Annabeth PoV:
Hoy es un nuevo día, de nuevo a la escuela, y sabré que pasó ayer con Jason en su "cita", y por que aún no me llama para contarlo, además quería saber algo nuevo sobre Percy.
Me preparé para la escuela, tomé desayuno y cuando estuve lista, me dirigí a la casa de enfrente.
Cuando llegué, me abrió la puerta Edward, el mayordomo de los Grace.
-Buenos días Ed, ¿que tal todo?-
-Muy bien Annie.- Creo que es el único a quien dejó que me llame Annie, pero es muy buen tipo. -Jason esta en su cuarto. ¿Quiere que le avise que llegó?-
-Si por favor, lo esperaré en la sala, y antes de que preguntes, no no quiero nada, gracias.-
Él se rió. -Que bien me conoce.-
-Por supuesto, además es tu trabajo, lamentablemente.- Yo también reí.
-¡Hola Annie, ya bajé, ven a la cocina!- Gritó Jason desde quien sabe dónde. Pensé que tardaría más. No creo haber estado más de 5 minutos sentada.
-Hola, y primero: sabes perfectamente que no me gusta que me digan Annie si no es Ed, segundo: no es de buena educación gritar a las personas, mucho menos si son visitas, y tercero: ¿porque no me dijiste como te fue ayer?- Lo miré de forma acusadora.
-Perdón por las tres, pero primero: adoro decirte Annie y que te enfades por eso.-Frunci el ceño.- A eso me refería, segundo: estoy en mi casa y hago lo que quiero, tercero: no te dije nada porque sabía que no te iba a gustar y cuarto: ¿quieres algo de comer?-
-No gracias ya comí. ¿A qué te refieres con que no me va a gustar lo que tengas que contarme?-
-QuecreoquebeseaDrew.- Dijo muy rápido, tanto que no logré entender.
-¿Qué? Dilo despacio.-
-Que creo que besé a Drew, y ahora somos novios, creo- Esta vez más normal.
-¿Qué tú qué?- Por favor que esto no sea verdad...
-Te dije que no te agradaría.-
-Y con justa razón, ¿que dirá Piper ahora? Lo siento Jason, pero si no se acercaba a ti estando sólo, mucho menos con Drew dando vueltas por ahí, ellas se odian.-
-Lo sé, pero lo hice, la besé y ahora me arrepiento, pero al parecer ella cree que es mi novia porque se lo ha dicho a todo el mundo, hasta Percy me pregunta que hice.-
Ed le trajo su desayuno, yo me quedé pensando, como pudo ser tan idiota, a veces me preguntó como somos amigos, y luego recuerdo que en teoría mi amiga es Thalia y que Jason es un... alguien que se pegó a nosotras desde pequeño.
Estaba perdida en mis pensamientos cuando veo la hora, queda sólo media hora para que comiencen las clases, lo que significa que perdí el autobús.
-Jason.- Dije con la voz más tierna de la que soy capaz.
-¿Siii?- Me miró algo asustado, sabe que cuando le hablo así es porque quiero algo.
-Sabías que ya pasó el autobús y...- Me interrumpió.
-Si Annabeth, yo te llevo, pero no aceptaré que te bajes antes, déjame ser feliz y llegar a la escuela una vez con mi mejor amiga, ¿no puedo?- Reí.
-No, no puedes. Mucho menos ahora que tienes una novia celosa que es de las pocas que aún me molestan.-
-De acuerdo, no pienso dejar que tomes un taxi así que no tengo otra opción.-
Una vez que terminó de desayunar, nos fuimos, pero me acordé de algo cuando estaba en la puerta.
-¡Adiós Ed!- Grité, Y obviamente alguien tenía que abrir su bocota.
-¿No era que gritarle a las personas era de mala educación?- Dijo divertido.
Bufé. -Cállate y camina.-
Me respondió con una carcajada y luego me subí a su auto.
-Por cierto, no me dijiste nada sobre Percy hace rato.- Le recordé.
-No hay mucho que decir, se quedó en su casa estudiando, creo que esta por reprobar una materia y eso significaría perder lo que más ama, así que no lo cuestioné.-
-Haa, ¿no sabes cuál?- Pregunté.
-Creo que matemáticas, pero no estoy seguro. Y Annabeth, sigo sin entender por que diablos no te gusta llevar tu auto a la escuela y cerrarle la boca a todos allá.-
-Te lo he dicho muchas veces, no quiero que me etiqueten, quiero que me vean por lo que soy, no por lo que tengo, y sabes perfectamente que papá no me dejaría tener un auto que no sea de último modelo. De hecho, él me regaló el que tengo y sólo lo uso para las vacaciones.-
-Lo sé, pero sigo sin encontrarle sentido.-
-Tu calla y conduce que llegamos tarde.-
***
Llegué a la escuela justo a tiempo, Jason me dejó a una cuadra de la escuela. Me dió el tiempo justo para llegar, ir a mi casillero a tomar mis libros y dirigirme a mi clase antes de que llegara el maestro.
Hoy al igual que ayer nos toca con Quirón, quién por si no lo dije es el profesor de historia universal.
