Abrió sus ojos aun con mareo...
De no ser por su increible cerebro no recordaría lo que sucedió hace unos momentos.
Al instante sintió como su cuerpo estaba retenido, tambien tenia un suero morado que entraba lentamente en sus venas y lo hacia sentir debil.
Recordó que era el extracto que el sintetizó como cura para la situación del doctor Banner antes de que todo se fuera al sur, un collar evitaba que su mente use sus poderes psíquicos y las ataduras parecian ser del nuevo material producido por Reed Richards la carbonita.
Más duro que el titanio y bastante accesible considerando todos los usos que podian darle pese a su nivel Radioactivo.
Parecia que el cuarto entero estaba hecho de este material único, Richards de verdad era un genio.
Miró alrededor y vio a otro hombre que a diferencia de él no se encontraba atado bastante alejado mirándolo con miedo.
Era un hombre asiático bastante delgado de aspecto inofensivo.
-Supongo que aunque te lo pida no vas a liberarme.-Sonreía con ironía al verlo negar con la cabeza mientras temblaba.
Usando su mente superior trató de encontrar una manera de soltarse solo para encontrarlo imposible.
El suero que se vertia en su sangre mataba las células Gamma apenas se producían asi que su cuerpo estaba en un estado semitransformado con la piel levemente verdosa y un cuerpo un poco mas grande que el de un humano.
-¿Te trajo un hombre mayor en traje?-Cho asintió pareciendo confundido.
Su mente no entendía porque los trajeron aqui, si ellos los querian muertos era obvio que sería facil lograrlo...
Estaba por tratar de usar sus musculos para desconectar el suero en sus venas pero las compuertas metalicas se abrieron entrando el mismo hombre siniestro vestido de traje con una sonrisa y un portafolio.
-Es bueno ver que ambos esten despiertos. Mi creador llegará pronto asi que debo terminar los preparativos. Lamento que no le trajera una silla señor Cho pero entenderá porque no lo hice si su IQ es el mismo de su expediente.-Al parecer el joven asiático se apellida Cho.
Amadeus Cho....
¿Por qué estaría el aquí?
-Lamento informar a ambos que este será su ultimo dia de vida, aun asi pueden estar felices pues su sacrificio no será en vano.-Desde que entró su sonrisa aterradora no abandonó su rostro.
Miró a su compañero de celda quien parecia horrorizado.
-Po-Por favor no... soy joven y-No tuvo tiempo para responder pues el hombre de traje simplemente lo miró liberando sed de sangre.
-Jamás pedí su opinion joven. Ahora debo proceder...-El hombre se acercó a su c7erpo esposado analizándolo con cuidado.
-Su desarrlo de poderes psiquicos parece haberse detenido por el efecto del suero... al parecer la dosis fue demasiada y no sucedio un subdesarrollo. Que decepcion.-Negó c9n la cabeza mientras ponía su portafolio en el suelo.
De alli apareció una jeringa con sangre.
Los ojos de Sterns se abrieron reconociendo lo que habia allí...
La sangre de un dios que habia nacido en este planeta.
-Ahora doctor Sterns esto probablemente duela... demasiado. Jejeje~.
Su mirada no abandonó la jeringa mientras era insertada para mesclase con el suero.
-Si los datos recopilados no fallan, esto deberia iniciar la mutacion mientras lo mantiene inmóvil.-Sterns sentia como la sangre de Hulk ardía en sus venas y cuabdo abrió la boca para gritar una especie de mordaza fue puesta en su boca.
La mirada atenta de G-Man no abandonó su cuerpo que sentía como cada una de sus células se reformaba a las de un monstruo Gamma y los grilletes apretandose y el collar en su cuello apenas reteniendo sus poderes
Aun asi su mente y cuerpo estaban agotados por el cambio repentino de su estructura genética, el cambio que recibió su cuerpo fue permanete a diferencia de Hulk.
Respiraba con dificultad pero su mente ya tenia un plan, apenas el collar ya no pueda retener sus poderes los usará para escapar.
No podía permitirse una confrontación directa con este creador.
G-Man comenzó a estraer tejido de él asi como muestras de sangre, un poco doloroso pero nada comparado con el dolor de la transformación anterior.
