『 ISABELLA 』
—Creo que ya es hora de irnos, ¿Verdad Jayden? —murmuró mi hermana. Jay la observó desconcertado.
—¿Ehhh sí?
—Genial, ahora vamonos, ¿Es que no recuerdas qué es el turno de Jareth?
—Ahhh, ya, sí claro que lo recuerdo a la perfección.
Se miraron complices y se fueron riendo con complicidad.
«Le tuvimos que llamar a mi madre porqué Jareth estaba que perdía la cabeza de la desesperación y no sabía que hacer sabiendo que tú estabas en el hospital»
Mmm, así que estaba desesperado...
Oh mierda, ahora me ha confundido más. ¿Acaso su intención es esa? confundirme cada vez más.
Joder, ¿Y ahora...?
—Ay por Dios y todos sus ángeles, estás bien —escuché la voz de Jareth, salí de mi trance cuando sentí sus labios con los míos en un beso corto. Luego me envolvió con sus brazos y colocó su rostro en el hueco de mi cuello.
¿Qué le sucede?
—Jareth...
—Shh, déjame un rato estar así...
Lo dejé sin más, dudando en sí hacerlo y en sí estaba correcto le devolví el abrazo.
Al instante suspiró aliviado.
¿Enserio esto estaba bien?
—Bella...
—¿Mhm?
—Te amo.
Y con aquellas dos palabras mi corazón de detuvo y estaba que se salía de mi pecho al mismo tiempo, por inercía contuve la respiración.
¿Esto era real?
¿Él lo decía de verdad o sólo lo decía para confundirme y engañarme?
Él no es Robert. Él no es Robert.
No, él no es Robert, él no me hará daño.
—Cuando te des cuenta de que Robert no es el correcto para ti, y que tampoco es el amor de tu vida, estoy segura que recordarás estas palabras. Algún día llegará el correcto.
—Mamá, ya hablamos de esto.
—Sí, y siempre te diré que Robert no merece tu amor, Bella.
Suspiré casi temblorosamente. Extraño bastante a mi madre.
Tanto que daría lo que fuera para volver a verla, abrazarla y decirle lo mucho que la amo.
Pero ahora no iba a llorar.
—Bella, ¿Qué sucedió? —dijo separándose de mí. Pero siempre sostuvo mi mano y jugó con el anillo que andaba, mismo anillo que mis padres me habían regalado.
—Kris y yo discutimos, ella salió del departamento y... y pues tuve un ataque de ansiedad en el momento que los hombres de la vez pasada entraron.
—¿Los hombres de la vez pasada?
—Mjum. El día que salí tarde, si no mal recuerdo eran las 8:00. Me seguían y ammm, dijeron que Robert estaba más cerca de encontrarme y todo eso. Jay fue a buscarme ese día porque me desmaye. Y ammm este día llegaron estaba a punto de calmar mi ataque de ansiedad cuando me pisieron algo en la nariz y pues.. me desmaye...
Pareció molestarle el simple hecho de que su hermano no le dijera nada de lo que ese día ocurrió, y es que yo se lo pedí.
—Cambiando de tema. ¿Jake dónde está? —inquirí.
—Tuve que llamar a Christian para que cuidara de él, mi madre al parecer ya sabía desde antes de la existencia de Christian y que es hijo de mi padre. Me dijo que sí quería que dejará a Jake bajo el cuidado de Christian. ¿Pero sabes algo?
—¿Qué?
—No me fío de él. Me genera desconfianza.
Reí suave cuando hizo énfasis en «desconfianza» sabía a que se refería, él había visto casi todas las veces que Christian y yo interactuamos, incluso, habían veces que lo fulminaba con la mirada sin disimulo alguno.
—Es que ya es más o menos cercano a ti. Yo he visto como te ve —refunfuñó con seriedad.
—Bueno, no es tan malo.
—Tiene doble sentido.
—Tú le das el doble sentido.
—No.
—Bien, no es malo en el sentido de que no es tan... malo.
—Oh vamos, gran explicación.
—Dejemos ese tema en paz.
—¿El tema o a Christian?
—A Christian.
Su cara dio gracia, por su seriedad al instante que nombré a su medio hermano. No sabía que se pusiera así sólo porque lo nombrara y me llevase bien con él.
—Que es broma.
—Mjum.
Hubo un silencio, no era incómodo, al contrario era relajante. Pero al mismo tiempo era raro.