Me dirigí a mi lugar de siempre, pero estaba ocupado, por Leo Valdés, un chico de piel tostada, es divertido, pero muy egocéntrico, se podría decir que es popular pero no siempre esta con ellos. Jason dice que es porque Rachel, Drew y Reyna, las tres chicas más horribles del planeta, lo aburrían. Tuvo que decidir justo hoy para sentarse en mi lugar.
Todos estaban ocupados, menos dos, uno al lado de Piper y otro al lado de un chico cuyo nombre no sé, estuve tentada a sentarme con el chico, sin evitarlo miré a Jason. Me arrepentí al instante, sus ojos me suplicaban que me sentara con ella. Me rendí muy luego, y me dirigí con Piper, justo antes que Quirón llegase.
Jason me debería una grande.
-Hola, mi nombre es Piper Mclean.- Se presentó, aunque no era necesario, yo sabía mucho sobre ella, adivinen por quien.
-Annabeth Chase, un gusto.-
-Igual.- Hizo una pausa. -Ya sabía quién eres.- La miré atónita. -No me mires así, sé que eres la chica más lista de la escuela, que en todas las clases te sientas al lado de la ventana, excepto cuando llegas tarde, porque esta ocupado, y también se que te encanta leer. Te he observado y tengo habilidad para descifrar a las personas.-
-Increíble, y yo que creía que era invisible para todos excepto para los que me molestan.-
-Drew, Rachel y Reyna te tienen envidia, tienes más cerebro que ellas y muchos de nuestros padres nos dicen que debemos parecernos un poco más a ti, por eso te he observado.-
-No lo sabía.-
-No me sorprende, no es algo que te puedan contar libremente. Ahora hay que escuchar a Quirón, es mi favorito.-
-Tuyo y de todos.- Ella sonrió.
-Hoy haremos algo sencillo, comenzaremos con las mitologías griega y romana. Para comenzar quiero que en grupos de 3 o 4 personas realicen un informe de todo lo que sepan de los dioses, me lo entregarán a final de clases, así sabré que les debo reforzar. No es obligatorio, pero es por puntos extra.- Levanté mi mano. -No señorita Chase, no puede hacerlo sola, aunque tampoco necesita hacer este trabajo si lo desea.-
Pero si quería hacerlo, pero no tenía con quien, eso significaba una hora de nada, a leer. Saqué mi libro pero no lo usé porque...
-Te gustaría trabajar con nosotras. Hazel y yo normalmente trabajos con Calypso, pero ella se enfermó y no podrá venir lo que queda de la semana.-
Su propuesta me tomó por sorpresa, no me lo esperaba. Para nada.
-Claro, será divertido.- Ella sonrió y le hizo una seña a una chica al otro lado del salón.
Ella era morena, de cabello castaño con muchos rizos y ojos color miel, era muy linda a decir verdad.
-Hazel ella es Annabeth. Annie, ella es Hazel.-
-Hola Annie, un gusto conocerte por fin, he oído mucho sobre ti, dicen que eres muy sorprendente.-
-Gracias...- Dije algo dudosa, esto me sorprende cada vez más. -Pero me gustaría pedirles un favor.- Ambas asistieron. -No me gusta que me digan Annie, lo detesto mejor dicho.-
-De acuerdo.- Dijo Hazel. -¿Pero como te diremos?-
-Sólo Annabeth.-
-Eres la primera a quien le gusta que la llamen por su nombre.- Dijo Piper. -A mi me dicen Pipes y a Hazel no le he encontrado un apodo lindo.-
-¿Qué te parece Haz?, ¿te gusta?- Les propuse.
-Es muy lindo. Me gusta, a partir de ahora seré Haz.-
Las tres lanzamos una carcajada. Luego hicimos el informe y lo entregamos a Quirón. Ambas sabían mucho más de lo que pensé sobre las dos mitologías y me dijeron que era porque les encantaba y leyeron un libro sobre eso en las vacaciones.
Mientras esperábamos al toque de la campana, charlamos y reímos mucho, estas chicas son muy divertidas. Al terminar la clase, con Piper fuimos a la sala de matemáticas y Hazel a biología. Luego me toca con Hazel antes del almuerzo.
Ya estábamos en la sala y mi teléfono sonó. Era un mensaje.
-Por tu cara diría que es de tu novio.-Me dijo Piper, la miré y tenía una cara perversa, como si esperará que le dijera que sí.
"Lamento decepcionarte, es Jason, no mi novio."
-No tengo novio, es un mensaje de mi mejor amigo.-
-No hay amor sin amistad... ¿o era al revés?, en fin, no creo que sea solo un amigo, no si sonríes así.-
-Sonrió por lo que dice.-
-¿Y que dice?
-Cosas personales, no creo que entiendas... es un chiste interno.-
-Haré que te creo, sólo porque no eres aún mi amiga formalmente y no te puedo forzar.-
Cuando terminó, llegó el maestro, no le presté mucha atención pero Piper parece estar más que concentrada.
Yo aún pensaba en lo que me envió Jason esperando que sea verdad. ¿Quieren saber que decía?
"Mi ricitos de oro por fin tiene amigas en la escuela."