, no me pongas esa cara, mira que eres rara y se te baja las defensas cuando estas deprimida.

—No es cierto.

—Hal...

—Sí, es cierto—dije sonriéndole a mi madre, ella volvió a la cocina y yo la veía cocinar mientras que me hablaba de su semana.

Bote la botella, subí a mi habitación, cogí mi pijama y entre a la ducha, me di un baño súper rápido, me peine y baje de nuevo, la comida esperaba por mí. 

Hello, friends 

Espero que estén super bieeeeen.

Que les haya gustado el cap de hoy. 

Nos vemos el fin de semana. 

Los adoooro.