-Interesante...-Natasha debía aceptar que la respuesta obvia parecía imposible.
Había pasado las últimas semanas buscando información acerca de Deathstroke y como operaba en Nueva York.
Desde el invidente de la Abominación y su repentina desaparición Deathstroke dejó de mantenerse oculto porque simplemente ya no tenía sentido.
Todo el mundo había visto su hazaña, como aparecía de la nada a salvar algunos soldados y se enfrentó a la criatura a puño limpio, había notado lo impecable de sus movimientos y como parecía estar poco acostumbrado al combate contra alguien claramente más grande.
Debía admitir que tratar de averiguar la identidad del vigilante era bastante atemorizante para cualquier otro en SHIELD, después de todo en su informe se detalla como es el sospechoso número uno de la desaparición de Obadaiah Stain.
¿Quién más podría desaparecer un escuadrón entero de soldados bien entrenados?
Todo lo que rodeaba a este hombre era muy extraño, parecía tener conexiones con Stark y haberlo ayudado con el envenenamiento por radiación.
Aún así el índice de criminalidad subió repentinamente cuando Deathstroke dejó de aparecer por una semana. Su desaparición le dijo que Deathstroke se había tomado un descanso, pero eso facilitaba demasiado su búsqueda. Al menos no hasta que con información confidencial de Fury, descubrió que Deathstroke estuvo en Nuevo México así que ya sabía por donde empezar.
Debía ser alguien de Nueva York que haya ido a New México desde que Deathstroke se fue.
De allí fue sencillo.
Había aproximadamente veinte millones de personas en Nueva York, de esas poco más del cincuenta por ciento eran hombres. De estos sólo el treinta y cinco por ciento entra en el margen de edad, entre ellos sólo quinientos veintiocho personas viajaron a Nuevo México en los tres primeros días que Deathstroke no estuvo en Nueva York.
Comenzó a buscar en las grabaciones de la Red de cámaras de seguridad de Umbrella quienes habían estado en Harlem o sus alrededores cuando sucedió el incidente de la Abominación y eso sólo redujo la lista a tres candidatos.
El mini departamento donde se encontraba estaba lleno de documentos, grabaciones de vigilancia, imágenes satelitales, fotografías de sospechosos y bolsas llenas de documentos inútiles sobre quienes claramente no eran Deathstroke.
Tomó una de las cervezas que había perdido su refrigeración y la bebió resignada.
El trabajo fue agotador pero por algo era la mejor agente de Fury.
El primer candidato, un multimillonario de dudosos valores morales que trabajaba en distintos proyectos que trataban de imitar los efectos del Suero del Súper Soldado. Tal vez tuvo éxito y tendría la tecnología para crear una armadura como la usada por Deathstroke.
Sin embargo el fue descartado, alguien como él no usaría este poder de maneras heroicas, Norman Osborn era basura y aun recordaba como una de sus agentes que había sido infiltrada a Oscorp fue torturada al ser descubierta.
Lamentablemente SHIELD no tenía evidencias aparte de su desaparición y repentina aparición de un cadáver muy maltratado que coincidió con la prueba de ADN.
El segundo era alguien diferente, un descubrimiento que incluso sorprendió a Fury. Luke Cage, conocido pandillero de la ciudad de Nueva York resultó ser hijo de anteriores agentes de SHIELD, Fury había escondido esta información pero fue sencillo obtenerla una vez descubrió a este joven.
Al parecer algo en el le otorga súper resistencia, fuerza y velocidad superior a la del propio primer supe soldado.
Sin embargo el no había viajado a Nuevo México, estaba demasiado ocupado dirigiendo una pandilla después de que hace dos años hubiera sido expulsado de un orfanato por sus impulsos violentos. Así que claramente no estuvo en Harlem cuando sucedió el incidente, una de sus novias había terminado con él y se la pasó bebiendo en un bar de Brooklyn.
El muchacho no tenía suerte pero tenía salvación y Fury le encargó tratar de acercarlo a SHIELD después de descubrir la identidad de Deathstroke.
Y el tercero...
Era probablemente el candidato adecuado aún cuando varias situaciones demostraban lo contrario.
Jonathan Alexander Mercer.
Joven estudiante de Midtown con calificaciones perfectas, cuerpo Atlético y alto de contextura delgada, conocido en Internet por sus fotos que se volvieron virales hace tiempo. Si ausencia en redes sociales se hace notar y mucho de lo que hace es un misterio. A inicios del año después de patentar exitosamente un método para economizar la creación de cables de plata y su uso en sistemas eléctricos obtuvo una pasantía en Umbrella Corporations resolviendo los problemas económicos suyos y los del otro beneficiario, Peter Parker.
El único problema era su edad.
Nacido el 11 de marzo de 1993, solo tenía quince años.
Había estado en Harlem cuando casi fue destruido, había estado en Nuevo México al mismo momento que Deathstroke dejó de aparecer en Nueva York...
Pero habían dos problemas que contradecían esta teoría.
