Al principio Ichimatsu creyó haber escuchado mal, pero al visualizar esa expresión sería en ella parpadeó perplejo, denotando su curiosidad por descubrir como Jyushiko estaba preparada para ante inesperada situación.
-En realidad...- Musitó ella, quien había notado la duda del Matsuno. Bajó la mirada que tenía puesta en él hacía el lugar donde su propia mano estaba sosteniendo su hinchada erección - Desde la última vez que estuvimos aquí, supuse que podría volver a repetirse y quise ser precavida.. - Aclaró mientras liberaba una cierta risa. Ichimatsu tuvo la intención de hablar pero las palabras fueron interrumpidas; Jyushiko estaba usando su pulgar para hacer presión en el glande y masajearlo en forma circular. El Matsuno se estremeció tanto que se tuvo que apoyar de palmas en la cama al sentir que se iba a caer, quedando de nuevo encima de ella. Ichimatsu cerró los ojos y mordió sus labios temblorosos, era indescriptible para él el como se sentía, la pequeña mano de su novia le proporcionaba una sensación inigualable, tanto qué estaba seguro que su cuerpo virgen y inexperto no soportaría esa deliciosa tortura mucho tiempo, menos aún con Jyushiko masturbadolo como si fuera de lo más natural para ella
Se le notaba la picardía en cara a la rubia, se divertía con su vulnerabilidad.
- Jyu...Jyushiko...- Gimió ronco, apretando los puños y bajando la cabeza, no podía mirarla a los ojos, le avergonzaba ser tan débil y estaba empezando a considerar no ser lo suficientemente resistente para pasar al siguiente escalón. Sin embargo, Jyushiko se detuvo, a lo Ichimatsu se dedicó a observarla curioso por ver qué estaba haciendo, descubriendo que ella había estirado la mano al cajón de la mesita de noche, sacando el pequeño paquete del preservativo, lo abrió para posteriormente empezar a colocarlo en el respetivo lugar.
-Ayudame, no sé cómo debe colocarse... - Pidió Jyushiko con cierto aire de inocencia que le enterneció al Matsuno, pero éste mismo hizo una mueca cuando al tratar de ayudarla también se le dificultó. Ninguno sabía hacerlo pero no les quedó de otra que ayudarse entre los dos, fueron algo torpes al principio pero al descubrir como era el truco lograron colocarlo bien. -¡Listo!
Un silencio invadió la habitación de pronto, ambos se observaban fijamente con cierta duda, ya sabían lo que continuaba después, y la que más debía de prepararse era Jyushiko que anterior veces escuchó que la primera vez dolía y eso le daba nervios, sin embargo no se echaría atrás.
-Hazlo Ichimatsu... - Susurró ella al momento de entrelazar la mano con la de él, posteriormente se dejó recostar sobre la cama con ambas piernas abiertas. Ichimatsu tragó saliva, era el momento, todo parecía detenerse, incluso el transcurso del tiempo, casi le parecía mentira, la imagen era solo producto de su imaginación o así pensaba él mayor... pero lo que la luz de luna le permitía ver le demostraba lo contrario.
Jyushiko sonrió cuando Ichimatsu procedió a acomodarse y buscar posición, encontrandose al parecer ya preparado y ella por su parte no se abstuvo de guiarlo por el camino que debía seguir, utilizando su mano sostuvo la punta de su erección acercándola a su vagina donde ambos gimieron ante el roce que se producía mientras intentaban ubicar la entrada por la que el cuarto debía de pasar y al dar con ésta respiraron profundo.
Jyushiko cerró los ojos con fuerza al sentir que Ichimatsu empujaba sus caderas lentamente para abrirse camino, aunque no era nada fácil para ninguno de los dos. El interior de la rubia era caliente y muy estrecho, tanto que parecía empujarlo de vuelta, y aunque intentó aplicar algo de fuerza, pensando que sería mejor entrar de una vez, Ichimatsu notó que si lo forzaba lastimaria a Jyushiko, quien gemía con dolor cada vez que sentía que él empujaba más profundo. No había imaginado que la primera vez sería tan complicado pero al descubrir el truco se le facilitó.