—Bella yo... quería explicarte algo ¿Sí? yo no besé a Olivia, yo no la amo, yo ya no estoy enamorado de ella, mira yo... yo no quiero perderte. No ahora que te estás metiendo a mi mente y corazón, no quiero que te vayas de mi lado, no quiero que Jake se encariñe con otra chica aparte de ti. ¿Me explico? no quiero más niñeras para él, ya no, quiero que seas la única... a la que yo amo es a ti... ¿Entiendes eso?
Lo mire sin decir nada, y no es porque no me hayan conmovido sus palabras, o algo así, sino más bien, mi mente viajó al pasado sin previo aviso.
—Espero que nunca termine lo nuestro, o uno de los dos cargaria con el peso del arrepentimiento. Así que por favor, amore, nunca vayas a terminar conmigo. Entiende que yo te amo más que a mi vida, más que a mi mismo.
...
—Isabella, comprende que no me gusta que me hagas enojar, sabes que odio que cualquiera se te acerque, pero sí quieres que deje de "comportarme así" no me des motivos. Deberías entender que no lo hago por celos y por ser impulsivo y posesivo, si lo hago es por y para protegerte de los chicos que tienen intenciones que no son buenas.
...
—Amore, te entregué mi corazón desde el primer día que me sonreiste, así que por favor, prometeme que sí algún día terminamos no buscarás a otro chico que no sea yo, prometeme que sólo me amaras a mí, dime que seré el primero y el último que te ame y te lo diga, por favor, dime que nunca terminaremos porque el día que eso pase acabarás conmigo y no querrás verme así, amore...
—Júrame que no tendré que arrepentirme de entregarte hasta mi alma —dije en un hilo de voz.
Él me dio una media sonrisa, acarició mi cabello suavemente y dijo:
—Te lo voy a demostrar en vez de jurartelo.
Acuné mi rostro en su mano y Jareth se acercó más a mí, con la misma mano pero con su pulgar acarició mi mejilla. Cerré los ojos unos segundos, disfrutando de la suavidad de sus caricias.
No entiendo como fui tan tonta y como es que pude encerrarme a mi misma en una jaula creada por Robert llamada "amor" él me manipulaba, y yo era idiota al pensar que no se trataba de eso, si no que sólo lo hacía por "amor".
Con Jareth tengo sentimientos encontrados ahora mismo.
Creo que estoy amándolo.
Y puedo acostumbrarme a ello.
『 JARETH 』
Ahora comprendo mejor la frase aquella que dice...
"El cariño de una persona fría es el más sincero que existe"
Lo he comprendido y lo he comprobado con Bella, ella es fría, pero conmigo, con Jake, con mi hermano y con Kris no lo es. Y me siento demasiado satisfecho con ello, en el sentido de... he logrado ser una excepción para ella cuando decía "nadie me va a ser cambiar de opinión en cuanto al tema de cariño, se sabe a la perfección que cualquiera se aprovecha de ello, y si soy así es por mi propia seguridad"
No pregunten sobre eso, una vez la escuche decirle eso a Jay.
Si me enamoré de Bella es por algo ¿no? no creo en eso de que, uno se enamora por casualidad de una persona, más bien, uno se enamora de la persona cuando siente que pueden ser ellos mismos sin ser juzgados, enamorarse no es ser de alguien, es ser con alguien.
Y yo soy con Bella.
—Te amo —susurré. Al parecer ella se estaba quedando dormida por mis acaricias en su rostro, es bastante hermosa, bastante tierna y muy hermosa.
Sé que ya lo dije, pero nunca me casaría de decirlo. Y lo diría mil veces más sin cansarme. Ella es hermosa.
—Oh vamos, no hagas eso... —pidió casi inaudible.
—¿Qué cosa?
—Eso —señaló la mano con la que acariciaba su rostro y cabello.
Sonreí.
—¿Por qué?
—Porque me da sueño.
Reí suave y ella sonrió con los ojos cerrados.
—¿Y tú qué te crees? ¿Qué no descansaras o qué? —fingí molestarme.
—Es que ya no quiero estar aquí —se quejó, e hizo un puchero bastante tierno.
—Entiendo, pero tú entiende también, deberías descansar, rubia.
Abrió los ojos lentamente o quizá yo lo vi así, cómo en cámara lenta, estos se encontraron con los míos, destellaron a causa de las emociones que expresaban nuestras miradas sin decir nada.