El primero era que Jonathan Mercer se encontraba en Nueva York durante el enfrentamiento de Iron Monguer y la segunda que era definitiva...
Jonathan estaba hospitalizado tras defender al tío de su mejor amigo Peter Parker de un asaltante que le terminó incrustado una bala en su caja torácica. La bala milagrosamente no lo había matado ni causado daños graves, sin embargo debió ser hospitalizado para sacar la bala y asegurarse de su bienestar.
Sin embargo, mientras el ha seguido hospitalizado Deathstroke tampoco ha aparecido.
Esa contradicción volvía de Jonathan Mercer alguien de quien no se podía sospechar...
Y esa era la razón exacta por la que Natasha esta a casi segura que este joven era Deathstroke.
Si alguien tiene una cobertura para momento de su vida, es porque trata de ocultar una mentira tan grande que de salir a la luz cambiaría todo.
Envió su informe a Fury antes de acercarse a su refrigerador a tomar una cerveza fría por un trabajo bien hecho.
Ahora solo debía confirmar sus sospechas y podría disfrutar de unas largas vacaciones.
Había enviado una solicitud de trabajo a la academia Midtown para profesora suplente de Español. No sería complicado pero definitivamente necesitaba un plan para vigilar a Jonathan sin que se vea como acoso. Si era quien creía entonces esto no sería fácil, alguien capaz de sorprender al propio Fury tenía quince años y probablemente ya era tan poderoso como Hulk.
Si ahora era alguien importante, en el futuro sería pieza clave de varios eventos. Así mismo si podían aliarlo con su causa, los beneficiarios solo aumentarían.
Deberían pagarle más por todo esto...
Su estómago gruñó y decidió salir a cenar.
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Todos se encontraban en una ha citación muy sofisticada, tapiz de color carmesí decoraba las paredes por gustos del anterior gerente ahora muerto.
El humo salió de su boca lentamente, bebió del licor y confirmó la calidad del establecimiento. Azazel había hecho un buen trabajo con el lugar hasta que repentinamente desapareció.
El cigarrillo en su mano se apagó en el rostro de un guardia de seguridad que se encontraba de rodillas frente a él.
El guardia gritó de dolor antes de que su cabeza comenzará a vibrar a una alta frecuencia, sus ojos se hincharon y la presión dentro de su cabeza comenzó a empujarlos fuera de sus cuencas.
Aplicó más fuerza y la cabeza impacto con mucha fuerza sobre el suelo explotando en pedazos bañando la habitación en sangre dejando congelados a los miembros administradores del Hellfire Club-New York.
Volvió a fumar de su cigarrillo analizando a los encargados, cada uno era un mutante pero ninguno tenía habilidades útiles para combatir o poseían el control necesario para resultar eficientes.
-Las cámaras no tienen nada y tampoco hay testigos. No tenemos ni siquiera una pista de quién pudo haberlo hecho...-Rascó su barba sin saber realmente por dónde siquiera podía comenzar.-¿Qué dices Monet? ¿Tienes alguna pista?
Había traído apoyo después de todo, ella era perfecta para misiones de búsqueda, además de que por si acaso había traído consigo musculo, mucho musculo.
Ese casco carmesí era difícil de ocultar en Nueva York pero valía cada centavo.
Monet St. Croix En cambio era descendiente de una familia acomodada y se crio como una niña mimada. Sin embargo eso no desacredita sus capacidades, ella era muy buena en cuanto a buscar mutantes se refería y era la razón por la que Shaw había invertido tanto en ella.
Era una mutante de nivel Alfa, podía manipular poderes psíquicos que le permitían desde leer mentes hasta volar a la velocidad del sonido. Súper fuerza, súper velocidad, agilidad y sentidos sobrehumanos junto a su mejor capacidad…
Detectar mutantes.
Había encontrado varios sólo en su camino hasta aquí así que la inversión ya había valido la pena a ojos del Alfil Negro.
Ahora solo debían encontrar al que mató a Azazel y tuvo los huevos para amenazar a la organización mutante más poderosa del planeta.
-De hecho…-Miró por la ventana en dirección al hospital.-Anoche sentí a uno, uno fuerte. Probablemente nivel Alfa, debe ser a quien estamos buscando. Solo necesitamos los registros del hospital y verificar si alguien que estuvo ayer en el hospital estuvo alrededor del Hellfire el día que Azazel desapareció.
Como se esperaba de una genio pensó Harry, Shaw definitivamente la nombrará Reina Blanca después de esto, Emma podría tener el control de Frost Internacional pero en habilidades Harry Leeland tenía su preferida.
Tal vez no estaba al nivel psíquico de Emma pero su podría físico e invulnerabilidad ya la hacían alguien digna del puesto.
El suelo tembló y recordó había alguien esperándolo afuera.
-Bien, me pondré en contacto con alguien para que te ayuden con los registros.-Se puso de pie sin nada más que hacer pensando en regresar a su hotel.-Asegúrense de darle algo de comer a Juggernaut, nadie quiere verlo de mal humor.
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