El Matsuno notó que si realizaba movimientos de atrás y adelante de forma constante su pene se iba deslizando adentro más fácilmente y aunque sentía que estaba siendo aplastado por las paredes vaginales, experimentaba un éxtasis indescriptible que no deseaba detenerse. Colocó ambas manos a cada costado de las caderas de Jyushiko animandola a qué levantara las caderas, ésta por su parte mantenía el aire, lo soltó y se relajó hasta volverse a tensar cuando el cuarto penetró completamente su interior.
Ambos cerraron los ojos con fuerza y al par de unos segundos se observaron. Los ojos de Jyushiko estaban sumergidos en cristales que querían escapar por sus mejillas, esto hubiese alertado al Matsuno de no ser porque ella está sonriendo, si, Jyushiko estaba feliz, feliz de estar ahí con él, compartir un momento tan íntimo juntos y feliz de ser uno con el hombre que amaba. Ichimatsu por su parte sintió que esa sonrisa golpeaba con fuerza en su pecho, le conmovía presenciar tan hermosa imagen y su vez su cuerpo temblaba, necesitaba con urgencia moverse, y sabía que eso ayudaría a Jyushiko a no sentir dolor, haría que se acostumbrara.
Él se acercó a ella, pasó la mano por su rostro con cariño y le descubrió la frente peinadole el fleco hacia atrás, regresandole el mismo gesto sonriente antes de plantarle un beso en sus labios, Jyushiko tuvo la oportunidad de corresponder a éste pero pronto se le dificultó seguirlo, debido a los gemidos que salieron a flote conforme Ichimatsu empezó a embestirla suavemente.
Ichimatsu gruñó, de verdad que estaba apretado, deliciosamente apretado, se movía de atrás y adelante con cierta torpeza al principio pero su propios instintos lo ayudaron a hacer de su vaivén un movimiento seguro y hábil. Podía sentir como gracias a la humedad pegosa y caliente se deslizaba de adentro y hacia afuera mientras Jyushiko lo apretaba y esa fricción desataba una corriente de explosiva a cada parte de su cuerpo, algo que lo volvía loco, ya no podía parar.
Jyushiko por su lado, al principio, sintió que su interior ardía como si raspara por dentro, era demasiado incómodo y no encontraba en que posición colocar su cuerpo que pudiera ayudara a disfrutarlo, pero cuando Ichimatsu pasó a besar su cuello, acariciar su cuerpo y sus piernas, volvió a relajarse y todo empezó a cambiar. Lo que parecía un ardor se transformó un placer inigualable, sus caderas por cuenta propia buscaron sentir más de él, elevándose y realizando movimientos en contra de los de su amado, quien se encargaba de deleitarse con su figura femenina, explorando nuevamente toda su extensión desnuda, bajando por sus piernas, apretando sus nalgas subiendo por sus caderas y acariciando sus pechos; todo cuanto lograba llenar su ser de una pasión inexplicable, la cual también se apoderaba del Matsuno.
Ninguno podría definir el como se sentía aquello, pero si de algo estaban seguros es que ya nada podía pararlos a esas alturas, por su sangre recorría un deseo que ansiaba fusionar sus almas en una, aumentando el amor que ambos sentían por el otro llevandolos a la profundidad del glorioso éxtasis y desatando sus instintos más salvajes y carnales.
Se besaban, acariciaban y se mordían, apretaban sus cuerpos desesperados y ansiosos, los cuales danzaban en un movimiento sincronizado y placentero, acompañado por los sonidos húmedos y eróticos de los dos que inundaban la habitación junto al leve rechinar de la cama.