«Todavía creo, que nuestro mejor diálogo ha sido el de las miradas»
Desde hoy tenia sentido esa frase de Mario Benedetti.
—Oye mi rubia, ¿Sabes algo?
Negó.
—Me gustas.
Ensanchó su sonrisa y ladeó la cabeza en mi dirección.
—¿A cuantas más les dices eso?
—A todas —respondí con simpleza.
—¿¡A todas!? —dijo en un susurro.
—Sí, a todas les digo y les diré que me gustas tú. ¿Por qué, Bella?
Noté su sonrojo, al darse cuenta de cubrió el rostro con ambas manos y al instante sonreí, me gustaba ser el causante de ese sonrojo, creo que mi actividad favorita desde hoy es: decirle cosas bonitas a Bella hasta hacerla sonrojar.
—Oye Bella, me acabo de acordar de algo...
Apartó sus manos de su rostro y me miró curiosa.
—Dime.
—¿Quién es Rachel?
Dejó de sonreír y vi como se tensó, vi como su mirada de clavó en alguna parte de la habitación, abrió la boca para decir algo, pero volvió a cerrarla.
¿Acaso no debí preguntar...?
¿Había hecho mal?
—¿Quién te lo dijo? —preguntó.
—El doctor dijo que cuando despertaste preguntaste primero por "Rachel"...
Murmuró algo, quizá una maldición por lo bajó, o eso fue lo que yo interpreté.
Suspiró y se pasó las manos por la cara, no sé si frustrada...
—Rachel era... es ammm... ella era una bebé...
Fruncí el ceño al no entender.
—Era mi bebé.
Y si anteriormente tenia las cejas fruncidas por la confusión, hoy las fruncí más por la mayor confusión que su confesión me generó.
¿Cómo qué su bebé?
¿Acaso tenía una hija y yo no sabía?
—¿Qué?
—Mjum... hace dos años estuve embarazada de Robert, créeme que sí quise tenerla. Pero no nació... yo la perdí por Robert... ese día discutimos, yo estaba por decirle que esta embarazada, pero total, no se lo dije porque al final la perdí. Robert me había golpeado y pues eso hizo que la perdiera.
¿Qué decía yo en estos casos?
—¿Kris lo sabe?
Negó.
—Nadie más sabía, únicamente era yo la única que lo sabía, hasta ahorita, que te lo he contado a ti. No lo supieron ni mis padres, nadie sabe y quiero que nadie sepa nada.
La observo con confusión, claro, me ha sorprendido saber que hace dos años iba a ser madre, wow, ¿Bella como madre? sería algo perfecto y muy hermoso.
No pude evitar imaginarme a Bella con un bebé, es decir, siendo madre, ¿Y si ese bebé fuese mío también?
Lo siento, es que no pude evitarlo. Se vería más hermosa cargando a un bebé, si fuese mío sería una vista y momento perfecto.
¿Qué dije?
Que si ese bebé fuese tuyo...
Qué cosas estoy pensando, por Dios.
—¿Por qué sonríes? —inquirió.
—Porque acabo de imaginarme a ti como madre, por cierto, muy hermosa.
—¿Sabes algo...? —murmure, mientras le acariciaba el cabello, nuevamente.
Negó.
—La primera vez que te vi, te juro que no tenia ni la menor idea que te volverías muy importante para mí.
[...]
『 ISABELLA 』
Hoy era el día en el que iría a Francia de vuelta, por cierto, mi alarma había sonado a las 4:20 a.m ya que el vuelo era a las 6:00 a.m.
Me froté los ojos con suavidad y bostecé, me levanté de la cama y me dirigí hacia mí baño para poder cepillarme los dientes y luego me metí a la ducha.
Quince minutos después salí de ducharme y me puse ropa cómoda para ir en el avión.
—Oh, que bien que ya estás lista, preparé el desayuno —avisó mi hermana cuando llegué a la cocina —. Por cierto, hay una sorpresa para cuando lleguemos a Francia.
—¿Una sorpresa?
—Si —dijo convencida y emocionada. ¿Pero por qué?
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Holiwissss :p
¿Qué tal están?
¿Qué les pareció este capítulo y maratón?
Vengo contando que he estado sin actualizar porque no he tenido tanta inspiración jeje. Pero prometo que los siguientes capítulos serán de lo más geniales.
Sin más que decir, chaooo.
Hasta la próxima actualización <3💋🦋❤