♫Listen To Your Heart - Roxette♫
Necesitaba decirle que estaba prometida porque me sentía en la obligación de ser sincera en ese aspecto con ella.
A esto se refería madre, a la sinceridad impulsiva. ¡Casi incontrolable!
Le dije a Lisa que me gustó besarla, que me besara otra vez...me quité la ropa provocándola...ni uno de mis actos fue cuerdo, no al cien por ciento. Como si mi cuerpo se expresara necesitando de ella, como si mi alma me obligara a decirle todo lo que le dije.
—¿A esto te referías madre?—susurré lo más bajito posible, viendo las figuras grandes en movimiento formado por la sombra de las velas a mi alrededor.
Flash back hace 5 años
—¿Qué pasa mi vida? ¿Cuéntame?—mi madre se acostó a mi lado sobando mi brazo.
—Jack llevó a su novio a cenar...realmente odio que no pueda cambiar sus gustos.
—Hija, tus celos parecen más de atención que de amor.
—no entiendo, tu sabes que estoy enamorada de Jack, me da celos todo de él.
—celos si tienes, pero son celos de amigos...esos donde tu amigo te deja de lado por su actual pareja,haber responde algo ¿Qué sientes cada vez que vez a Jack?
—uhmm no se si decirte mamá me da pena...—esbocé una leve sonrisa
—soy tu mejor amiga también. Respóndeme con sinceridad, describe todas esas sensaciones.
despues de meditarlo unos segundos, empecé a enumerarle, lo que segun yo sentía.
—veo como entra en cámara lenta, su belleza,su belleza es...esta guapo el condenado.
—de acuerdo ¿Qué mas?.
—uhmm pues me gusta como me trata...
—hija si nos enamoraríamos de todos lo que nos tratan de forma caballerosa, difícilmente habrían matrimonios.
—vez por eso es que me gusta el, es uno en un millón.
—¿Qué mas sientes?
—uhmm pues me siento feliz, termino de hacer cualquier cosa y me quedo con el, siempre quiero estar con el.
—no te ofendas por lo que te diré pero, tu no estas enamorada de el. Describiste el sentimiento típico de ver a un amigo.
—pero mi trato con el es mas que una simple amistad...
—son muy grandes amigos, quizá lo mas parecido a hermanos.
—no se...pienso que con el es diferente.
—Todos tratamos a los amigos con respeto y con confianza, pero hay un limite para que alguien pase a ser nuestro novio o novia.
—si te refieres a convivir, yo ya he dormido con el...—dije sin entederle el punto.
—dormir, no es convivir... Has dormido como amiga con el...pero jamas haz conpartido cosas íntimas.
—bueno no es que no quisiera...—sonreí pícaramente.
—no me refiero a las relaciones sexuales, que inclusive podrían tener sin necesidad de que el sea hetero. Pero ese no es el punto.
—¿entonces a qué tipo de intimidad te refieres? ¿No conozco otro?
—al del hogar...
—pero el es casi de la familia.
—no Rosita, tu siempre tienes cuidado cuando él está. Cuidado de tu comportamiento, de cómo tratarlo y demás...
—explícame mejor porque realmente no te entiendo. Dices primero que es como mi hermano y ahora dices que no...
—dije "casi "como hermano...y cuando me refiero a convivencia...no es precisamente de hermanos, porque la convivencia de pareja es completa a diferencia de la convivencia de hermanos.
—uhmm me explicas mejor mami por favor no te entiendo muy bien...
—Me refiero a la intimidad de ti compartida con otra persona, como por ejemplo: La cama...cosas desagradables...tú espacio...tu baño...tus manías......tus defectos...tu periodo...tus gustos...tus fetiches...tus secretos...tus enojos...tus problemas...tu dinero...tu corazón.
—bueno algunas cosas comparto con Jack.
—cuando estás enamorada compartes el noventa por ciento de lo que mencioné incluyendo la intimidad.
—¡queeeeee!
—pero lo más importante...cuando amas a alguien, no te molesta en lo más mínimo compartir todo lo mencionado y lo mejor de todo, no te da vergüenza.
—uhmm bueno ahora que lo mencionas odio cuando Jack ronca, de verdad lo detesto. Por eso ahora solo duermo con el cuándo bebemos de más.
—también te molesta cuando come rápido haciendo sonidos, lo veo en ti cada vez que almorzamos con él.
—Ni como negar eso, también odio cuando entra a mi baño y no levanta la tapa,¡agh! y una vez ni jalo la bomba.
—eso es poco hija...bueno pobre Jack, no hay que criticarlo.
—una última pregunta mami, si tú dices que no estoy enamorada de Jack y yo si lo creo...¿cómo me daré cuenta cuando me enamore de alguien de verdad?