-Ichi... I-Ichi...matsu..- Gemía la rubia, la cual se aferraba ahora a la sabanas ahora que Ichimatsu la había acostado de lado y elevado la su pierna izquierda, apoyándola sobre su propio hombro sin detener sus embestidas
-Es.. es increíble... me encanta..- Comento el Matsuno, con una sonrisa perversa y cargada de excitación - Eres... eres... increíble Jyushiko... - le afirmó él, ahora transformando sus vaivén en movimientos más fuertes y decididos que terminaron por entusiasmarlo a verla en una de sus posiciones favoritas; volteandola completamente boca abajo y elevando las caderas de ella para mantenerla a la altura de sus pelvis, brindándole más espacio para penetrarla profundo.
Jyushiko atoró sus sonidos con la sabanas, aunque Ichimatsu se la ponía difícil mientras la sujetaba por sus muslos con fuerza, lo que casi hacia a Jyushiko gritar gustosamente cada vez que sus pieles chocaban produciendo un sonido obsceno y mojado, esto le excitaba en demasía al cuarto, quien ya no lograba soportar la acumulación de placer en su cuerpo.
Podía visualizar el final a tan poco tiempo que decidió dar con todo. Clavó sus uñas en los glúteos de Jyushiko y empujó con fuerza sus caderas a la velocidad mas rápida que podía permitirse, su interior comenzó a sacudirse y una serie de espasmos empezaron a atacar la zona baja de su espalda. Jyushiko por su lado podía sentir como Ichimatsu estaba a su límite, y se esforzó por ayudarlo lo mejor que podía, movimiendo con sensualidad y rapidez sus caderas, llevando la mano detrás de su cabeza para enredar los dedos con el cabello del azabache cuando lo sintió acercarse a su nuca y morder ésta con fuerza al momento de sentir que el orgasmo lo invadía, lo llevaba al abismo más profundo de gloria.
Ichimatsu sentía que todo su cuerpo se sacudía mientras liberaba la presión acumulada de su semilla, ahogando el gemido ronco contra la piel morena de su novia, quien tuvo que esforzarse por callar al sentirlo embestir con fuerza una última vez antes de caer desplomado sobre su espalda entre jadeos, sintiendo los pequeños restos de espasmos recorriendo su cuerpo hasta relajarse finalmente.
-Jyushiko...- Murmuró Ichimatsu con suavidad, abrazándola gentilmente y ocultando el rostro en la cabellera amarilla para aspirar su aroma. La mencionada calló hasta calmar la respiración y dejó caer el rostro sobre las sábanas, respondiendole apenas algo entendible - ¿Te.... te.. gustó? -Jyushiko asintió, sin querer levantar la cara aparentemente avergonzada, lo que hizo sonreír al Matsuno quien se apartó de encima luego de besarle la espalda.
- ¿Y a ti...? - Pregunto ella, sin verlo aún, pero buscando sujetar la mano de él, acariciandola
-Como nunca imaginé... Fue increíble..- Dijo algo entusiasmado Ichimatsu, arrodillo mientras se sacaba el condón y lo amarraba para después botarlo en la papelera que estaba en una esquina de habitación. Fue el momento en que Jyushiko se volteó y busco esconderse bajo su cobertor antes de que el Matsuno volvería a la cama, tratando de buscarla bajo la tela - Sal de ahí Jyushiko, o es que ¿acaso tienes pena ahora?
La rubia descubrió su rostro y lo observó riendo, luego lo atrajó hacia a ella abrazándolo y atrapandolo con ella bajo el cobertor, abrazándose a él. No lo dejaría ir ahora.
-¿Vas a dormir conmigo verdad, Ichimatsu? No quiero quedarme sola..- Suplicó la rubia, acomodando la mejilla en el hombro de su novio, acurrucándose.
- No pensaba irme a ningún lado. - Respondió el otro regresandole el abrazo con todo el cariño que podía transmitirle en el.
Jyushiko se acercó a besarlo, de forma suave y lenta, sosteniendolo con sus manos por el rostro, estaba entusiasmada y también cansada, nada le provocaba más que dormir con el hombre que quería y Ichimatsu, al mismo tiempo, se sentía vivo y envuelto en un aura pacífica en la que deseaba permanecer toda la noche y, si fuese posible, todos lo días de ahora en adelante.
