Me laventé. 6:14 A.M Conchetumare, vida culiá. Ahora no iba a poder dormir ni cagando hueón. Wena esa.
Mi mamá me había pasado el celular ayer, así que, juju. Lo abrí y como le había dado mi número a la María y a los cabros, ellos me habían agregado al grupo de curso.
Grupo curso: 2 mensajes nuevos.
MaríaJ: AY JEANS DAY!!! CABROS A 200 SOLO POLERA Y 350 CON TODO!
Amanda (teñida): Te podí callar? Ya sabemos, nos pasaron la comunicación, aweoná.
Yo: Kajskajks, gracias María qla, perdí el papel.
Igual me caía mal la Amada, no me había devuelto los $100 pesos pero buéh, además era la enemiga de casi todo el curso, y pa' qué decir lo pelá que era po'.
Empecé a ver historias de instagram de los cabros y me di cuenta de que el Bruno y la Jose estaban pololeando. Laz kozaz de lo k uno centera.
Entre tanto weiar, me dieron las 7 y me fuí a bañar po', llevé mis cosas y todo, y después bajé a hacerme desayuno. Mi amá como era una floja culiá aún no se levantaba, así que decidí irme solo en cromi y llegar temprano pa' wear.
La micro, como siempre, asco total, parado como siempre y las viejas culiás cahuiniando sentás.
-¡Weeena culiao! -me tocaron el hombro.
Era la Amanda, se llamaba así la teñía culiá. Estaba sin la corbata puesta, la tenía en la mano.
-Hola po' ¿te sirve esta weá? -pregunté no sabía que vivía por donde vivo yo.
-Sí po' vivo cerca del Mall -se rió y nos sentamos en los puestos de atrás.
-Ah yo igual, en el condominio, ¿y vo'?
-Un pasaje más allá de los condominios, cerquita ah -me empujó.
Toda el viaje nos fuimos hablando de la life. Me contó que vivía con su papá y su mellizo, que la mamá se había ido cuando ellos eran chicos y la weá. Le conté mi historia, la de mis papás separados y que mi papá se fue a vivir a Argentina con su tonwa culiá de polola que tiene como 20 años menor. Y que vivía con mi mamita. También hablamos de que ella había repetido, por lo tanto era 1 año mayor que yo, y yo le conté de por qué me habían echado y todo eso. Además como había taco, llegamos a la hora del pico, 2 minutos antes de que tocaran la campana culiá.
Los cabros apenas me vieron entrar se fueron donde meh.
-Ah oye -la Amanda de pasó su corbata -, me la pones? Uff, too el rato, ¿ah qué?
Tomé la weá y se puse, los cabros me miraban con el hocico abierto.
-¡Gracias! -me abrazó -, Un gusto hablar con vo' ojalá sigamos viniéndonos juntos -se rió y se fue.
-¿Qué fue esa weá? -se cagó de la risa la Jose.
-Nada, nos encontramos en la micro y me metió conversa, eso es todo -me defendí -, ahora, entremos a la sala.
Entramos y atrás llegó la vieja culiá de historia, odiaba esa weá.
-Bueno, ¿usted es nuevo? -me miró raro.
No, me escondí todos estos años en el baño, aweoná culiá. Pensé.
-Sí, se cambió la semana pasá, cuando usted tenía licencia -respondió el Bruno.
-¿Le pregunté a usted, Echevarría? -lo miró feo -, ¿cómo te llamas? -me sonrió.
-Eh, Fabián Wallace, buenos días -buenos días, el culiao, me siento hueón.
-¿Walas? Se escribe con doble ele, ¿se diría Guayase? -se puso los lentes y vió mi hoja en el libro.
Oh que es aweoná, Dios la haga nacer de nuevo.
-No -me reí falsamente -, es como decir walas.
-Ahh, entiendo -no se nota -, espero que se comporte en este colegio, no podrá tener las hojas que tenía en el otro -levantó una ceja, oh maraca tará y la conchetumare.
Después de 1 hora, que pasaron como 1 siglo conchetumare. Tocaron a recreo.
La Jose y el Bruno fueron a comprar al negocio y yo con la Mari bajamos al patio a ver como jugaban Voleii. Ahh.
-Maracas culiás, mírales el cuerpo, están todas ricas, menos yo -apoyó la cabeza en mi hombro.
Si supieraí lo que haría, ah.
-No weona, erí entera rica, no digaí esa weá, míralas a ellas, después van a quedar como con músculos y esa weá es horrible -la tomé la cara.
-Uy, llevaí menos de dos semanas y te andaí pelando con nuestra Mari -se rió la Jose.
-La Mari es engañosa cuidado, que nunca más ma he visto pololear desde...primero medio.
La Jose le pisó el pié.
-¿Por qué? -pregunté de copuchento, demás que esta weona tiene pololo.
-Me engañó con la Amanda, terminaron el semestre pasado -suspiró -, ya pero no importa, superé esa weá -se le pusieron los ojos rojos. Uff, qué superá.
La abracé y la weona me abrazó más fuerte.
-Puta igual me da pena hueón, yo estaba ene enamorá de él, y el culiao me dejó por un pedazo de zorra po' más encima, zorra usá -me llenó la polera de mocos, mmh.
-Ya, déjala hueón, era la mina -le rasqué la cabeza.
-Ya oh, deja de pensar en ese culiao, es pura mierda -el Bruno la abrazó.
-¡No! -la Josefa se enojó y agarró de la mano para levantarla -, mira conchetumare, mírame -la obligó y ella le hizo caso -, vai a dejar de pensar en ese saco wea porque YO te lo digo, ¿Me escuchaste? -la zamarreó.
-S-sí -se limpió las lágrimas.
-Hola washos -se acercó un culiao que jugaba fútbol -, los invito a mi cumpleaños po' se va hacer el sendo carrete, espero que vayan -nos pasó las weás -, en especial tú, Josefa -se fue.
-¿Qué, chucha, fue, eso? -me reí.
-Un saco e' wea que me quiere jotear a mi washa, es mía y de nadie más -la besó.
-Uy, se ponen más weones que yo -se rió la María.
**
-Hijo, me voy a ir unos días a Viña del mar...por el trabajo -Khá
-¿La dura? -la miré entrecerrando los ojos. Cuándo ha viajao la mentirosa culiá -, bueno po' yo mañana voy a llegar tarde igual, ¿Cuándo te vaí? -dije aún no convencido, pero qué le vamos hacer po'.
-Yo me voy mañana en la mañana, te dejo las llaves -puso las cosas para comer.
Ojalá sea por una weá de trabajo...