—es subjetivo...hay niveles de amor. Es tonto pero tan real: Primero es el gusto, te puede gustar una serie de personas que llamen tu atención ahí yo pongo a Jack. Luego viene el enamoramiento, cuando lo que hace esa persona te afecta por demás, todo... como si estuvieras ciega y de pronto solo vez a una sola persona, cada vez que te mira o te habla o te toca, provocara algo en tu cuerpo una reacción incontrolable, soñaras con esa persona, te ilusionaras de esa persona inclusive no querrás que piense mal de ti esa persona provocando sinceridad impulsiva. Por eso dicen que es algo mágico, despierta cosas dentro de ti que nunca antes habías sentido, lo sabrás reconocer llegado su momento hija y me gustaría que me cuentes cuando suceda.
—uhmmm y... ¿hay una tercera?
—¡el amor! Amar de verdad es el último nivel: aquí nada ni nadie puede impedir que tu amor tenga control de tu ser y tu corazón, puedes comprender su enojo, puedes manejar los problemas, pueden tener un nivel alto de confianza, pueden controlar los celos, pueden tener la intimidad más inimaginable posible. Si ambos se corresponden no tengo dudas que pueden lograrlo todo. Cuando amas a alguien puedes dar hasta tu vida sin titubeos, sacrificarte por él o ella...
—¿sentiste eso por papa?
A mi edad sabía muy bien que el matrimonio de mi madre era arreglado, para juntar dos grandes empresas, mi padre ya tenía un hijo cuando los casaron. Pero eso no le impidió reclamarla como mujer. Ella me prometió que jamás permitiría que me hicieran lo mismo.
—No por él no... lo sentí por ti hija...
Nos abrazamos fuerte...
—te amo demasiado mami.
—eres una bebe Rosita...pero sé que tendrás un millón de pretendientes por todo el mundo. Tu madre solo quiere que no te contengas a tus sentimientos. Sé que pronto empezaras tu carrera, viajaras, tendrás la agenda ocupada. Quiero que recuerdes esto siempre. Dure cuanto dure... Enamorarse es lo mejor de la vida.
Fin flash back
Trataré de dormir, porque si le sigo dando vueltas a ésto, me dará un derrame cerebral...
No puedo dormir...
Quiero que regrese a mi lado...debe de tener frío...
Me destapé, quería ir a su lado. Pero algo me detuvo
Me tapé de nuevo y se vino esas dudas en mi cabeza. ¿Está bien sentir gusto por ella?, ¿y si solo se aprovecha de mi fragilidad?...¡No cállate!
Hice lo mejor que sé hacer...cantar. Cantar hasta dormirme, lo estaba haciendo en silencio...necesitaba despejar mi mente.
Después de casi una hora cantando diferentes canciones, conseguí dormirme.
Sentí que algo se movía a mi costado...cuando abrí los ojos. Lisa estaba agachada de espaldas contra el ropero.
—buenos...
—¡shhhhh!—me tapo la boca, conteniendo mis palabras...el pánico de pronto se apoderó de mi cuerpo.
—¡mmmhh! ¡mmmhh!—traté de hablar, pero su mano tapaba mi boca.
no podía creer...
—¡shhhh!...por favor no te asustes—Lisa susurraba acercándose a mi oído.
Lentamente sacó su mano y dejó de empujar...Yo no comprendía.
—por favor,por favor... no te muevas, quédate quieta, no hagas ni un ruido...¡por favor!—dijo Lisa aun susurrando.
Yo asentí y no me moví.
Cuando vio que me quedaría quieta, nuevamente se giró y continuo sacando lo que ahora veo unos accesorios de cámara, lo hacía lentamente para no hacer ruido.
Quería preguntarle qué estaba haciendo...pero era obvio, estaba armando su camara, ¿entonces todo se trataba de eso? será tan...¿quería unas fotos mías?...y ¿desde cuando diablos tenía esa cámara de paparazzi ahí?
Se puso la correa y nuevamente se giró hacia mí.
Hizo el gesto de silencio y juntó las manos cerrando sus ojos haciendo referencia a una súplica.
Nuevamente asentí con la cabeza. Ella se fue en medias hacia la puerta, tratando de hacer el mínimo ruido posible y empezó a abrir la puerta.
¿Qué hace?
La curiosidad me mataba, me senté lentamente y miré.
Se acomodó en la puerta semi abierta, contuvo la puerta con ambas piernas, mientras que ella se apoyaba en el marco de la puerta, pero todo semi echada. Empezó a tomar fotos, ¿a qué?...pues no sé. Y no me quedaría aquí en la cama como estatua para perderme lo que séa que estuviera fuera.