Tardaron un rato en acomodarse para dormir, entre pequeños juegos, besos y uno que otro comentario, hasta que el sueño los venció, terminaron por acurrucarse bajo la sábanas, abrigados del frío de la noche.
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Fue casi a eso de las 11 de la mañana del siguiente día, el teléfono de Ichimatsu estaba sonando, y aunque el Matsuno se negaba a responder e ignorarlo, Jyushiko terminó por convencerlo de contestar al ver la insistencia del remitente, que tenía más de 15 intentos seguidos.
Entre quejas Ichimatsu se soltó del abrazo con la rubia y se levantó en busca de su móvil, sobre la peinadora lo alcanzó y verificó las llamadas, una que otras de Todomatsu y la mayoría de un número desconocido, el mismo que de nuevo estaba volviendo a llamar y está vez decidió contestar.
- ¿Quien habla? - Preguntó en tono amenazante y mal humorado. A lo que la voz femenina del otro lado de la línea respondió
-Matsuno, ¿Dónde estás? Se supone que deberías de venir ayudarnos a terminar los preparativos, tus hermanos ya están aqui, solo faltas tú. - Osoko se escuchaba bastante enfadada y estresada pero Ichimatsu decidió no tomarlo en cuenta, después de todo el tenía sus propios planes para el cumpleaños de Jyushiko.
-Estoy en casa de Jyushiko y... - El cuarto no pudo terminar de explicarse cuando ya escuchaba la voz de su hermano mayor quitándole el teléfono a la otra
- ¡Ichimatsu! ¡Maldito! ¿¡Lo hiciste cierto!? ¿¡Tuviste sexo con Jyushiko, verdad!? - Preguntó Osomatsu, bastante escandaloso y desesperado al parecer, mientras al fondo se escuchaba el forcejeo con Osoko para recuperar el teléfono. Ichimatsu por su parte guardó silencio, negándose a responder y el mayor, en vista que su hermano no respondía, asumió que estaba en lo cierto - ¡Ah! ¡Desgraciado! ¿¡Cómo te atreviste a ganarme primero en dejar de ser virgen!? ¡Te mataré! - De pronto se escuchó un golpe y estruendo al otro lado, luego un silencio antes de que Osoko volviera a estar en línea
- ¿Que vas a hacer, Matsuno?-
-Vamos a ir a comer luego iremos con ustedes, ¿O pretendes que la deje sola hoy? No lo haré, lo siento - Ichimatsu hacia lo posible por tratar de no delatar con quién estaba hablando, ni lo que ocurría, aparentemente estaba hablando con alguno de sus hermanos, o así lo entendía Jyushiko, quien se sentó en la cama frotándose los ojos, ya era hora de levantarse.
- Está bien, trata de mantenerla entretenida y traerla aquí a mi casa a las 5 pm, ¿Te parece bien esa hora?
- Está bien, nos vemos en la casa más tarde. - Avisó el cuarto antes de cortar la llamada y luego voltearse en dirección a la cama, dónde encontró a Jyushiko arreglando su cabello, se acercó a ella y aprovecho para darle un beso en la frente - Buenos días, feliz cumpleaños, Jyushiko.
La nombrada dudó un momento y luego abrió los ojos con sorpresa, se le había olvidado. No pudo evitar sonreír y lanzarse a abrazarlo
- ¡Gracias, Ichimatsu! - El Matsuno la envolvió con sus brazos con fuerza, disfrutando de tener el contacto de su cuerpo desnudo con el suyo
- ¿Tienes hambre? Vamos a comer, yo invito hoy...
CONTINUARÁ....
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HOLA! Cómo están? Perdone que tardará en publicar el capitulo, pensaba que iba a tener vacaciones de navidad pero el jefe tuvo otros planes para mí esa fin de año :'c Así que tuve una complicación pero eso no quiere decir que no intentaré escribir, le traigo por fin el capitulo 21 y próximo el 22! Nos veremos pronto!