Asi habian estado hasta que escucharon golpes.
*Thud**Thud**Thud*
Sterns estaba preocupado, si sus pisadas causaban ese sonido significaba que este creador debia ser enorme.
Tal vez sea otro como Hulk...
¿Pero cómo?
La puerta volvió a abrise y no podia creer lo que sus ojos veian.
Sabía la clase de Abominación que habia creado pero jamás creyó verlo en ese estado.
(Prometo que es el último juego de palabras con Abominación)
Su rostro estaba desfigurado, se podia ver partes de su cráneo y le faltaba un ojo junto a casi todos los dientes.
Pero su horrible rostro se podria considerarse hermoso comparado con la situación en su abdomen.
Sus organos estaban carbonizados y parecia haber perdido varios, su cuerpo se centró en mantenerlo con vida curando sus pulmones y vasos sanguíneos.
Las costillas que antes sobresalían ahora desaparecieron junto a varios huesos de su caja torácica y lo unico que podria considerar intacto en su cuerpo eran sus piernas.
Pero lo que más le sorprendió fue ver a un adolescente arrastrando el enorme y pesado cuerpo de quien antes fue un soldado condecorado del ejercito ruso.
Su cabello estaba cortado pero seguia algo largo, sus colmillos eran mas grandes que los de un humano normal y su cuerpo aunque escondido entre la ropa holgada estaba tonificado y escondia mucha fuerza...
Lo peor fue que su mente sintió la energia de la mente y cuerpo de el joven frente a él...
Su cuerpo básicamente contenía un mar de energía casi al nivel de Hulk y su mente revelaba energía psiquica casi del mismo nivel que su cuerpo pero parecía estar en un estado similar al suyo siendo retenida.
Lo extraño era que el joven no llevaba el mismo collar, podría ser un mutante.
Segun la teoria del profesor Charles Xavier los misteriosos mutantes despertaban sus poderes pero usualmente necesitaban un catalizador para despertar al máximo sus verdaderas capacidades.
-Mierda, fue bueno hacer esta habitación tan grande.-El joven sonreía despreocupado mirando al horrorizado Cho quien se acurrucaba en una esquina.
El joven lo miró y sus ojos se abrieron, sintió que era abalizado de arriba a abajo y por alguna razón Sterns tenia un mal presagio de la razón por la que estaban aquí.
-Dr. Esterns es un gusto finalmente conocerlo, a usted tambien profesor Cho.-El delgado joven asiático no se comió la amabilidad y lo miró con cuidado.
-¿Esta todo listo?-Preguntó a G-Man.
-Asi es señor, hubo un problema con la transformación a monstruo Gamma del Dr. Sterns pero lo solucioné antes de que escale a mayores.-El hombre en traje parece trabajar para él.
-Bien, comencemos con cho y luego voy por la Abominación.-El joven se acercó hacia Cho quien trató de empujar el muro de acero en un patético intento por escapar.
El joven se acercó y como dijo G-Man dijo mataron a Cho.
Pero lo peeculiar fue que una espe ie de masa de carne comenzó a carcomer el cuerpo delgado y terminó dejando un pequeño charco de agua en el suelo.
-Interesante...-La sonrisa del joven mostró sus afilados colmillos y molares causando una sensacion siniestra en su cuerpo.
Su brillante cerebro trabajaba horas extra tratando de descubrir que clase de poderes extraños eran estos.
El joven ahora se acercó a la Abominación que gruñía.
Se colocó en su pecho antes de dar un salto y aplastar su cabeza en el suelo, al ihual que antes una especie de tentáculos comenzó a carcomer el cuerpo de la Abominación y en segundos este desapareció dejando agua de tono verdoso en el suelo.
El joven sostuvo su cabeza unos segundos antes de sonreir otra vez como un maniático.
-Realmente valió la pena ir a aquel universo.-Su mirada se dirigió a su cuerpo y Sterns supo lo que le esperaba.
Cerró los ojos cuando sintió algo perforar su pecho y su mente apagarse.
Ahora que habia obtenido este poder entendia una cosa, los débiles estan destinados a ser pusotados por los fuertes.
El fue debil, era hora de pagar el precio.
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