Sabía que mi pierna estaba mala, pero no impidió que me arrastre lentamente como gusano hacia Lisa. Si...todo por no hacer bulla.
Mientras me arrastraba a la puerta, aproveche para llevar una manta en mi espalda. Vi que Lisa solo estaba con un suéter y ganas de ponerme la casaca no tenía. Entonces decidí llevar la manta para ambas.
Ni se inmutó por mi presencia, ella seguía en lo suyo...cuando me asomé a ver lo que había ahí afuera...era una especie de ciervo salvaje que estaba al frente de nuestra cabaña...espera dije "¿nuestra?"...como sea. ¿Tanto alboroto para un animal tan común como un ciervo?.
Debe ser su afición...¿Quién soy yo para juzgar los gustos de los demás?.
—¡un par más!—dijo apretando los botoncitos de la cámara.
Yo me limité a mirarla, estaba con una media sonrisa, su mirada fija en el animal ese, sus manos girando la lente y la otra apretando el obturador...era tan apasionada...de pronto miró la pantalla de la cámara revisando sus fotografías, como fotogramas y paró en una de ellas.
Me acerqué para ver, pero al instante sentí sus labios junto a los míos. Como acto reflejo cerré los ojos...
Sentí su mano en mi mejilla y su frente pegarse a la mía...
Abrí mis ojos, y veía una cara de satisfacción, iluminada a pesar de seguir con la nariz hinchada.
-lo conseguí ardilla-seguía susurrando.
Me dio un pequeño beso y terminó de abrir la puerta para acomodarse mejor. Abrió sus piernas y esa era mi señal para acomodarme en su regazo. Todo lo hicimos con cuidado...sentí como me atraía hacia ella y me abrazaba por detrás. Yo nos tapé con la manta y dejé que su rostro descanse en mi hombro derecho.
—no sabía que te gustaban los ciervos—le dije bajito.
—no sabes nada de mi...aunque debo acotar que los ciervos no son de mi preferencia, pero ese que vez ahí es especial...si...es especial como tú—al decir esto me abrazó más fuerte. Ahora me tenía bien apegada a ella.
—Sigo viendo a un simple ciervo Lisa—le dije buscando sus manos debajo de la manta.
—"ciervo del padre David"—respondió—ese es su nombre...Es especial porque se considera mítico, fíjate bien en su cuerpo entero... te describo: tiene cuernos de ciervo, cabeza de caballo, patas de vaca y cola de burro.Es raro en su especie.
—ahora que lo mencionas...¡si tienes razón! Lo veo y no lo creo —aproveché para entrelazar nuestras manos, sin dejar de hablar en susurro.
—debe de ser por la avalancha, espantó a muchos animales seguro, y si te das cuenta ya deshieló la gran capa de nieve que había, no sé cómo vino a parar justo al frente de nuestra cabaña ardilla, tu me diste suerte—Lisa empezó a darme besitos en mi mejilla.
—me haces cosquillas—yo estaba disfrutando sus caricias.
—me gusta tu olor ardilla—dijo inspirando cerca de mi cuello...
—¡se dio cuenta!, nos miran Lisa...—le dije en puchero.
—¿quiénes?—levantó su cabeza y empezó a ver alrededor.
—¿no dices que ese ciervo es cuatro en uno?...el caballo, la vaca, el burro y el ciervo ellos nos ven.
Sentí que esbozó una gran sonrisa aguantándose la risa, pero al girar a verla de pronto escondió sus labios.
Conocía esa expresión de nerviosismo...cuando los dejó libres, no pregunté, no esperé, los tomé con muchas ganas, absorbí sus labios carnosos...uno por uno, sentí como abría su boca para mí...despacio. Después de unos segundos sentí un toque de su lengua, como si me invitara a dar un nuevo paso...Lo hice abrí más mi boca y ahí metió su lengua, invadiendo mi boca, encontrándose con la mía que no tardó en activarse y empezar una danza sensual que solo fue cortado por la falta de aire de ambas.
—Creo que le gustamos—dijo haciéndome señas para ver al "David" ese. El animal había girado para vernos.
—¿y si lo cocinamos? —dije mirando al ciervo y comiéndome el labio. Lisa se indignó, pero hizo una pausa en su expresión...
—¡oh! Como lo siento, debes de tener hambre—dijo preocupada. Sentí un movimiento que me alertaba que quería movernos.
—espera un poco por favor, quiero estar un rato mas así contigo...
Su cuerpo se relajó y nuevamente nos quedamos expectantes de la fauna y naturaleza.
—yo quiero estar más que un rato así contigo...
Oírla decir eso, calmaba cualquier duda que tenía
—y lo estarás...
Realmente espero que estés más tiempo conmigo...